8 [La Pijamada]

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No sean lectores fantasmas 😡, ahre, joda.


Eran las 8 de la noche. La luz suave de la habitación iluminaba mi rostro mientras estaba en videollamada con Camila, buscando el outfit perfecto para la noche.

- Ese vestido resalta tu cintura de maravilla, amiga. - dijo Camila, su voz llena de entusiasmo.

- ¿De verdad crees que así la enamoraré? - pregunté en tono de broma, jugando con el dobladillo del vestido.

- No te pongas mejor, que ya me estoy calentando. - continuó ella, riendo. No pude evitar soltar una carcajada.

- Amiga, te dejo por ahora. Voy a cambiarme y a hablar con Vicky para coordinar dónde nos encontramos. - dije apresurada antes de cortar la llamada.

Tan pronto como colgué, Victoria me envió un mensaje pidiéndome que le compartiera mi ubicación para que pudiera venir a buscarme. Rápidamente se lo envié y, para mi sorpresa, llegó en solo diez minutos.

El timbre sonó, y mi mamá la hizo pasar a mi habitación.

- ¡Es grande! - exclamó de repente, admirando el espacio.

- ¿Qué cosa? - pregunté, riéndome de su comentario.

- Tu casa. - respondió con una sonrisa.

- Sí - dije, sonriendo mientras le tendía la mano para saludarnos.

- ¿Ya estás lista? - preguntó, y yo asentí, tomando un bolso negro que complementaba mi vestido azul corto y ajustado, que llevaba con unas botitas.

Una vez listas, subimos a un Uber que nos llevó a casa de Mariana, donde nos esperaba una noche llena de sorpresas. Al llegar, nos saludamos con entusiasmo. Éramos cuatro: Mariana, la anfitriona; Victoria; Mauro, el hermano de Mariana; y yo.

Lo primero que hicimos al llegar fue acomodarnos en el sofá, listas para sumergirnos en un maratón de películas, risas y charlas que prometían hacer de la noche algo inolvidable.

Mariana se levantó y se dirigió a la cocina para hacer palomitas, llenando el aire de un aroma a mantequilla que despertaba el apetito. Mientras tanto, en el sofá, Mauro y Victoria intercambiaban risas y anécdotas, ya que se conocían de antes. Yo, sentada en un sofá individual, los observaba en silencio, sintiendo una mezcla de curiosidad y nerviosismo.

- ¿Y tú? - preguntó Mauro, volteando su atención hacia mí. Le sonreí tímidamente. - ¿Cómo te llamas? -

- Soy Julia - respondí, extendiendo la mano para estrechársela.

- Ah, ¿la popular del colegio? - dijo, con una sonrisa que no lograba ocultar su sorpresa. Fruncí el ceño, sorprendida por su comentario. - Un amigo me habló de ti. - continuó. - Dijo que eras la popular, que estabas en el mismo salón que mi hermana y todo eso.

- Bueno... no sé si popular sea la palabra, pero sí, creo que sí. - respondí, sintiéndome un poco incómoda por la atención. Justo en ese momento, Mariana regresó con un tazón de palomitas, rompiendo el silencio incómodo con su energía.

- Ven aquí. - me llamó Victoria, moviéndose para hacer espacio a su lado. Volví a sentir mariposas en el estómago.

- ¿Terror, comedia, romance o acción? - preguntó Mariana, con el control en la mano, lista para elegir la película.

- Romance. - respondió Victoria, con un tono sarcástico que me hizo dudar de su intención, pero a mí me emocionó un poco.

Al final, Mariana decidió poner "Chucky". Mi corazón se hundió al reconocer el título; las películas de terror siempre me habían aterrorizado. Intenté sonreír y unirme a la diversión, pero en el fondo, sabía que aquella noche iba a ser un desafío para mis nervios.

"Confusión De Amigas"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora