Kim Taehyung es un cirujano exitoso que lleva una vida aparentemente perfecta en Seúl. Su carrera como cirujano le ha otorgado prestigio y reconocimiento, mientras que su matrimonio le ha brindado estabilidad y "felicidad." Sin embargo, lo que parec...
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Busan, 2001...
El interior de la fábrica de perfumes estaba inundado por un suave y embriagador aroma a flores frescas. El eco de las máquinas trabajando llenaba el espacio mientras los empleados se movían de un lado a otro con precisión, ajustando frascos y controlando el proceso de extracción de esencias. Taehyung y Jungkook caminaban juntos, fascinados por el bullicio ordenado a su alrededor. Los ojos de Jungkook brillaban con la curiosidad infantil que siempre lo caracterizaba. Aquel era el mundo de su padre, un mundo que había admirado desde que tenía memoria, pero que hasta ahora solo conocía desde la distancia. Con su curiosidad innata, no apartaba los ojos de las cintas transportadoras y los trabajadores que manipulaban flores de vivos colores.
—Hyung, ¿cómo hacen el perfume? —preguntó mientras tiraba suavemente de la manga de Taehyung.
Frente a una de las estaciones de trabajo, estaba un hombre mayor, vestido con un delantal blanco y guantes de gomas, que manipulaba cuidadosamente las flores de azalea. Este notó la mirada curiosa de Jungkook y sonrió amablemente.
—¿Quieres saber cómo se hace el perfume de azaleas? —le preguntó agachándose un poco para estar a su altura.
Jungkook asintió con entusiasmo mientras Taehyung observaba desde un lado, apoyado contra una de las columnas metálicas, más interesado en la reacción de Jungkook que en el proceso en sí.
—Primero, tomamos las flores frescas y las colocamos en estos frascos de vidrio —señaló unas pequeñas cápsulas donde las azaleas eran aplastadas suavemente, liberando un jugo transparente y fragante. —Este proceso se llama maceración. Aquí, las flores liberan sus aceites esenciales, que son los que usamos para fabricar el perfume.
El trabajador sacó con cuidado el líquido y lo vertió en una máquina más grande que parecía hervir suavemente el extracto floral.
—Después, lo mezclamos con alcohol para que el aroma se conserve y no se desvanezca tan rápido —observó cómo el líquido giraba en el interior del dispositivo. —Es un proceso delicado, porque queremos capturar la fragancia suave y dulce de la flor sin perder su esencia natural. Luego dejamos reposar la mezcla para que todos los componentes se combinen correctamente. Es un proceso delicado, cada gota de esencia es preciosa.
Jungkook miraba fascinado, y sus ojos nunca se apartaban del líquido que se iba transformando en perfume ante sus ojos. Sin embargo, fue lo que el hombre dijo después lo que capturó la atención de ambos jóvenes.
—Pero, ¿sabes? La azalea también tiene un lado oscuro —añadió mientras sus manos se movían con precisión. —Es una flor peligrosa.
—¿Peligrosa?
—Sí, si usamos las hojas, los tallos o incluso el néctar de la flor, podemos extraer una toxina llamada grayanotoxina. Es un veneno muy potente. Se necesita un proceso similar al de la extracción de aceites para el perfume, pero mucho más cuidadoso. Si la procesamos de manera incorrecta o usamos partes específicas de la flor, podemos extraer un veneno letal. Hay que tener mucho cuidado con las dosis, porque un pequeño error puede ser mortal.
