~☆Eleven☆~

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La gran entrada de la mansión Hwang se abrió en el momento que Hyunjin ingreso con su Roll Royce lujoso de color negro,esta vez conducía el ya que había olvidado accidentalmente a su asistente en esa tienda de convivencia, hasta gracias le daba de recordarlo.

Raramente estaba de buen humor esa tarde,después de su salida repentina con Yang Jeongin se le subió demasiado el ánimo que se tomaría el resto de la tarde libre para firmar documentos y encargarse de las fincas.

Hyunjin poseía más de quince fincas donde habían cacaina y entre otras sustancias, siempre distribuía pequeñas cantidades en todas ellas para que no sean tan notorias,ya que,no podía temer su mercancía en su mansión ya que al ojo de todos el era un empresario famoso, en realidad sí lo era,en parte de trabajar siendo un criminal también estaba en lo legal.

Hwang no solo comercializaba drogas,también lo hacía con armas de fuego para personas que no querían de licencia,tanto el como sus amigos trabajaban en el mismo círculo redondo de dinero sucio aunque fuera de peligro de ser  descubiertos ya que su figura pública era ser uno de los mayores empresarios de Seúl que tenía sus sucursales por todo el país y exteriores

¿Quien sospecharia de un hombre así?

De todos los años que tuvo Hwang de mandado ante que muera su padre nunca ha pasado nada,nadie jamás ha descubierto su secreto que no sean sus empleados y hombres armados,obviamente también enemigos del mercado que trataban de tachar a Hyunjin para poder vender más de sus propias mercancías, pero el resto estaba bien,como todo narcotraficante tenía sus enemigos.

Una vez estacionó su carro en su gran parking se dirigía hasta dentro de la mansión,donde las mucamas abrieron las puertas para que Hwang pase.

-¿Donde esta Yeonjun, Minji?-

-Esta arriba trabajando lo que le ordenó señor Hwang  -

Hyunjin hizo un sonido de afirmación para subir las escaleras que lo llevaban  las infinitas habitaciones, la más notoria era la de Hwang, que tenía una gran puerta con madera de Sequoia al igual que si oficina de trabajo.

Entro a su oficina y dejo su saco sobre el pequeño perchero que estaba ahí y se sentó en su típica silla de escritorio, Yeonjun estaba a un lado revisando papeles sin despegar si vista de ellas.

-Bienvenido señor Hwang. -Saludo el  castaño.

Yeonjun era el único que podía entrar a su oficina ya que era su asistente personal, por lo tanto no habría problema alguno.

-Choi necesito que investigues a alguien. -

-Claro,dime el nombre y lo haré enseguida.-

-Jung Wooyoung. Necesito saber todo sobre esa persona para mañana a primera hora.-Dijo Hyunjin seriamente.

-De acuerdo,me pondré a trabajar ahora.-

Aseguró el castaño y Hyunjin estaba en un rotundo silencio,iba a averiguar todo sobre tal hombre inepto que tuvo las agallas de desafiaron,y peor,de meterse con su pequeño muñequito.

-Usted recibió como veinte mensajes de Lee Heeseung hace unas horas.-Aviso Yeonjun con una risa.

-Nah,solo lo olvide en una tienda de convivencia. -Chisto Hyunjin sonriendo con un poco de gracia.

-No sabía que iba a esos lugares,pensé que no te gustaban.-

-Si,no me gustan pero tuve que encargarme de algo.-

Hyunjin miró su agenda y maldijo un poco mientras se pasaba su mano sobre la cabeza el evento,lo había olvidado por completo.

Hyunjin había previsto que en menos de un mes organizarla una segunda fiesta,pero esta vez de socios de su mismo círculo, iban a recibir cargamento nuevo de coca y heroína y la forma más directa de hacerlo era en esa fiesta,ya que los Kim vendrían únicamente si hay fiesta de por medio,esa familia era una fiestera.

El Muñequito De Hwang (Hyunin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora