El Dragón Durmiente (Issei x Harem)

Capítulo 14: La decisión

—... No.

—Su respuesta viene con toda su confianza casual habitual, dicha con la voz de un joven, un dragón, que había decidido rechazar la generosa oferta de Ravel. Aunque es solo una palabra de dos letras, a Ravel le toma un momento procesar su respuesta. Rias también, la pelirroja, hace una pausa y levanta la vista de su tarea de hacerle una mamada, incluso cuando Ravel se congela en su lugar, sus ojos se abren ligeramente.

Al ver que ambos demonios lo miran fijamente, esperando que él explique más, Issei simplemente se encoge de hombros.

—Realmente no me importa lastimar más a tu hermano, la verdad sea dicha. Él... realmente no es gran cosa. En cuanto a intercambiarte por Yubelluna... no. No estoy dispuesto a dejar ir lo que es mío por ningún período de tiempo. Y tú AHORA ERES mía.

Los ojos de Ravel se abren ante eso, y el rubor que se extiende por su rostro y baja por su cuello le dice a Issei que, si bien ella HABÍA sido completamente sincera acerca de querer conseguirle a Yubelluna también... sus palabras, no obstante, lograron dar un gran golpe en su corazón. Je, los demonios seguro que eran criaturas apasionadas, ¿no? Deslizando su mirada de Ravel hacia la pelirroja que actualmente chupaba su polla, Issei le da a Rias una sonrisa, colocando una mano sobre su cabeza y entrelazando sus dedos a través de su cabello.

"Los he reclamado a ambos... y eso significa que son parte de mi tesoro. Si alguien quiere alejarlos de mí ahora... entonces tendrán que hacerlo sobre mi cuerpo frío y muerto".

Un momento... y luego Rias está chupando su polla con aún más energía que antes. Ravel, mientras tanto, deja la comida que le estaba dando para rodear su cuello con los brazos, agarrando su rostro con sus manos después de un momento y girando su cabeza para poder besarlo. Él la deja hacerlo, incluso cuando ella saca la lengua lascivamente para que él la reclame, algo que él a su vez hace, mordisqueando la punta de su lengua antes de usar su propia lengua para luchar con la de ella hasta someterla.

Se besan así por un tiempo mientras Rias se balancea arriba y abajo sobre su polla, el entusiasmo de la pelirroja hace que pronto comience a garganta profunda su miembro. Ella lo está llevando por su esófago, algo en lo que claramente no está muy versada, pero sin embargo continúa de todos modos, ahogándose en su polla, tan enamorada de él que tomaría a la fuerza más de su carne de hombre en su garganta de lo que realmente podría manejar.

"Hulghk... Hulghk... Hulghk..."

Incluso cuando las silenciosas arcadas de Rias llenan la habitación, incluso mientras se folla la cara a sí misma en su miembro, Ravel se presiona contra él, exigiendo tanta atención como la que le está dando a Rias... o tal vez incluso más. Esto significa que su otra mano está requisada, la demonio rubia lo agarra por la muñeca y lleva su mano a su trasero. Para ser justos, Rias supera bastante a Ravel en el departamento de tetas... el único lugar en el que se acerca a su compañera demonio es su trasero, e incluso ahí...

Ah, pero Issei en realidad no tiene un tipo, independientemente de las inseguridades de Ravel. Él manosea y aprieta su trasero con una mano mientras la besa apasionadamente, todo mientras disfruta de la sensación de su cuerpo un poco menos voluptuoso frotándose contra él. Al final, ambas chicas logran lo que actualmente buscan... despiertan al Dragón Durmiente en medio de ellas, finalmente provocándolo a la acción.

Con un gruñido lujurioso, Issei aparta a Rias de su polla y arrastra a Ravel lejos de su boca. Los arroja a ambos sobre sus espaldas en la cama y se cierne sobre ellos por un momento, acariciando su polla mientras considera a cuál follará primero. Ravel, sin embargo, obviamente está entrando en su propio camino como miembro de su horda, porque responde antes de que él tenga la oportunidad de elegir, y se da vuelta sobre Rias, inmovilizando al otro demonio en la cama y sosteniéndola allí mientras besa a Rias de la nada.

Los ojos de la pelirroja se abren de par en par por lo que Issei puede ver, pero aunque se retuerce un poco, en realidad no lucha. Probablemente se deba a las palabras que Ravel le susurra a la otra chica, palabras que Issei está bastante seguro de que no debe escuchar, pero que logra escuchar de todos modos gracias a sus sentidos mejorados.

"De esta manera, ambas podemos tenerlo".

Por supuesto, la forma en que Ravel está frotando su coño contra el de Rias y aplastando su pecho más plano contra las almohadas de tetas de Rias probablemente también tenga que ver con cómo la pelirroja se derrite debajo de la rubia. Sonriendo levemente, Issei avanza y convierte a Ravel Phenex en una mujer honesta... es decir, empujando su polla ENTRE sus dos coños, en lugar de elegir uno u otro para follar primero.

Gracias al roce de Ravel, el paso entre sus coños es bastante estrecho, y la sensación de sus abdómenes suaves y esbeltos presionando contra su polla es bastante cálida y placentera. Además de eso, en el momento en que Rias siente su longitud, ella también empuja hacia arriba desde abajo, gimiendo en la boca de Ravel al mismo tiempo que la rubia comienza a gemir en la suya.

Los dos se besan, mientras Issei agarra el trasero respingón de Ravel y comienza a follar. No es un agujero convencional, sin duda, su polla está atrapada actualmente entre las dos chicas en lugar de penetrarlas, pero se siente bien de todos modos. Follando sus labios vaginales, follándolas a las dos al mismo tiempo... Issei gime mientras disfruta de sus dos nuevas adquisiciones. Eran algunas de las mejores incorporaciones a su tesoro hasta la fecha, de eso no había duda. Y... podía admitir que también le gustaban a ambas como personas.

Rias era... una buena mujer. Había visto algunas de sus interacciones entre sus sirvientes después de todo, y había visto lo que sentían por ella. La amaban y ella los amaba, incluso si su abrumadora presencia se interponía en el camino de eso. Mientras tanto, no sabía qué pensar sobre Ravel, pero sabía que ella quería quedarse a su lado. Ofrecerse a dejarlo de todos modos, aunque fuera solo por un tiempo, solo para que él pudiera beneficiarse de ello... eso hablaba de un altruismo que Issei podía apreciar bastante.

Empujando entre sus coños como lo está haciendo ahora, no pasa mucho tiempo antes de que las dos chicas se corran. Lo interesante es que logran alcanzar un orgasmo mutuo, llegando al clímax al unísono, como uno solo, sus cuerpos temblando y espasmándose y sacudiéndose alrededor de su polla. Incapaz de contenerse por más tiempo, incluso si realmente está disfrutando el cambio de ritmo... Issei se aleja y empuja dentro del coño de Rias, finalmente.

Sus ojos se abren de par en par y sus gemidos ahogados se convierten en chillidos mientras la lengua de ella y Ravel continúan batiéndose a duelo, pero antes de que la rubia pueda reaccionar adecuadamente a esto, él es sacado y empujado dentro de su coño. Ravel también chilla y se retuerce contra Rias, las dos chicas se abrazan aún más mientras Issei comienza a follarlas a las dos al mismo tiempo. Después de todo, solo porque haya pasado a la penetración no significa que no les vaya a dar lo que Ravel le prometió a Rias.

Una embestida en Rias, una embestida en Ravel, tal vez dos embestidas en cualquiera de las dos antes de volver a la otra... pero siempre, Issei cambia las cosas eventualmente, follándolas a las dos en igual medida, hundiendo a las dos encantadoras diabólicas en un estupor mutuo. Eventualmente, ni siquiera pueden seguir besándose, en lugar de eso simplemente se abrazan la una a la otra como si les fuera la vida en ello mientras sus rostros se transforman en puro y absoluto ahegao. Sus ojos se ponen en blanco y sus lenguas cuelgan de sus bocas mientras se rompen sobre su miembro, sus coños apretándose y apretándose y chorreando a lo largo de su longitud cada vez que está dentro de ellos.

Cuando finalmente se acerca su propia liberación, Issei no elige. No se corre en uno de ellos ... se corre entre ambos, empujando su polla una vez más entre sus cuerpos, calentando sus labios vaginales y dejando que su carga se derrame sobre sus estómagos y pechos, su semilla termina explotando fuera de la parte superior de su escote e incluso cubriendo sus caras mientras realmente se suelta, dejando que todo su semen después de una buena noche de sueño salga en un diluvio saludable que cubre tanto a Rias como a Ravel con su semilla.

Cuando finalmente termina, Issei se aparta y se baja de la cama, con su polla todavía colgando mientras se estira un poco y bosteza.

Estoy un poco sorprendido de que no hayas aceptado su oferta. Entiendo que quieras mantener tu tesoro cerca... pero ¿a costa de hacerlo crecer? ¿Estás desarrollando una debilidad por estos demonios, Issei?

Issei se ríe mientras la voz de Ddraig hace eco en su cabeza. Quizás lo sea... quizás sea solo un egoísta y posesivo de mierda. Honestamente, al final del día, lo que le había dicho a Ravel era bastante cierto. Claro, Riser Phenex lo había enojado al pensar que tenía algún derecho sobre Rias. Pero mientras que los instintos dracónicos de Issei habían sido completamente vigorizados por el desafío a lo que ya había decidido que era SUYO... también era capaz de pensar de manera lógica y racional.

Al final del día, él era el intruso aquí. Claro, la cantidad de poder que podía ejercer le había permitido no solo dictar términos, sino finalmente quebrar a Riser y ponerlo en su lugar... pero aún así, él era, en cierto modo, el malo. No como probablemente lo veía Rias, para ella él era su caballero de brillante armadura. Pero para todos los demás, Issei era un tercero que había arruinado un matrimonio planeado quién sabe hace cuánto tiempo entre los dos clanes demoníacos.

Al final, Issei había pisoteado mucho al tomar a Rias. Había pisoteado aún más cuando había reclamado a Ravel. Esto era justo... él era un dragón. Pisotear era algo así como lo que hacían. Tomar lo que querían, construir su tesoro y protegerlo de todos los que se acercaban, eso era lo que significaba ser un dragón. Issei era ese dragón.

Pero también había nacido como niño, y aunque había pasado mucho tiempo desde que se había considerado humano, tanto tiempo de hecho que sus años como dragón eclipsaron por mucho sus años como niño, Issei, no obstante, podía reconocer cuando la mentalidad de su dragón no encajaba bien con el mundo que lo rodeaba. Todo eso es para decir que, si bien no se arrepentía de tomar a Rias o Ravel, y no las devolvería a ninguna de ellas en un futuro cercano... sus quejas contra Riser Phenex habían llegado a su fin.

A menos que el idiota viniera a por él nuevamente, Issei dejaría el asunto ahí. Esa era la decisión a la que había llegado, esa era la elección que estaba haciendo. Y realmente, ¿qué razón tendría Riser para venir por él? ¿Su hermana? Hmph, Ravel estaba perfectamente feliz donde estaba, y a menos que hubiera malinterpretado bastante su relación, Issei ni siquiera había hecho NTR a Riser al elegir a su hermana en lugar de su Reina.

En general, esto estaba bien. Issei tomaría lo que quisiera, pero no iría demasiado lejos. Después de todo, Ddraig le había contado todo sobre aquellos de sus predecesores que habían tratado de alcanzar demasiado. Era fuerte, sí... pero siempre podría verse abrumado por los números, si permitía que sus enemigos se apilaran en su contra. Mejor no hacerlo, al final.

Hm, una sabia línea de pensamiento. Sí, aunque podrías quemarlo todo y luego hacer tu imperio de las cenizas... un Emperador no es nada sin sus súbditos, y esos mismos súbditos tendrán una multitud de razones para vengarse...

Precisamente. Hubo un balanceo del barco, y luego hubo un vuelco del barco. En realidad, Issei no quería mucho. No anhelaba las mismas cosas que algunos de los portadores anteriores de Ddraig habían querido. Sus instintos dracónicos gustaban de tomar el control mucho, pero en general, Issei solo quería que lo dejaran solo... con su creciente horda.

-xXx-

Las cosas proceden como se esperaba. Regresan al mundo humano antes del final del día, de regreso a la Academia Kuoh. Ravel termina uniéndose a Rias en su casa, ya que Issei realmente no tiene mucho espacio libre en la suya, con Asia quedándose con él. Rias promete cambiar eso, e Issei no se molesta en detenerla... el dragón en él ronronea ante la idea de tener una guarida adecuada, incluso si en esta época, una 'guarida adecuada' significaba algo parecido a una mansión o palacio.

La oferta de intercambiar a Ravel por Yubelluna llega como se esperaba. Issei lo rechaza, como dijo que lo haría. Hay algo de descontento con esto, pero Ravel se pone de su lado voluntariamente mientras lo hace, dejando en claro sus propios deseos. Poco después de eso, ella comienza a escribirse con su madre. Pasan dos días antes de que Ravel llegue a él en la Academia Kuoh, con una carta en la mano.

"A-Ah... Issei, tengo... es decir... a mi madre le gustaría visitarlo".

Parpadeando, Issei toma la carta de Ravel y la lee. Lady Phenex quiere venir a ver a su hija... y conocerlo, apropiadamente. Frunciendo el ceño, Issei piensa en eso. ¿Tiene una razón para decir que no? Mirando a Ravel, puede decir que ella espera que él diga que sí. Al mismo tiempo...

Ella podría estar tratando de recuperar a Ravel. ¿Es esto un juego para tomar de tu tesoro, Issei? Tal vez ella se ofrezca a cambio, como la querida Grayfia trató de hacer con Rias.

El recuerdo de la hermosa doncella sometiéndose a él total y absolutamente hace que el miembro de Issei se mueva en sus pantalones. De hecho, había vislumbrado a Lady Phenex al final del duelo cuando había elegido a Ravel como su recompensa. Ella era hermosa, a decir verdad, y su apariencia hablaba bien de lo que Ravel probablemente se convertiría en el futuro.

... Realmente no tiene ninguna razón para decir que no, al final. No realmente. No es el tipo de hombre que mantiene a una hija alejada de su madre o a una madre alejada de su hija, después de todo. Pero no se puede negar que cuando Lady Phenex llegue, es probable que se le acerque de alguna manera. Ya sea porque espera distraerlo de su hija, o porque está abrumada por su poder...

Issei necesita decidir cómo va a abordar esto. ¿Dominará a Lady Phenex a la primera señal de que ella tiene intenciones amorosas hacia él? ¿Se hace el tonto, lo ignora y la deja marchar sin tocarla, siempre y cuando ella no le haga una proposición directa? ¿O juega con ella y la provoca, una mezcla de las dos opciones que probablemente hará que ella le ruegue que le dé su polla, si es una mujer de voluntad débil?

Fin del capítulo...