Maybe♡KabuSaku♡

Vigésimo Primer Pecado

El cielo se miraba tan azul por la ventana, justo como los dias que viajó a su lado. El mismo cielo.

Pero él ya no estaba, ni siquiera el pequeño pelinegro. Estaba sola en aquella habitación de hospital, tan desolada y hermética.

Kakashi la llevó a un hospital cercano en la aldea de la roca, cerca de la guarida donde estuvo con él. Donde compartieron sus últimos momentos juntos.

No está enojada o lo resiente. Sabía que debía volver en algún momento, estar a su lado se había vuelto lentamente peligroso. Lo que hizo, dejarla libre, fue un acto de amor sí. Ella nunca habría tenido la fuerza de voluntad para decir que ya era hora. Que su tiempo juntos había expirado y era hora de cada quien regresar a donde pertenecen.

Se sentía avergonzada por lo ocurrido pero de igual manera no estaba arrepentida. Sabía lo que pensaba si sensei y el pequeño escuadrón de 3 personas que llegó a su "rescate". Probablemente la compadecian por el estado en el que estaba cuando fue encontrada, cuando en realidad todo fue consensual y recíproco. Por supuesto que que nunca confirmaría aquello. ¿Que pensaría su sensei de ella, cuando fue la que incitó al chico serpiente a ultrajarla de aquella manera?

La puerta de la pequeña habitación se habré dejando ver al ninja copia entrar con un rostro derrotado. Los círculos bajo sus ojos lo dicen todo.

A pesar de que daría está feliz de verle, su felicidad no se hace notar. Extraña a Yakushi. Extraña a Konoha. Su corazón duele tanto por estar tan divido.

"Sakura, ¿Cómo te sientes?" Pregunta el mayor sentandose a su lado.

"Podría estar mejor." Susurra. Claro que podría estar mejor. Al lado de Kabuto, acostados en su cama platicando sobre algo estúpido.

"Iremos a Konoha pronto. Ya casi nos dejan ir." Pronuncia en un intento de animarla. La chica sonríe con los labios cerrados y la observa desviar la mirada hacia la ventana.

A espaldas de la peligrosa, el ninja copia hace sus manos músculos y quiere destruir algo... A alguien. Sakura siempre había sido su pequeña alumna, se siente culpable por no darle el tiempo, dedicación y entrenamiento que merecía. ¿Si lo hubiera hecho... Todo esto hubiera sido diferente? Se odia a sí mismo por las dilaciones en el camino, por no haber llegado por ella de inmediato.

Pronto dejarían el hospital de la roca, Sakura se encontraba en buen estado después de todo. No desnutrición o deshidratación. Tan solo el maltrato físico. Kakashi inmediatamente piensa que aquello es raro, pero al menos agradece que de algún modo, quien quiera que haya sido su captor, la mantuvo bien alimentada y le dió lo que necesitaba.

Sakura no dijo nombres. No describió rostros. Era obvio que era alguien bajo Orochimaru, su mente inmediatamente viajó a Sasuke. Pero claro que él no fue, él nunca le hubiera echo eso a su antigua compañera. Tal vez una vez la pelirosa se sintiera cómoda compartiendo la información, por fin podrían darle caza a la persona responsable por tal acto.

"Kakashi... ¿Por que ser ninja es tan duro?" Y era una pregunta honesta. Como ninja, nunca podría traicionar a su aldea por un hombre como Kabuto. Un villano, un secuaz de Orochimaru. Alguien peligroso. Alguien al que nunca debió haberle entregado tanto.

"Perdoname Sakura, por todo lo que pasaste." La pelirosa niega con la cabeza.

"Nada de esto es tú culpa."—Musita ella.—"es mía, por no poder contra aquellos ninjas. Por caer en manos del enemigo sin siquiera saberlo." Así es. Enemigo. Kabuto era el enemigo. Todo esto se había terminado. Los besos, las caricias, las cachetadas y las embestidas. Por Kami, todo esto parecía un sueño irreal. Ella no era así. La mujer que dejó salir cuando debajo y arriba del cuerpo del peliblanco no era ella. Ella era kunoichi de la hoja, aprendiz de la quinta Hokage y alumna del ninja copia. Lo que sea que pasó dentro y fuera de la mazmorras durante su cautiverio, no fue real. No era ella. Y si aún cree que está enamorada de Kabuto, dejaría que el tiempo lo decidiera.

"Todo estará bien. Iremos a casa y todo volverá a la normalidad." Asegura el ninja tomando su mano que tenía sobre sus piernas, encima de las sábanas .

Sakura sonríe a Kakashi, un poco triste pero aún así, feliz de sus palabras.

Normalidad.

Casa.

Al tiempo y lugar donde Yakushi no puede existir. O al menos no son muchos problemas, con el peligro pisándole los talones. Se dedica a pensar un momento. Kabuto nunca iría tras ella en konoha... ¿O si?.