El tiempo pasó rápidamente y después de un mes podría decir que ya estaba mejor que nunca, era cierto que aún cargaba con la espinita de melancolía de mi ex relación, jamás había entendido lo duro que podía ser un duelo al terminar una relación, pero ahora eso me hacía mantener un sabor agridulce en mi boca cuando recordaba los buenos momentos que tuvimos
—Señorita, ¿está lista para su última escena de hoy?.— preguntó Chucho sacándome de mis pensamientos
Asentí mientras me levantaba y salíamos de mi camerino. Durante este mes había pasado la mayor parte de mis días sola gracias al éxito que estaba teniendo Chucho en el programa donde estaba participando, por alguna extraña razón le gustaba usar sus días libres siendo mi asistente
—Por cierto.— dije mientras nos dirigíamos al set donde haría una pequeña lectura de libreto con mis compañeros antes de grabar la escena —¿Sabes cuanto falta para lo de la Velada? Quiero estar libre ese día.—
Aún no tenía muy clara la fecha de ese evento y tampoco quería preguntársela a Roberto, ahora lo consideraba algo así como un amigo bastante cercano así que le estaba planeando una sorpresa
—Según tengo entendido falta poco más de un mes.— avisó, realmente el tiempo se había pasado volando desde aquella vez que fuimos a la presentación a España —Por lo que recuerdo es el 13 Julio.—
—Necesito entonces que me consigas un vuelo.— pedí —Yo creo que me iré para allá desde el 9 de Julio, así me dará tiempo de hacer lo que necesito.—
—¿Irá sola o con el señor Beto?.— cuestionó
—Sola, él irá por su lado, supongo que con sus amigos.— respondí sin más —Ni siquiera quiero preguntarle si puedo ir con él o preguntarle que día tomará su vuelo, aprendí que no podemos obligar a las personas a elegirnos y de alguna manera siento que así lo estaría forzando a convivir de más conmigo cuando él fue quien me pidió un tiempo.—
Tanto para Beto como para mí; usar la expresión "darnos un tiempo" sonaba tan irreal, ambos manteníamos el pensamiento de que esa era una tontería, después de todo, si amas a alguien no necesitas un tiempo... pero nosotros ya nos habíamos convertido en la excepción de la regla, o quizás ya nos estábamos acostumbrando a la ruptura
—Yo considero que debería preguntarle al señor Beto, tal vez a él le gustaría tenerla cerca en un momento tan importante.— aconsejó y lo pensé un poco, tal vez tenía razón
—Lo llamaré saliendo de aquí.— aseguré y levantó su dedo con aprobación —Primero terminemos con el trabajo.—
—Muy bien señorita, como diría mi abuelo "primero lo que deja y después lo que apendeja".— exclamó y fue inevitable reír, sin duda me hacía tanto bien tener a Chucho de mi lado, era como esas personas con energía positiva que podían contagiarte de buen humor
Llegamos al set, cuando me vieron entrar me pasaron una copia de mi libreto y me acerqué a mis compañeros para poder ensayar las líneas antes de grabarlas.
(.....)
La escena nos llevó la mayor parte de mi tarde así que salimos de aquel lugar pasadas las 7 pm, no era tan tarde, pero hoy había empezado a trabajar desde las 8 am, estaba bastante agotada, mi trabajo no era tan sencillo como se podía pensar, pero estaba contenta por los resultados
Íbamos en el auto; mientras mi chofer conducía, Chucho iba como copiloto jugando con la tablet así que me recosté en todo el asiento de atrás para cerrar los ojos y relajarme, estaba a punto de quedarme dormida hasta que un grito me hizo sobresaltar
—¡Señorita _____!.— gritó Chucho provocando que el chofer frenara de golpe y yo me acomodara —Debe ver esto.—
Intentó pasarme la tablet, pero me quejé sin tomarla, él solía enseñarme cuando lograba un nuevo récord en el juego "Angry Birds"
—¡Hágame caso y vea!.— exclamó exaltado
—Tampoco me grites Chucho.— lo miré mal y tomé la tablet
Abrí mis ojos sorprendida al ver como de nuevo era tendencia porque al parecer se habían filtrado fotos mías con mis compañeros del elenco, entre todas resaltaban unas con Gerardo, así que los chismosos de twitter empezaron con sus estúpidas teorías conspiranóicas donde me tiraban hate
—Beto me terminó hace más de un mes y la gente está usando eso para atacarme ahora, osea claramente no salgo con nadie más, pero si lo hiciera no tendrían que atacarme ¿no?.— cuestioné
Empecé a leer lo que había, usaban los insultos que lamentablemente ya estaban normalizados hacia la mujer, igual había una que otra amenaza, la gente en redes eran tan raros...
Por un momento algo importante cruzó por mi mente, le devolví la tablet a mi asistente y saqué mi celular. Lo miré por unos segundos mientras intentaba analizar lo que estaba a punto de hacer, ¿realmente quería llamar a Roberto para aclararle lo de los rumores antes de que los viera? ¿y si en este momento a él eso no le importaba?
—Usted había dicho que lo llamaría.— murmuró Chucho mirándome desde el retrovisor —Aproveche este pretexto y así también le pregunta lo de la velada.—
—Me hiciste ir a terapia durante este mes y aunque sé que aún me faltan cosas que aprender, sé que no es bueno darle explicaciones innecesarias.— murmuré —Pero...—
—¿Puede hacerle caso a su corazón?.— pidió cansado —No quería decirle esto, pero pronto dejaré de ser su asistente permanentemente para dedicarme a lo mío, soy su amigo así que estaré pendiente de usted, aunque no será lo mismo que seguirla la mayor parte del día. Debe empezar a tomar decisiones para su futuro, si realmente quiere volver con su ex novio debe dejar de sobre pensar las cosas y actuar, ya si él no quiere será mejor que de un paso a un lado.—
¿Me había avisado que renunciaría pronto?, quizás tenía razón, no podía seguir alargando esto, en el fondo intenté convencerme que veía a Roberto como un amigo para así no agobiarlo, pero debía dar mi último intento, ya si no funcionaba sería momento de darle un final
—Cambiemos de destino, necesito ir a la casa de Roberto.— pedí a mi chofer
No sabía que le diría, solo quería tener las cosas claras de nuevo
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𝐋𝐀 𝐑𝐄𝐈𝐍𝐀 𝐃𝐄 𝐂𝐎𝐑𝐀𝐙𝐎𝐍𝐄𝐒 𝐑𝐎𝐓𝐎𝐒 [Roberto Cein X Tú]✓
Fanfiction𝐋𝐑𝐃𝐂𝐑|| Donde _____, una actriz reconocida, conoce a Roberto en una fiesta donde estaba prohibido saber su identidad. O donde Roberto, un streamer cansado de la monotonía, decide mantener el juego del anonimato.