Capitulo 13

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*NARRA KATSUKI*

Después de aquella pelea en el trabajo con Akua, acercarme a ella resultaba complicado, y no porque fuera ella quien se alejara, si no que era yo quien no podía siquiera verla a los ojos, un extraño sentimiento de culpa se apoderaba de mi cada que la veía, quizá si no le hubiera reclamado tan alterado algo tan estúpido me habría enterado de una mejor forma que ella jamás había vivido en Japón, aunque ahora eso explicaba el japonés tan mordido con el que hablaba, pero no explicaba el porque entonces tenía un apellido Japonés, y tampoco explicaba porque mierda me sentía así cuando nunca antes había pasado, incluso pensé en disculparme, pero es obvio que eso es algo que jamas puedo hacer, sencillamente porque yo nunca me equivoco.

Para compensar ese pequeñísimo percance, comencé a llevarla a casa cada vez que salíamos de los turnos de la noche, bajo la gran excusa de que era tarde y no podía irse sola ya que según era peligroso, así no teníamos que hablar, y por ende, no tenia que decir las estupidas palabras de "Li siinti".

Todo iba bien, o eso parecía, la observaba de lejos, siempre estaba con sus amigos, y se iba con ellos al salir de la escuela, esa era su rutina, hasta que comenzó a entrenar por las tardes con la maldita oruga durmiente que tenemos por profesor, sabía que era tonta, pero no creí que fuera tan tonta como para tener que entrenar tiempo extra para controlar su quirk, o eso fue lo que habia escuchado una tarde terminando la clase.

Internamente buscaba la forma de volver acercarme a ella, de saber cuál era la maldita razón que me hacía querer hacerlo, tenía su número, pero un simple mensaje no bastaría, necesitaba hacer algo más directo, digno del futuro héroe número 1, pero no contaba con que se aparecería una nueva basura en mi camino, una que tendría la apariencia de un maldito extra que parecía emo, la primera vez que los ví juntos creí que se habrían topado por accidente después del almuerzo, aunque después de analizar la situación, ese dia ella no se encontraba comiendo junto a los otros extras y el idiota de Deku, así que lo mas obvio era que estaba con él, me acerque a preguntarle, pero lo único que conseguí fue que me dijera tonto a mi, A MÍ, ¿CÓMO SE ATREVIA A HACER ESO? NADIE TENIA EL DERECHO DE OFENDERME.

Definitivamente no se merecía mis disculpas, no después de eso, así que decidí ignorarla y hacer como si ella no existiera, pero mis sentidos parecían querer llevarme la contraria, siempre terminaba observándola de lejos, y fue ahí cuando lo descubrí... Se atrevía a decirme tonto cuando la tonta era ella, una de esas mañanas pude ver cómo la ilusa se escapaba a la hora del almuerzo para ir al jardín trasero de la escuela, seguramente creía que nadie la vería, pero no fue así, no todos éramos tan estúpidos como el maldito brócoli pero yo no, yo era muy inteligente, y la descubrí, viéndose con otro mientras salía con el otro idiota, porque aunque ella lo negara, yo sabia que esos dos andaban, y no entendía porque, pero eso me molestaba aún más.

Me molestaba tanto lo que hacía que incluso en el trabajo la ignoraba, preferiría pasar mi tiempo dentro de la cocina donde la pelirroja me enseñaba a cocinar platillos nuevos, a estar parado en el salón mientras la veía atender mesas, ni siquiera le hablaba para los pedidos, ni para saludar, ni cuando la llegaba a casa, bastaba con estirarle el maldito casco para que lo tomara e irnos, eso funcionaba para mí, hasta que nuevamente, alguien tenía que cagarla.

A pesar de que el restaurante llevaba bastantes años abiertos, apenas había comenzado a hacerse más conocido, cada día llegaba más gente y nosotros tres no nos dabamos abasto, así que contrataron a alguien más, no creí que fuera tan malo, pero la maldita parecía un retrasada babeando cada vez que me veía pasar, me acariciaba las manos de forma extraña cada que me entregaba las direcciones de los pedidos, definitivamente prefería que Akua me los diera, aunque eso incluía su maldita indiferencia.

Flor De Loto / Bakugo KatsukiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora