Jisung nunca planeó quedar embarazado y mucho menos del jefe de la mafia más peligrosa del país Lee Minho. Ahora atrapado en un mundo de sombras y violencia Jisung no solo debe protegerse a sí mismo sino también al los bebés que lleva dentro. Mientr...
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El día había comenzado como cualquier otro para Jisung, inmerso en su rutina diaria. Había flores que encargar, pastelerías a las que llamar y clientes con los que lidiar. La noche anterior había dejado una pregunta rondando en su mente ¿Cómo sabía Minho dónde vivía? Pero por ahora esa era solo una más en la lista de preguntas sin respuesta que guardaba sobre él.
Mientras preparaba sus cosas para recibir a la próxima pareja una notificación en su celular lo sacó de su concentración.
[Nuevo mensaje]
[Desconocido]
¿Nos vemos esta noche?
¿?
Soy Minho.
¡Hola! ¿Cómo conseguiste mi número?
¿Te molesta?
No, claro que no. Nos vemos entonces.
Sí, yo paso por ti.
Ok, te espero.
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— ¿Con quién saliste anoche? Te veo muy sonriente — preguntó Hyunjin entrando en la oficina con una sonrisa traviesa.
— No es de tu interés — respondió Minho sin apartar la vista de sus papeles.
— Nunca compartes nada. Pero bueno, eso no es lo que vine a decirte. La Familia Dae quiere que vayas a cenar con ellos esta noche.
— No les debo nada ¿por qué tendría que ir? —respondió Minho con un tono seco.
— Ya sabes, los viejos piensan que tu padre hubiera querido que te casaras con la hija de los Dae.
Minho dejó caer sus papeles sobre el escritorio, su expresión endureciéndose.
— Eso es una completa estupidez. Ese era el pensamiento de mi padre, no el mío. Y si no quieren aceptar que no me casaré con la hija de una familia que no nos aporta nada, tal vez deberíamos disolver esa amistad.
