"Rea"
Mi padre junto con mis hermanos y la bioquímica se mantuvieron encerrados en el despacho para hablar sobre sus asuntos ilegales, mientras que mi madre se idiotiza con el hombre frente a nosotras, al parecer el cayo muy bien, demasiado diría.
-Así que empresario, ¿Verdad?
-Si.
-También te gusta invertir, ¿Cierto?
No lo puedo creer.
-Me gusta invertir en producciones que generen dinero. La inversión se hace con grandes riesgos, pero vale la pena.
-Entonces, ¿No le gustaría invertir en este negocio? Ser socio, no es que mi familia lo necesite, pero su esposa es la bioquímica y es mejor tenerla cerca que lejos.
Salvatore la mira fijamente.
-Mi esposa es buena en lo que hace, por supuesto invertiría.
- ¡Excelente! -sonrio mi madre.
Anabel le entrega el teléfono a mi madre que al parecer en la otra línea es el abuelo, ósea su padre. Tanto la asistonta y mi madre se marchan dejándome sola con el hombre asesino.
Me sentí intimidada por Salvatore al mirarme, ¿Se acordara de mí?
-Rea, tu nombre es muy bonito.
¿Qué hare? Finjo demencia así como él lo hace, no lo sé, realmente estoy confundida.
-Gracias.
Salvatore se levanta y camina hacia mí, se sienta a mi lado. Me observa con una mirada familiar.
-Tu cabello están rojo y tus ojos tan grises-me dice.
-No creo que sea apropiado para un hombre casado decirle eso a una señorita como yo, ¿No le parece?
Salvatore se alejó un poco de mí y por un instante me sentí..., molesta y triste.
-Perdón.
-Está bien, no lo vuelva hacer. Mi padre y hermanos son muy celosos-digo con una sonrisa.
-Y deberían.
Suspiro hondo y me quedo mirando sus ojos grises claros, son tan bellos.
-Es raro que le haya salido sobrina a Alfred, éramos unidos y nunca menciono nada sobre una tal Emma.
-El hombre era reservado-declaro.
-Aun así me parece extraño. Como sea, a mi si me duele su muerte.
Nuestras miradas se cruzaron por un instante.
-El dolor pronto se ira.
- ¿Cómo lo sabe?
-Porque no es el mismo dolor que cuando pierdes a tus padres, hijos e incluso hermanos. Ese dolor es más grande y triste que cualquier persona pueda sentir-me dice con un tono triste-. El dolor por la pérdida de un padre dolerá unos años, mientras que la pérdida de un hijo es el mismo que sientes por un hermano, es un dolor que no muchos pueden soportar más si...tu vida se acaba.
Su mirada se perdió en aquellas palabras dolorosas que salieron de sus labios, por lo visto aun no encuentra a su hermana.
Tomo su mano y puedo sentir una sensación tan extraña que embriaga mi corazón, ¿Qué me estaba pasado con este hombre? No lo sé.
-Lo siento.
- ¿Qué?
-La pérdida siempre será el reflejo de nuestros corazones rotos.
-El dolor siempre será un mal recuerdo que muchos siempre recordarán como una pesadilla en medio de un sueño lleno de infelicidad, pero no todo está perdido siempre tendrás los buenos recuerdos de tu vida mientras eras feliz-continúa-. Y recordarás que un día ese mismo dolor..., se fue porque tú corazón sano y volviste a nacer.
Las palabras de Hades me hicieron sentir en el corazón, este hombre inspira dolor y tristeza en sus ojos grises oscuros.
-¿Y que pasa si pierdes a un hermano?
-Entonces diré que mi corazón no ha sanado por más que he intentado, los buenos recuerdos me hacen estar vivo.
-¿Tiene hermanos, Salvatore?
Su mirada se desvío por unos segundos.
-No.
¿Porque miente? ¿Quien eres realmente, Hades?
-Entonces tienes suerte de no sufrir por la perdida de uno.
-La suerte nunca ha estado de mi parte-me dice separándose de mi al escuchar voces familiares.
Aquellas últimas palabras del hombre atractivo me hicieron pensar mucho.
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DOMINIO
Teen Fiction-En un mundo donde el amor es un arma letal y la traición arde como fuego, solo los más feroces sobrevivirán. Dominio te atrapa en un laberinto de sombras y secretos, donde el amor se convierte en un juego mortal en un mundo mafioso. Las traiciones...