Koishiteru

Koishiteru 15

CAPÍTULO 15

Dos largos días había estado Kagome sumida en la inconsciencia, así lo sintieron todos los que estaban en la cabaña de Kaede.

Había tenido algo de fiebre, posiblemente por el estrés y tantas emociones en un solo momento pero ahora descansaba, aún así no había dado señales de despertar pronto.

No sabían que había pasado para que la joven no despertara después de un par de horas pero no apartaban la mirada de ella, especialmente Sesshomaru.

El príncipe del Oeste no se apartaba ni un momento de su amada, al fin la tenía a su lado y no pensaba separarse de ella aunque siguiera creyendo que él había sido su atacante porque él mismo se encargaría de cobrar venganza y demostrarle que jamás sería capaz de herirla.

La volvería a enamorar y así poder vivir su historia de amor interrumpida y se encargaría de hacerla feliz por la eternidad.

Un suave quejido y un leve ceño fruncido llamó la atención de Sesshomaru quien era el único dentro de la cabaña en ese momento.

Sujetó la mano de su amor y pasó su garra suavemente por la mejilla, lentamente Kagome comenzó a abrir los ojos.

Su vista era borrosa y la luz que entraba a la cabaña no le dejaba enfocar bien la mirada.

Volvió a cerrar los hermosos pozos azules que tenía por ojos para volver a abrirlos y parpadear repetidas veces hasta que por fin pudo ver con claridad.

Viendo el techo del lugar supo que esta en una cabaña, aún tenía recuerdos confusos de lo que pasó cuando se desmayó.

Miró a su alrededor hasta que su mirada azul se encontró con la dorada de su eterno amor.

-Kagome, al fin despiertas-

Alivio era lo que se reflejaba en la mirada del futuro Lord. Alivio de ver a su compañera despierta y ver que se encontraba ilesa.

-Sessho...maru...-

Pronunció el nombre del ser que tanto ama casi en un susurro, estaba confundida y no sabía cómo reaccionar.

La mirada de Sesshomaru era sincera, pura, irónicamente para ser un demonio. Era una mirada transparente.

Ese no era el Sesshomaru que la atacó hace 300 años pero ahora tenía una duda aún más grande.

Realmente había sido SU Sesshomaru quien la atacó a traición? Y si no había sido él entonces...

Quién había sido tan cruel como atacarla por la espalda?

Qué intenciones tenía para hacerlo y hacerle creer que había sido su pareja?

Qué razón movía tanto odio como para intentar hacer que se odiaran? Porque era claro que lo había logrado, al menos por un tiempo.

Ella había odiado a su atacante por largo tiempo y aunque no recordaba en ese momento el rostro de ese ser sabía a la perfección que se trataba de alguien muy importante para ella pues el dolor en su corazón era terrible pero ahora ahí se encontraba ella, dudando de ese sentimiento que tuvo por tanto tiempo hacia ese hermoso demonio que tenía frente a ella con una mirada suplicante y de clara preocupación.

Estaba claro que ahora ya no estaba segura de eso, Inuyasha se lo había dicho. El hanyou estuvo todo ese tiempo con Sesshomaru y quien le atacó estaba solo, además deseaba con todo su corazón que no fuera Sesshomaru porque ella lo amaba tanto.