ENTELEQUIA // Minsung

Cap 13

Minho pov

Mi cabeza estaba dando vueltas, por un momento no controlé mi equilibrio así que tuve que sentarme, el hacer mucho esfuerzo cargando cosas pesadas creo que me hizo mal...Las chicas que se quedaron conmigo me ayudaron mucho, una de ellas me puso agua fria en mi nuca, me dijo que eso aliviaría mis mareos y tuvo toda la razón.
En cuanto a la otra, fue a la camioneta para conseguir mis pastillas que se me habían olvidado ahí, llegó con una botella de agua ya abierta para que pudiera tomarla.

Estuvieron conmigo en todo momento atentas de que no me pasara nada pues de repente llegaba un vértigo de la nada, pero podía controlarlo. Esperé por un rato recargado en el árbol que estaba detrás de mí sin darme cuenta que tomaría una corta siesta, no sé ni como pude...En realidad es difícil para mí dormir con ruido a mi alrededor, puedo escuchar música pero no ruido, movimientos.

Mis ojos se sentían pesados pero me negaba a dormir con algún dolor de cabeza...Mi abuela solía decirme que era malo hacer eso ya que muchas personas se iban a dormir así por no tomar medicina para la migraña y terminaban sin despertar porque el dolor se acumuló durante la noche provocando una muerte cerebral, otros terminaban paralizados y los que sobrevivían sin nada...Eran un milagro.
Creo que me dejé llevar de más por sus comentarios lo que ocasionó que me diera temor dormir así pero como mencioné, no sé ni cómo mis ojos dejaron de obedecerme y se cerraron.

Después de un rato desperté pero en una casa de acampar, mi cabeza ya no dolía como hace rato pero si sentía ligeras punzadas en ella; Acostumbrándome a la luz logré reconocer a la silueta que se estaba acercando para abrir la tienda...Era él.

—Min! —entró apresurado dejando lo que tenía en el piso— Estás bien? Como te sientes? Tu cabeza te duele? Trajiste tu medicamento? Quieres que te lleve a u-

Le tomé el rostro con mis manos para tranquilizarlo, estaba histérico y nervioso, hablando rápido la verdad no iba a entenderle nada, de hecho no entendí lo que acababa de decir.

—Tranquilo y habla despacio —lo miré a los ojos.

—Cómo te sientes? —una voz calmada salió.

—Ahora me siento mejor —sonreí quitando mis manos de su cara— No sé porqué me sucedió eso la verdad, yo estaba bien y de la nada pues...Ya sabes.

—Quieres que le llamemos a tu padre? —me miró— No creo que sea conveniente que sigas aquí en estas condiciones.

—Pero quiero disfrutar más el viaje, aún nos quedan dos días —suspiré— No me quiero ir...

—Pero sabes que eso no es bueno Min.

—Aveces siento que hubiese sido mejor si yo hubiera muerto en ese accidente.

Vi como su rostro se deformó transformándose en uno que no quise haber visto, al mirarlo así creo que me arrepiento por haber dicho eso...Me va a dar una paliza.

—¿Eso piensas? —me miró— ¿Estás seguro?

—Creo que las cosas hubieran estado mejor si no estuviese aquí —asentí— Acabo de darme cuenta que si hago esfuerzo mi cabeza me duele, que si estoy en el mar comienzan los vértigos, que tengo que cuidarme de esto, no puedo lanzarme un clavado, no puedo divertirme o reir de más porque habrán consecuencias...Todo estará mejor sin mí.

Un silencio llegó con la fría brisa que me erizó la piel, él no decía nada, incluso después de lo que confesé...¿Se habrá enojado o estará pensando?

—No puedo creer lo que acabo de escuchar —entre una risa sarcástica habló— Tú —me señaló con una sonrisa— De verdad, eres un egoísta de m-