Flor De Loto / Bakugo Katsuki

Capítulo 8

—Hola Kacchan— dije sonriéndole, iba llegando a mi turno, pues había pedido el de la tarde el día de hoy porque quería salir a desayunar con Zuzu y All Might en la mañana.

—No me hablas así, idiota— dijo con su típica molestia mientras se subía a lo que supongo es su moto.

—Perdón, no sé cuál es tu nombre sinceramente, no suelo prestar atención a eso en las clases— dije algo apenada— y escucho que así te habla Zuzu.

—Soy Bakugou para ti y el estúpido pelo de brócoli— se escuchaba aún más molesto.

—Bien, Bakugou, ¿Cómo te fue en tu turno? — pregunté tratando de calmar el ambiente tenso que se había formado.

—Qué te importa — dijo para terminar de ponerse el casco e irse, que odioso.

Entre al local, fui a tomar mi mandil y la pluma con la libreta, en cuanto salí me acerque a Susuki, quien estaba en el mostrador.

—Es agradable, algo indiferente, pero agradable— dijo de repente.

—¿Cómo? — la vi confundida.

—Tu amigo, Bakugou, el chico que entró de repartidor.

—Ohhh, ¿Segura que es el mismo? Porque antes de irse  parece que me mandó lejos— dije de forma irónica.

—Tal vez le molesto que no estuvieras en el mismo turno que él— ¿esa mirada qué? ¿Por qué me veía de forma divertida?

—¿Qué dices?

—Oh ya sabes, quizá el solo entro a trabajar por ti, digo, pregunto dónde estabas y en cuanto le dije que entrarías en el siguiente turno y seguramente no te verías pareció molestarse un poco, aunque después se le paso— dijo restando importancia.

—No creo, ni siquiera lo conozco, solo es mi compañero de clases.

—Bien, lo averiguaremos mañana, estarán juntos, mientras yo atiendo la cocina, es una apuesta— dijo guiñándome un ojo mientras se alejaba a atender a una pareja de chicos que acababan de entrar.

El turno transcurrió rápido, había bastante gente para ser sábado.

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El día de hoy también me tocaba el turno de la tarde, está vez me había puesto una camisa tipo polo color negra, pues mi jefe había mencionado que teníamos que distinguirnos del ahora repartidor, quien siempre llevaría color naranja.

Llegué 10 minutos antes, Susuki ya estaba ahí como siempre, tomando el turno completo, la saludé y entre al vestidor por mi mandil y mi libreta. Cuando salí lo ví entrando quitándose el casco, no pude dejar de verlo, se veía lindo con el cabello revuelto y el tratando de peinarlo.

—¿Qué diablos miras? — dijo con su típica voz molesta.

—Nada que te importe— dije mientras me acercaba a una mesa a tomar el pedido, voltee atrás mientras lo hacía y lo ví acercarse a Susuki, ¿Por qué a ella le habla de forma agradable? Espero que sea porque es más grande que nosotros, además, a mí que me importa.

—La pelirroja dijo que tú me darías los pedidos— dijo acercándose— estaré ayudándole en la cocina mientras llega alguno. — dijo mientras se ponía una malla en la cabeza y se dirigía en la cocina.

—Haz lo que quieras— dije mientras llevamos mis platillos a sus respectivas mesas.

A los 20 minutos llegaron varios pedidos al mismo tiempo, anoté la dirección y fui por Bakugou a la cocina, cuando abrí la puerta ví que Susuki estaba riendo de algo que el hacía, que molestia, se supone que viene a trabajar, no a distraerla.