No va a dejarme

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Lo que no te mata, te hace desear estar muerto. Tengo un hoyo en mi alma haciéndose cada vez más grande.

*Ruben*

-Melanie adora a Hayley.- dijo Willy riendo, mientras ambas jugaban, aún con la diferencia de edades se llevaban bastante bien.
-Todos adoran a Hayley.- dijo Luzu. -¿Y Mangel?
-Salió a comprar. Con Samuel.- dijo Cheeto, mientras usaba su móvil.
-Yo quería ir, pero no me dejaron.- dijo Alex rodando los ojos, entonces nosotros nos reímos.
-Tío, está bien, te quedas aquí con tu Cheeto.- dije con una sonrisa, para luego voltear la mirada hacia el timbre que sonó. -Iré a abrir.
-¡Si son los gilipollas que no me dejaron ir, que no entren!- gritó Alex y yo reí, entonces me levanté y caminé hacia la puerta de la casa que ahora Miguel y yo compartíamos.

Y sí que me llevé una sorpresa, pero no una buena.

-¿Qué haces aquí? ¿Cuántos malditos años han pasado ya? ¿10 o más?- La miré y apreté mis puños. -¿Cuando vas a dejarme en paz, Rachel?
-Siento que mi visita no sea de tu agrado, cariño, pero como tú lo dijiste...- Pasó de largo y entró. -Han sido 10 años, te extrañaba.
-¿No eres la tía de la fiesta?- dijo Luzu frunciendo el ceño.
-¿Hablas de la fiesta donde Mangel engañó a mi bebé?- dijo Rachel. -Hm, sí.- Soltó una risita.
-Si crees que eso va a molestarme, estas jodidamente equivocada. Ya estamos casados y tenemos una hija, nada de lo que pasó hace 10 años me importa ahora.- Dije. -Deberías irte ya, no recuerdo que te haya invitado.
-¿Sabes quién más no estaba invitada? La tía con la que cogía Mangel en aquella fiesta.- dijo Rachel.
-Sí, al parecer las putas siempre se invitan por sí mismas.
-¡TURN DOWN FOR WHAT!- gritó Luzu mientras Alex y Willy gritaban "OHHH!"
-K.O.- dijo Alex y se lanzó al sofá.
-Vaya, una visita a un amigo y no es bien recibida.- dijo bufando.
-Tú y yo no somos amigos.- dije apretando mis puños. Rachel me molestaba de sobremanera.
-Además, tú no quieres ser solo su amiga.- dijo Willy.
-Sí, vos queres que te la re ponga.- dijo Alex levantándose.
-Y no entendes que a él le gustan las pijas. PIJAS PELOTUDA.- dijo Luzu.
-Hm, gracias chicos, creo.- les susurré.
-NO NO NO, NO HE TERMINADO. Vos crees que te quiere garchar duro contra el muro y lento contra el pavimento? No. No. Él quiere que Mangel se lo garche, y él garcharse a Mangel cuando sale Ruben.- continuó Alex, confundiendo cada vez más a Rachel.
-Dile a tu amigo que se calme.- me dijo Rachel cabreada de cojones.
-Y con "tu amigo" te re refieres a mí, porque su otro "amiguito" ni se mueve con vos.- dijo Alex.
-Alex, ya, es suficiente.- dije.
-Porque vos si te morís mejor para Ruben, te odia y le re jode que estés acá. Te ve y dice "MAMÁ, OTRO PEJELAGARTO!"
-Alex.
-TE VE COMO VAGINA ANDANTE Y DICE "PARÁ QUE VOMITO".
-Alex.
-SI TIENE HAMBRE SE COME LA PORONGA DE MANGEL, PERO PREFIERE MORIR SIN COMER ANTES DE COMERTE LA CONCHA.
-Alex cálmate.
-HASTA LA PENDEJA DE JANNIES ES MEJOR QUE VOS.
-ALEX.
-LA FURIA ARGENTINA ME DICEN.
-ALEX.
-CUANDO TE VE LAS TETAS NO LE JODE PORQUE COMO NO TENÉS.
-ALEX LA PUTA MADRE QUE TE RE MIL PARIÓ CONCHUDO CALLATE.
-Igual ya se fue.

Y todos rieron hasta más no poder.

-Cuanta furia, Alex.- dijo Willy.
-Me jodió la pelirroja de mierda, seguro se pinta con ketchup la pendeja. Vende llaveritos.- dijo Alex.
-Creo que esa fue Jannies, no Rachel.- dije riendo.
-No no, igual, todas tus ex's son re pe-lo-tu-das y pelirrojas, además venden llaveritos. ¿Qué tienes con las pelirrojas, tío? ¿Un fetiche? Me sorprende que no hagas que Mangel se pinte el pelo, joder.
-¿Haremos como si no hubiéramos escuchado eso?- dijo Luzu.
-Seh.- dijimos Willy y yo al unísono.

*Samuel*

-Mangel, tío, que vayas más lento, creo que el de detrás nuestra está tomado.- dije en el asiento de copiloto, mirando hacia atrás.
-Estoy yendo lento, es sólo que no quiero llegar tarde.
-¿A comprar?
-Es que no solo voy a comprah la pizza, también algo para Rubiuh.- dijo Mangel con una sonrisa.
-Su relación es muy mona, Rubelangel For The Win.- dije y ambos reímos.
-Está asustándome el carro detráh de nosotroh. Mira, va tan tomado, yo flipo.
-Es verdad, deberías tener cuidado con él.

*Alex*

-¡PERO TÍO QUE ESTE JUEGO NO TIENE SENTIDO COÑO! ¡SI YO APRETÉ "A"!- Alex gritaba desenfrenadamente.
-Al parecer no sabes jugar.- dijo Willy, recibiendo una mirada de odio de parte de Alex.
-Tú ve a jugar a las Barbies, y la puta madre que te parió.- dijo Alex haciéndome reír. Este par de subnormales iban peleando 6 veces en los últimos 20 minutos.
-OHHHH.- grité para avivar la llama (?)
-TURN.- Cheeto se unió.
-DOWN.
-FOR.
-WHAT.
-¿Dónde está mi Samu para defenderme?- Willy hizo un puchero al decirlo.
-Willy no solo eh uke, actúa como tal.- Cheeto bromeó.
-Aunque coño, es verdad. No deberían demorar tanto solo para comprar pizza, macho.- dije tomando mi móvil. -Voy a llamarlo.
-Tío, está conduciendo.
-No me importa.
-Uy, el uke se alteró.- Alex rió.
-Calla niño calla.- dije mientras sonaba el móvil de Mangel. -¿Mangel?- pregunté al escuchar una voz desconocida contestar. -¡¿QUÉ?!
-Hombre, ¿Qué pasa?- preguntó Willy confundido.
-Mangel y Samuel están en el hospital. Chocaron.- dije mientras las lágrimas empezaban a derramarse por mis ojos. Agarré las llaves de mi auto y salí rápidamente por la puerta, con la voz quebrada, siendo seguido por Cheeto, Willy y Alex, quienes también estaban preocupados.

Todo estaba tan bien.

Durante el camino, solo se escuchaba el llanto de Willy, mientras los chicos lo consolaban y yo conducía, mis manos temblaban mientras lloraba silenciosamente. Cheeto se había ofrecido a conducir porque vio lo mal que estaba, pero yo no acepté, yo solo quería llegar a ver a Mangel.

Pero cuando llegamos, lo único que quería hacer era olvidar lo que vi. Que fue a Mangel, con millones de heridas en el cuerpo e inconsciente.

Willy ya estaba en la sala donde estaba Samuel, pero yo no pude ni ir. Solo quería ver a Mangel. Les pedí a los chicos con un hilo de voz que se fueran, que me dejaran solo. Al verme así de mal, lo hicieron.

"Mangel, Mangel escúchame. Vamos, por favor. No puedes irte. No puedes dejarme aquí, así. No puedo perder a alguien tan especial, Mangel. No puedes dejar a Hayley. No puede crecer con un solo padre, ¿Entiendes? ¡Maldita sea, no puedes irte! Si lo haces, nunca te lo perdonaré. No lo hagas. Tienes que estar aquí, conmigo. ¡No voy a ir a ningún otro funeral, Mangel! ¡No voy a ver a más gente que necesito a mi lado morir! Si te vas, ¿Quién estará conmigo cuando llore? ¿Quién me hará reír? ¿Quién me amará incluso cuando yo me odie? ¿Quién me hará saber que me he equivocado? ¿Quién me hará feliz? ¿Quién me recordará lo gilipollas que puedo ser? ¿Quién hará estupideces conmigo? ¿Quién me soportará hasta cuando sea Rubén? ¿Quién me levantará cuando yo no puedo? ¿Quién, Mangel? Porque yo no puedo solo y...- empecé a lanzar todo lo que tenía a mi alcance al suelo, estaba alterado, no podría, sabía que no podría seguir sin él. No lo haría. Nunca lo haría. -¡Mierda, Mangel! ¡No te vayas! ¡No te atrevas, maldito hijo de put...- Fui interrumpido por el sonido de la máquina que determinaba el ritmo cardiaco.

Lo había perdido.

-Chicos, Samuel ya está perfectamente...- Vinieron mis amigos desde la otra habitación, y entonces me vieron, arrodillado al lado del cuerpo sin vida de Mangel. -Lo siento tanto, Rubén.
-No va a dejarme.- Dije, para luego levantarme y salir corriendo. -Me voy a ir con él.

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"El famoso youtuber, Rubén Doblas Gundersen, más conocido como elrubiusomg, fue encontrado muerto. La investigación a llegado a la conclusión de que después de haber recibido la noticia de que su esposo, Miguel Ángel Rogel, había fallecido, se disparó en la cabeza con un arma de fuego. Su pequeña hija se quedará en la custodia de Lana y Luzu, dos youtubers que solían ser amigos de la joven pareja. En el accidente de Miguel Ángel Rogel se encontró unas flores y una carta de amor para Rubén Doblas, quién nunca tuvo la oportunidad de verlos. Lamentamos mucho estas pérdidas."

El dolor nos cambió. [Segunda Temporada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora