★﹕Twelve . (2/2)

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Un rubio dorado se había hecho presente en la escena, con esa típica sonrisa de picardía y malicia que para cualquiera resultaría menos que irritante o escalofriante

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Un rubio dorado se había hecho presente en la escena, con esa típica sonrisa de picardía y malicia que para cualquiera resultaría menos que irritante o escalofriante. Para Stanley y Fiddleford era de todo, menos agradable.

"Bueno, ya llegó el alma de la fiesta." Stanley comentó con sarcasmo.

Bill le guiñó un ojo con coquetería falsa. "Tú sabes que ese soy yo, fortachón." Apoyó su antebrazo contra el hombro de Stanford y se acercó a su rostro. "¿Estás teniendo problemitas con..." Miró de arriba hacia abajo a Fiddleford como si fuera lo más desagradable que pudo haber visto nunca. "...ese engendro que tienes como ex?"

"Hey, rubia teñida. Si vamos a hablar de engendros, esa palabra te queda corta, ¿sabes?" Stanley se puso a la defensiva y Fiddleford sintió una sensación cálida en su estómago al ser defendido.

"¿Te pregunté?"

"¿Y por qué me contestas?"

"Bill, basta." Stanford paró a quien se supone que es nueva pareja.

"Lo siento. Pero tu copia barata es insoportable." Rodó los ojos.

Fiddleford hasta este punto sentía ganas de vomitar y no sabía si era por el alcohol o por lo desagradable que era ver a tu ex-pareja con su amante tan pegados el uno con el otro, y todo sin que fueran juzgados. Quizá estaba siendo cruel, pero quería que todos se enteraran de la clase de persona que eran aquellos dos y que tomaran cartas en el asunto.

Quería que Stanford sufriera, y que sobretodo, que Bill sufriera. Más que nada él por haberse metido en una relación que era tan bella para él. Aunque la mayoría de culpa la tenía Stanford por jamás haber dicho nada. Tal vez estaba siendo algo injusto con Bill, por más que lo odiara.

"Stanley, vamos a la universidad..." Susurró cerca del oído del menor.

"Aw, pobrecito. La damisela en apuros no puede soportar perder, al parecer." No. Definitivamente quería que Bill sufriera.

"Controla a la perra de tu novio, Stanford." Stanley escupió con todo el odio del mundo. Stanford frunció el ceño con desagrado. Antes de que pudiera decir algo, Stanley se había llevado a Fiddleford, tomándolo de la mano, cosa que hirvió su sangre en celos.

Bill claramente notó esto, y no pudo evitar sentir una ola de celos igualmente. Tomó los cabellos de Stanford y los tiró ligeramente con una posesividad, sacándole un gemido de dolor.

"Te recuerdo que eres mío. Yo gané, ahora me perteneces, Fordsy. Más te vale que no vuelvas a buscar al campesino de cuarta." Seguido de eso, atrapó sus labios en un beso candente y apasionado, sin importarle que la gente estuviera a su alrededor. De todas formas, cada uno estaba en su mundo.

Mientras tanto, Fiddleford y Stanley ya habían salido del bar. Fiddleford no había alcanzado a ver aquel beso que Bill y Stanford se habían dado, y eso era bueno, porque sabía que en cualquier momento iba a vomitar. Estaba sumido en sus pensamientos, sin darse cuenta de que seguía tomando la mano de Stanley que era incluso más grande que la suya.

ਏ ݂  The Replacement .   ๋ਓ  🍓  FiddleStan - FiddAuthorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora