Esa noche, la luna brillaba intensamente, y los suaves sonidos de la naturaleza se filtraban por la ventana de la habitación de Cole. T/n y Cole habían pasado horas hablando y riendo, compartiendo historias de sus experiencias pasadas en campamentos y haciendo planes para el próximo. Finalmente, el cansancio los había vencido, y se habían quedado dormidos, acurrucados el uno junto al otro en la cama de Cole.
Al amanecer, los primeros rayos de sol se colaron por la ventana, iluminando la habitación y llenándola de un cálido resplandor. T/n despertó primero y se estiró, sintiendo la paz de la mañana y el suave calor del cuerpo de Cole a su lado. Sin querer despertarlo, se levantó con cuidado y decidió prepararse para el día.
Mientras se vestía y recogía sus cosas, T/n no podía evitar sonreír al recordar lo bien que se había sentido hablando con Cole la noche anterior. Sin embargo, también había una parte de ella que se preguntaba cómo reaccionaría Jackie al verlos juntos.
Cuando finalmente salió de la habitación, se encontró con Jackie en el pasillo, que estaba de pie con una expresión de sorpresa en su rostro.
Jackie- (mirando a T/n con curiosidad) ¡Oh! ¡Buenos días! ¿Tú... tú pasaste la noche aquí?
T/n sintió un ligero rubor en sus mejillas y se aclaró la garganta, tratando de mantener la calma.
T/n- Sí, solo estábamos hablando y... me quedé dormida.
Jackie la miró fijamente, con una mezcla de sorpresa y algo más que T/n no pudo identificar. Después de un momento, Jackie sonrió, aunque su expresión seguía siendo algo confusa.
Jackie- Oh, está bien. Supongo que es normal, ¿verdad?
T/n sintió que algo en la voz de Jackie sonaba un poco diferente, pero decidió no darle demasiada importancia.
T/n- Claro, es solo que estábamos planeando el campamento y se nos hizo tarde. ¿Te gustaría desayunar con nosotros?
Jackie asintió lentamente, pero no pudo evitar lanzar una mirada hacia la habitación de Cole, lo que hizo que T/n se sintiera un poco incómoda.
Mientras caminaban hacia la cocina, T/n intentó romper el hielo.
T/n- Así que, ¿estás emocionada por el campamento?
Jackie- Sí, estoy un poco nerviosa, pero emocionada también. Me han contado que es muy divertido.
T/n- ¡Lo es! Hay tantas actividades planeadas. Solo tienes que relajarte y disfrutar.
Jackie pareció pensativa por un momento, y T/n no pudo evitar preguntarse si había algo más que le preocupaba. Al llegar a la cocina, Katherin y George estaban ya preparando el desayuno, llenando el aire con el delicioso aroma de tostadas y café.
George- ¡Buenos días, chicas! ¿Listas para un día emocionante?
T/n sonrió y se unió a la mesa, mientras Jackie parecía un poco más distraída, concentrándose en su plato.
Katherin- Jackie, ¿quieres que te prepare algo especial para el desayuno?
Jackie- No, está bien. Solo lo que ustedes estén comiendo.
T/n notó que Jackie no estaba tan animada como antes y se preguntó si estaba preocupada por algo. Intentó cambiar de tema.
T/n- ¡Chicos! Adivinen qué actividades queremos hacer en el campamento. ¡Lucas tenía una idea genial sobre una búsqueda del tesoro nocturna!
Lucas, que estaba sentado al lado, se animó de inmediato.
Lucas- ¡Sí! ¡La búsqueda del tesoro va a ser épica! Tendremos pistas escondidas por todo el campamento.
