¿Hilo rojo?, Debe ser una broma

18

Propiedad

Wilson era un alfa reconocido por ser amable, bondadoso, cariñoso y posesivo con su familia.

House era conocido por ser un omega ignorante, sarcástico y para nada delicado.

Peter, su hijo, era un omega dominante pero bastante amable y descortés en algunas ocasiones, se notaba a kilómetros de quien era hijo.

—Escucha, solo nos iremos dos días pero si necesitas algo...— intentó hablar el alfa de la familia mientras que su esposo se burlaba de él.

—Lo sé, lo sé, estaré bien, cuídense.

—Ni se te ocurra traer a esa amiga tuya.

—Mary Jane es una buena amiga, pa — se quejó mientras los echaba de su casa.

—Tu padre tiene razón, sus feromonas son agresivas para ti — dio su última palabra House y se subieron al taxi que los llevaría al aeropuerto.

—Ti pidri tini rizin, si como no — rodó los ojos sin importancia para agarrar su celular y llamar a alfa.

—¿Peter?, ¿Qué sucede?, ¿Estás bien?

—Mis padres se fueron por unos días,  ¿Quieres venir? — preguntó mientras sonreía y en su tono de voz se escuchaba ansioso.

—Claro, llegaré en unos minutos — cortó la llamada para dejar soltar un suspiro embobado.

La puerta fue tocada casi al instante y no dudó en abrirla, sonrió dulcemente cuando sus ojos se conectaron con la morena.

—Hola.

—Hola... — volvió a la realidad para poder dejarla pasar a su hogar y cerrar la puerta.

—¿Qué quieres hacer?

—Tengo películas y palomitas de maíz.

—Siempre con buenas ideas — sonrió para despeinar un poco al omega y sentir ese dulce aroma a caramelo.

El menor no dudó el colocar las palomitas en un recipiente para ir al sofá junto con la joven.

La morena no dudó en pasar su brazo por detrás de los hombros del omega para acercarlo un poco más a ella.

Peter por mera inconsciencia dejó un poco a la vista su cuello para recibir las feromonas de su contrario y acomodarse mejor en su hombro.

La película terminó más rápido de que cualquiera de los dos hubiera imaginado y el menor algo decaído supo que debía despedirse de la morena.

—Podríamos hacer una pijama — sugirió casi por instinto al notar el decaimiento del contrario.

Cuando la noche llegó terminaron pidiendo pizza y un par de refrescos para tomar, escucharon un par de músicas, estuvieron bailando un poco y contando algunas bromas al azar para lograr para el tiempo.

—Baby, I'm dancing in the dark — comenzó a tararear la morena mientras se ponía atrás de Peter que se encontraba lavando los platos —With you in my arms, barefoot on the grass.

—Listening to our favorite song, I have faith in what I see — le siguió el menor para voltearse y quedar cara a cara con su contrario.

—Now I have found an angel in person and he looks perfect.

—Eres tan cursi — se burló de la alfa mientras soltaba una leve risa. Antes de que pudiera decir algo más sintió que era cargado para quedar arriba de la mesada con un leve sonrojo.

—Así te atraigo.

—No lo niego — sus frentes en algún momento lograron chocarse, sus narices se rozaron dulcemente y sus labios se juntaron luego de tanto tiempo.

El omega aceptaba cada cortejo de esa alfa, la reclamaba cada que tenía oportunidad para que ningún otro lograra acercarse, en el instituto no dudaba tampoco en marcar territorio dejando de forma sutil su aroma.

La alfa tampoco quedaba atrás, en ningún momento se apartaba y gruñia a cualquiera que se le acercara a lo que era suyo, porque haría todo lo posible para mantenerlo a salvo.

—Los labios del superhéroe problemático son realmente dulces.

—Cállate, atrapar criminales es demasiado fácil.

—Pero eres un buen héroe del vecindario, eso les da seguridad a algunas personas.

—Al menos dejaron de inculparme de algunas cosas — se quejó levemente mientras escuchaba una tierna risa de parte de la joven.

—¿Sabes?, el pequeño héroe necesita un premio — acercó aún más su cuerpo al de Peter para que este lograra entrelazar sus piernas al rededor de su cintura.

—¿Qué clase de premio obtendré de tu parte?

Las risas no dudaron en aparecer mientras sus labios volvían a juntarse de manera dulce y tierna, MJ lo alzó con cuidado para llevarlo a su habitación y poder acomodarse de una ves por todas.

La morena acurrucó en su pecho al ojiazul quien simplemente aceptó las caricias con demasiado gusto ya que se notaba en sus feromonas.

—Entonces...¿Le dirás a tus padres?

—Claro, aunque seguramente nos controlen demasiado por ser adolescentes — se burló para después volver a sentir los labios de la contraria y una mano masajear uno de sus muslos.

—En eso tienen razón — liberó un poco de su aroma mientras sonreía levemente.

—Quizás si lo nuestro dura...

—Claro que durara toda la vida, nos casaremos, podré marcarte y te llenaré de cachorros, confía en eso — besó de manera lenta al omega mientras acariciaba sus mejillas.

Sus padres cuando llegaron de sus vacaciones los habían encontrado almorzando pacíficamente. Cuando Peter reunió fuerzas para contarles de su relación, Wilson casi ataca a MJ por besarlo delante de ellos.

Greg simplemente logró burlarse y hacer uno que otro comentario, James aceptó a regañadizas su amor adolescente, amenazando a la morena si llegaba a lastimar a su único y preciado hijo, no volvería a ver la luz del día.