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Capitulo 10: Armonía















Christopher, como cada mañana, fue el primero en levantarse. El sol apenas despuntaba, pero él ya estaba revisando el motor y las placas solares que había montado en el estacionamiento. Minho y Jeongin, siempre tempraneros, ya estaban despiertos también. Mientras Jeongin revisaba algunos trastos en la cocina, Minho lo ayudaba con el desayuno. Era un día más en los apartamentos, pero todos sabían que Christopher siempre tenía algún plan bajo la manga.

Cuando el desayuno estuvo listo, Minho, con una sonrisa en el rostro, se dirigió a donde estaban los demás.

—Hora de levantarse, chicos. Si no quieren que Christopher los arrastre de las cobijas, más vale que se levanten por las buenas.

—Ugh... —gruñó Jisung desde su rincón, cubriéndose la cara con la manta—. ¿Es absolutamente necesario levantarse tan temprano? Yo pensé que el apocalipsis era sin horario.

Félix, que dormía a su lado, se estiró como un gato. —Vamos, hermano. Mejor levantarse antes de que Christopher nos ponga a hacer algo aún más cansado por no estar listos a tiempo.

Christopher apareció en la puerta del cuarto, cruzado de brazos y con una mirada que no aceptaba discusión. —Vamos, levántense. Desayunen rápido. Hoy tenemos mucho que hacer.

—Sí, sí, jefe... lo que tú digas —murmuró Jisung, arrastrándose fuera de su colchón y poniéndose los zapatos a medio cerrar.

Minutos después, los ocho estaban sentados en la sala improvisada de uno de los apartamentos. La mesa era una mezcla de muebles rescatados de varias habitaciones, pero al menos tenían un espacio para comer todos juntos. El sol entraba a raudales por las ventanas, iluminando la pequeña escena.

El desayuno, aunque simple, era bastante bueno: unas tortillas que Minho había preparado con lo poco que quedaba de harina, y un par de latas de frijoles que Christopher había guardado para la ocasión. Aunque el menú no era gourmet, lo cierto era que, en ese momento, les sabía a gloria.

—Bien, escuchen —comenzó Christopher, hablando con esa voz firme y segura que siempre usaba cuando tenía algo importante que decir—. Hoy quiero que limpiemos todos los apartamentos, no solo los que vamos a usar. Si vamos a quedarnos aquí a largo plazo, necesitamos que todo esté en perfecto estado.

—¿Todos? —preguntó Félix con una ceja levantada—. Son como... ¿dieciocho, no?

Christopher asintió. —Exactamente. Somos ocho, así que si nos organizamos, podemos terminar antes del mediodía. Quiero que todo esté impecable.

—Oh, sí, claro. Porque es súper necesario tener todos los apartamentos relucientes en medio de un apocalipsis —murmuró Jisung, pero lo suficientemente bajo como para que Christopher no lo escuchara.

Félix lo empujó con el codo y sonrió. —Sabes que tiene razón. Si mantenemos todo en orden, será más fácil administrar el lugar. Además, imagínate... podríamos montar una inmobiliaria postapocalíptica. "¿Buscas apartamento con luz solar garantizada y suministro de agua? Llámanos, te conseguimos la mejor opción". Podríamos poner a Christopher como el modelo de los anuncios.

Jisung soltó una carcajada. —Sí, claro. "Apartamento de lujo en tiempos de crisis. ¡Incluye líder musculoso y cerebro de genio para todas tus necesidades!"

Minho, que estaba comiendo en silencio, soltó una risa nasal. —Si Christopher los escucha, va a ponerlos a fregar hasta los baños.

Christopher, que aparentemente los había escuchado de todos modos, les lanzó una mirada de advertencia antes de continuar.

Infectados_Banginho.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora