Dicen que la sangre encontró al inocente y el asesino encontró a su redención...
Mientras el fuego los consumía ambos danzaban justo en la oscuridad...
Las llamas los alcanzo finalmente para ambos contar su amor a la muerte...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Durante el camino no pude dejar de pensar en ella, una vez más me había enamorado y había perdido, con esto confirmaba que en mi destino no estaba escrito vivir una historia como esa y mucho menos siendo lo que soy, finalmente mi padre tenía razón y mi destino siempre sería estar solo.
- Señor – dice Sadik quien me acompañaba junto algunos de mis hombres a su cargo
- Sadik – digo asintiendo cuando salgo del coche quedando justo en la pista del aeropuerto a unos metros del jet esperando por mi
- Señor Hoxha – el capitán se acerca a saludar mientras sacan mis maletas de la camioneta
- ¿Todo listo? – pregunto
Lo único que quería ahora era largarme cuanto antes.
- Todo se encuentra perfecto señor, en cuanto quiera podemos irnos – dice haciéndome asentir
Él se aleja mientras yo me quedo con mis hombres quien esperan mis órdenes.
- En cuanto Ali les de la orden los espero en Japón para seguir trabajando – digo haciéndoles asentir
- Como siempre estamos a su servicio Dhuratë – dice Ahmet uno de mis cuervos haciéndome asentir
- Que tenga un buen viaje señor – dice Sadik entregándome mi pequeño maletín en el que llevaba algunos papeles importantes
Después de tomarlo y darles una mirada mas me dirijo hacia el Jet pero el pitido insistente de una camioneta hace que me detenga a mitad de escaleras para ver que es Viktor.
- ¿Qué mierda esta haciendo aquí? – pregunto mientras regreso
- Mikel – dice bajando rápidamente pero cuando estoy a punto de confrontarlo por no seguir mis ordenes veo una cabellera rizada bajar rápidamente de la camioneta
- Viktor – demando cuando la veo caminar a paso decidido hacia mi
- Solo escúchala – dice a unos metros de mí, pero me quedo helado cuando siento sus pequeñas manos tomar mi rostro y unir nuestros labios rápidamente
Sigo el beso mientras me obligo a guardarlo en lo mas profundo de mi mente, así como la sensación que causa en mí.
- No te vayas – es lo que escucho en cuanto me alejo de ella
Miro esos preciosos ojos avellana mirarme con angustia y temor.
- ¿Qué haces aquí? – pregunto alejando sus manos de mi para tratar de concentrarme en la situación
- Mikel yo... - dice, pero se calla haciéndome molestar y confundirme
¿A que vino si no tenia nada que decir, acaso era para hacerme sentir peor?
