𝑽𝒊𝒗𝒊𝒓𝒆 𝒉𝒂𝒔𝒕𝒂 𝒆𝒍 𝒇𝒊𝒏𝒂𝒍 𝒅𝒆 𝒍𝒂 𝒉𝒊𝒔𝒕𝒐𝒓𝒊𝒂

Capitulo ocho.

Un mes después.

El tiempo avanza rápido. Ya a pasado un mes desde el juicio, lo último que supe es que la antigua emperatriz con tal de evitar el exilio, terminó por pedir el mismo té que le dió a mi padre.

La encontraron muerta en su mazamorra el día que iban a llevarla a la isla.

Desde entonces, todo parece estar tranquilo. Evidentemente el imperio se volvió caos por un momento ante la baja de la emperatriz y Namjoon tuvo que hacerse cargo de muchos de los trabajos de su madre.

–Señorita–, Yeona se queda parada en la puerta.

–Si son ellos, ya sabes que decir–, le respondo.

Estas semanas Taehyung y Hoseok han estado tratando de retomar el "grupo de estudio".

–Señorita...la cosa es que, su alteza imperial está aquí también–

–¿Namjoon?–

Yeona asiente. –Y aparentemente el emperador vendrá en un momento–

Suspiro. –Envía a los niños de vuelta, cuando el emperador venga entonces avísame–

Yeona titubea. Después solo asiente, –Entiendo. Con permiso–, sale de mi habitación.

Me pregunto que puedo hacer para salir de la historia.

Hace unos días envié a Jungkook a buscar información sobre algo, pero no a regresado y eso me tiene ansiosa.

Me levanto de la cama y me acerco a la ventana. Abro esta y siento el aire matutino recorrer mi rostro.

Me recargo en el barandal del balcón, inhalando y exhalando el aire fresco.

Sé que ya llevo demasiado tiempo sumida en mi tristeza, pero me está costando bastante salir de ella.

A veces me quedo pensando en como podría salir de esta historia pero no viene ninguna respuesta.

Miro hacia abajo.

Ah. Eso es.

¿Qué pasa si Chaerin muere?.

No se me había ocurrido eso. ¿Será que finalmente pueda descansar?, ¿Y si vuelvo a despertar con ocho años?, ¿Seré capaz de renacer en mi mundo?.

Antes de darme cuenta, ya estaba sentada en el barandal, con los pies colgando al vacio.

Solo es una prueba. En todo caso, si no muero, probablemente solo tenga algunos huesos rotos.

Tomo un respiro, cierro los ojos. Me impulso, dejándome caer.

Antes de siquiera sentir dolor, un tirón me hace abrir los ojos. Mi brazo está siendo sostenido, así que levanto la cabeza.

Ah, Yeona, dijiste que el emperador llegaría en un momento, pero no dijiste que sería rápido.

El emperador me observa con horror, sosteniendo mi brazo.

–¡Toma mi brazo con tus dos manos!–, me dice.

Bueno, mi experimento no podrá ser concluido hoy. Hago lo que me dice, sujetando su brazo con mis manos.

Él me levanta sin mucho esfuerzo, supongo que soy bastante ligera.

Una vez en el balcón, sorprendentemente, él me abraza.

Es extraño así que mi cuerpo se tensa.

.........
Namjoon.

Los sirvientes nos pidieron irnos, de nuevo se niega a salir de su habitación.