For my promise(Kuroko no Basuke)

Capítulo 5: Kise Ryōta

Nos encontrábamos en el vestuario cuando Koganei agarró un ejemplar de una revista deportiva algo vieja. Resultaba ser una publicación con entrevistas de todos los integrantes de la Generación Milagrosa, la ojee por un momento deteniéndome en uno de ellos. Sin importar cuánto tiempo haya pasado, él seguía brillando.

La puerta se abrió abruptamente dejando ver a Fukuda bastante ansioso, ni bien se cerró escupió todo lo que tenía para decir y de todo eso entendí que íbamos a tener un partido de entrenamiento con una escuela fuerte.

La entrenadora era incapaz de ocultar su emoción soltaba risitas extrañas mientras se zarandeaba de un lado a otro suavemente.

— ¡Muchachos!—. Exclamó—. ¡Vamos a tener un partido de práctica!—. Todos la miramos expectantes, queríamos saber el nombre de la otra escuela—. ¡Así que quiero que se pongan los chalecos amarillos y azules!

Ya con los chalecos puestos me fui a sentar en un banco, la entrenadora me ordenó que observara el partido desde afuera por mientras. Tuvo varios errores por parte de todos, a pesar de ver un poco de luz en algunos de ellos.

Taiga depende demasiado de su físico, sobre esfuerza sus piernas y eso podría causarle alguna lesión en ellas además de que su forma de defender no era muy buena y necesitaba de alguien que pudiera guiarle, también podría agregar que tiene una taza de tiros errados alta debido al poco control de fuerza que tiene y eso complejiza la forma en la que juega.

Kuroko parece seguir bien el juego, pero hay un punto que está perdido, depende demasiado de su juego fantasma como para desarrollar otra forma de actuar individualmente más ofensivo además se cansa más rápido que los demás jugadores por lo que necesitaría aprender técnicas de respiración.

El resto de los de primer año necesitaban mucha ayuda con sus técnicas, eran completamente mediocres, pero algo de fe les tenía. Por otro lado los de segundo, eran mucho mejores que los de primero estaban mejor organizados y podía ver habilidades personales en cada uno de ellos.

El sonido de un silbato me asustó.

Estaba tan metida en el partido que no noté a la entrenadora moverse.

— ¡Vayan al centro!—. Ordenó, le hicimos caso—. Bueno, en unos días vamos a tener un partido con la preparatoria Kaijō

— ¡¿Con la preparatoria Kaijō?!

—Exacto...— Afirmó la entrenadora—. No me defrauden, vamos a poner muchos de primer año en la cancha.

-—¿Defraudarla? Pero si son mucho mejores que nosotros.

—¿Realmente son tan fuertes?—. Cuestione emocionada.

— Son fuertes a nivel nacional—. Aseguró el capitán—. Ellos juegan en la Inter-Hight cada año.

— Además, la preparatoria Kaijō, tiene en sus manos a un miembro de la generación de los milagros, Kise Ryōta.

— ¿Ehhh?—. Cuestiono alguno de primero nervioso—. ¿De la generación de los milagros?

— Estoy tan emocionado, quiero que ya sea mañana—. Murmuré

— Al parecer Kise trabaja como modelo—. Dijo el capitán.

— ¿En serio? increíble.

— ¿Bien parecido y bueno en baloncesto? Eso es brutal—. Se lamentó Koganei.

— Descuiden chicos—. Hablé posando mis manos en sus hombros—. Cuando encuentren a su chica ideal ella solo va a tener ojos para ustedes... capaz.

— ¡Oh cállate! Eres el menos indicado para hablar—. Se lamentaron mientras se alejaban lloriqueando.

El lugar fue llenado por el murmullo de muchas chicas, alcé la mirada como todos llevándome la sorpresa de ver una fila de ellas emocionadas con libretas y lapiceras en la mano. Al inicio de esa fila se encontraba un chico rubio extremadamente atractivo con un arete en la oreja.