Más acontecimientos...
Isabel se fue a Turquía, a veces logro desenvolverme un poco, aunque las salidas no son iguales, pero algo es algo.
Ya les hablé de mi plan y obvio a ninguna les parece bien, creen que algo saldrá mal, pero no voy echarme para atrás.
-¿Estás segura? Yo opino que no- dice Irina, haciéndose una cola alta. -Es que si se entera te jodes.
-No me voy a joder, además lo haré disfrazada- trato de convencerla.
-Sigue siendo una pésima idea- guarda las cosas en su mochila. -Sexo, Elena... además puede ser venganza pero es tú primera vez. «Aja, mi primera vez, pero con el pene»
-Solo quiero que se quede con las ganas, tengo autocontrol, no voy a acostarme con él.
-Supongo que lo harás allá- asiento.
Salimos de la cancha, en donde a veces vengo a ver las competencias en las que participa, siempre le gustó mucho todo esto del voleibol y todas obviamente la apoyamos.
Como de costumbre nos encontramos con Alessia, luce bastante bien, lleva unos jeans anchos, tenis y top de tirantes. «Aquí vamos otra vez, sinceramente no estoy de humor».
Ella sonríe con un ademán de (Pero miren a quienes tenemos aquí) Me doy la vuelta, lista para irme, pues no quiero problemas y prefiero evitar.
-¿Pero por qué se van? Cariñito si tan solo vieras el anillo de promesa que me dió, porque me quiere a mi- alardea.
-Creo que tiene miedo y está resentida- dice una de sus "amigas" -Ay, yo creo que si- responde la otra.
-¿Miedo? ¿A ustedes?- pregunta Irina cruzada de brazos- Evitar no es tener miedo- tratamos de caminar hacia el otro extremo de la calle.
-Uy pobrecitas, ¿Van a llorar con sus papás? -finge inocencia. -Cierto, lo olvidé, ninguna de ustedes tiene.
La sangre me hierve, este fue un golpe bajo, cualquiera puede perder a sus seres queridos, yo no me alegraría de algo así.
-Ay bebé, si tan solo fueras Italiana, tendrías una pequeña posibilidad con él, pero lamentablemente eres "Dominicana" sin clase, para colmo huérfana y sin estilo.
-¿Pelear por un hombre que no te ama es tener clase?- la paciencia se me está por agotar, al ver cómo sufre mi amiga, por sus palabras- Si es así, pues felicidades, pero saca a nuestros papás de tu asqueroso hocico.
-¿Qué dijiste maldita perra?- su voz es "amenazante", pues está "Furiosa".
-Saca... A... Mis... Padres... De... Tu... Maldito... Hocico- le suelto, desafiante, porque sinceramente ya me tiene harta.
No tengo tiempo de reaccionar, cuando sin previo aviso me abofetea, me arde la cara y la expresión de Irina es indescriptible. «Otra de las cosas que más odio». El golpe que le devuelvo es tan fuerte que se tambalea.
-Me las vas a pagar- dice, y seguido de esto, se abalanza contra mi, agarrándome del pelo tirando fuerte, ambas caemos al suelo, la tengo debajo y sigo quitándome las ganas que tanto guarde, bofetada tras otra mientras ella también me golpea.
Una de sus amigas intenta levantarme pero Irina la aparta, amenazándola. -Ni se te ocurra, esto es entre ellas- Métete y te parto tu mandarina en gajos.
Alguna vez has escuchado decir que la fuerza de la mujer se debilita cuando la toman del cabello, si, es cierto. Logro levantarme aún con ella del pelo, cerrando las manos en puños y golpeando su cara con violencia, no siento los golpes que recibo y solo quiero acabarla.
-Vas a aprender a no meterte conmigo, maldita hija de perra. -la amenazo, mientras la sacudo a la fuerza, para soltarme de su agarre- Esto es lo que querías- la empujo de frente contra una pared varias veces.
-¡Suéltala!- una de sus amigas me agarra separándome de ella, pero volvemos a juntarnos- ¡Joder, está sangrando!
-¡Por favor, ayuda! -pide la otra a las personas que van pasando por aquí, pero nadie hace caso- ¡La va a matar!
-¡Lena! ¡Joder Lena! Nos van a llamar a la policía- las súplicas de Irina son las únicas que me hacen volver en mí, no tenía planes de parar, aunque estaba cansada.
Hombres vestidos de negro y gafas oscuras se reúnen en un círculo, dejándonos a ambas en el centro, uno me levanta como si fuera una muñeca de trapo y a ella la revisan como si fuera la Reina Isabel... Tiene una cicatriz arriba de una ceja, aparte de la sangre que sale de su nariz.
-Esto no se ha terminado, ¡Maledetta stronza!- amenaza mientras se la llevan a uno de los autos, a las amigas a otro coche y se largan, el hombre me baja, advirtiendo sobre las consecuencias por la pelea.
Gloria a Dios, mala suerte la mía de que no se le cayeron los dientes, ¿Las citas con su abogado? Me valen mierda, no tengo miedo, ella empezó.
No fue por él, fue por su osadía de ponerme las manos encima incluso viendo que traté de evitarla.
Escupí sangre por uno de los golpes pero no tengo heridas visibles, después de calmarme finalmente siento dolor en el estómago y ardor en algunas zonas del cuerpo.
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Ademán: Seña o gesto hecho con la cara o con alguna parte del cuerpo con que se manifiesta un afecto, intención o sentimiento.
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~In Trouble~ ® (+18)
ContoSoy Elena Collins, alguien que nunca pensó hacer todo lo que hizo y si mi pasado fue oscuro imaginate el presente.