Papá, cásate con mamá.

Capítulo 15. "El plan para unir a los padres de un genio".

Morgan.

Oficina de Morga, Estudio de arquitectura Garret and Wellington, Pasadena, California, Septiembre 2024.

- "Ese maldito niño, es obsesivo."- pensé mientras veía el quinto mensaje del día, que mi adorado Mark, me enviaba para saber si había habido alguna novedad sobre su padre.

Había pasado un mes desde que habíamos contactado, mediante las habilidades del enano genio, con Osman, y comprendía su desesperación.

La verdad es que no tenía que haberme metido en esto, pero por el contrario, si dejaba a esos tres renacuajos genios, llevar a cabo el plan que habían pensado al principio en su inocencia, muy probablemente, la Tercera Guerra Mundial sería una batallita entre vecinos con desavenencias, con la que se hubiera montado si Clara se enteraba en lo que estaba metido su adorado hijo, y que, gracias a él, el hombre que ella pagó esa noche, ya había sido identificado, para colmo no era un hombre cualquiera, era uno de los magnates turcos, más rico de su país, y de casi toda Asia. Con un chasquido de sus dedos, a lo Tanos, ese hombre podía hacer desaparecer a mi amiga de la faz de la tierra, y reclamar a su hijo, sin mancharse las manos.

Justo por eso, interviene en el plan de esos tres, haciendo que por lo menos, él tuviera que descubrir, quién era la madre de su hijo, lo bueno era que, a Clara, según Mark me dijo que había visto, en algo llamado la red oscura, hacía años que su padre la había estado buscando, ofrecido una enorme suma por quien le proporcionará una pista de su identidad.

Eso sólo podía significar dos cosas, o se sentía tan ofendido por esa noche, que quería vengarse, o que se sentía tan atraído por mi amiga, que quería volverla a ver, sino nadie ofrece esa millonada por encontrar a alguien, digo yo.

Me di cuenta cuando hablé con Osman, mediante el ordenador, mientras Mark me ayudaba, y me decía que quería decirle a su padre, al mismo tiempo que, con sus habilidades de hacker, conseguía llamar la atención de su progenitor, que, como su hijo, no era un estúpido, era alguien muy inteligente, y peligroso, pero yo también lo soy.

La pista que le di, al gran magnate, era una pista con trampa, dependía de su inteligencia, y sus habilidades para no caer en ella, no podía ponerle las cosas tan fáciles. La trampa consistía en que, para el mundo profesional, y para muchos de la vida personal, no existía Clara Goodman, sólo la famosa y galardonada arquitecta Alice Garret, esto es debido a que, cuando fundamos el estudio, Clara no quería que la relacionaran con su maldita familia de Nueva Zelanda.

Pero Alice Garret, no compartía el mismo apellido que Mark Goodman, ¿Cómo se ingeniaría el gran magnate y sus esbirros, para saber que ambas eran la misma? ¿Cuándo el seguro buscaba a una madre soltera? Eso era algo en lo que Mark no habia caído, y que por mucho que yo se lo explicara, no iba a entender, pero yo necesitaba saber cuál era el nivel de implicación que tenía ese maldito, justo por eso le dije que no podía darse a conocer, ni demostrar que él sabía que tenía un hijo. Justo por eso le hice borrar a Mark la información que venía en la Prueba de Paternidad sobre él.

Antes que a su hijo, Azize Osman debía conquistar a la madre, y cuando ella lo aceptara, ya podría contarle quien era él de verdad, y la relación que tenía con su hijo.

Mi plan era perfecto, o al menos eso pensé yo, con lo que no contaba era que no era lo mismo una noche de sexo, sin emociones de por medio, sin conocimiento de quién era el otro, y sin prejuicios, con lo que es la vida real, en un entorno real, y donde dos trenes con caracteres muy fuertes, podían chocar, más cuando uno si sabe quién es el otro, y juega con ventaja, esto no sólo nos afectara a ellos mismos, nos afectará a todos, y no sólo por ellos, sino también por estúpidas terceras personas.

Clara (Alice).

Oficina de Morga, Estudio de arquitectura Garret and Wellington, Pasadena, California, Octubre 2024.

- "Señorita Garret, este es el último contrato que se nos ha ofrecido, es muy interesante y conociéndola seguro que le encantará."- me dijo mi asistente Gloria Martínez.

- "Dime de que va, si me lo traes en mano, en vez de dejarlo sobre mi mesa, o en la de Morgan, sé que me va a gustar. Confío en tu ojo, a la hora de elegir contratos, eres la mejor."- le dije con una sonrisa, ella sólo me devolvió la sonrisa.

- "Bien se trata de rehabilitar una Villa en Alanya en Turquía, es un sueño de paisaje, y con total libertad de ideas y de presupuesto, ya que su dueño es presidente del grupo Osman Global. ¿Cómo te suena la idea?"- me dijo Gloria, mientras yo miraba las fotos que tenía delante, adjuntas al contrato, y miles de ideas, y una enorme ilusión, comenzaron a correr por mis venas, hasta llegar a mi cabeza.

- "¿Cuál es la trampa? Sabes que siempre hay una trampa."- le dije frenando mi entusiasmo.

- "En realidad son dos trampas, tienes que hacer un proyecto preliminar, ya que no somos el único estudio valorado, hay al menos dos más, así que pronto nos dirán como hacen, donde hacen la selección, aún no está claro."- me dijo primero Gloria.

- "Y la segunda trampa ¿Cuál es?"- pregunté.

- "Durante todo lo que duré el proyecto, debemos irnos a vivir a Turquía, el cliente exige total implicación."- dijo Gloria esta vez sin sonrisa.

- "Directamente recházalo, no puedo cumplir esa petición, tengo un hijo con unas necesidades, y los cambios de su rutina, no son buenos para él, lo lamento, pero fue bonito mientras duró."- le dije decidida.

Con lo que no contaba era que, en ese momento, Morgan estuviera en la puerta de mi despacho y decidiera intervenir.

- "Estás loca, es lo que siempre hemos querido, además me he informado, el Grupo Osman Global aparte de ser el grupo tecnológico más fuerte de Turquía, tiene el tercer programa de talleres tecnológicos más importante del mundo para niños con altas capacidades en ciencias y tecnología, van niños de todas las partes del mundo a sus talleres, en la sede central en Estambul, y suelen durar entre seis meses a un año. El propio presidente fue un niño genio, a los once años creo su propio sistema informático de una nueva forma de I.A., por esto estableció estos programas. ¿Crees que, si nos seleccionan, no podemos acabar el proyecto en un año? Además, podemos preguntar a mi precioso ahijado que le parece asistir a esos talleres. ¿Qué me dices?"- por un momento dude de lo que estaba escuchando, nunca Morgana se había mostrado tan ansiosa por empezar un proyectó.

Normalmente al inicio de cualquier trabajo, es lo más pesado y tedioso, con mediciones, replanificación de plantos, pruebas de suelo, y demás, esa neoyorkina suele quejarse mucho, era lo que menos le gusta de nuestra profesión, por eso es la parte que suelo hacer yo, ella es muy buena con los números, por eso se dedicaba a los presupuestos, y a los materiales, así como, principalmente, a hablar con los jefes de obra, más bien liarse a broncas con los jefes de obra, así que esto se me hizo sospechoso, algo me ocultaba esa bruja oscura.

- "A ver tú, Morgana, suéltalo todo, ¿Qué interés tienes en que cojamos este proyecto?, ¿No será que estas liada con ese tal Azize Osman ¿Eh? Bruja maldita."- le dije mirándola directamente al parpado del ojo izquierdo, para ver si captaba el temblor que siempre tenía cuando la cogía en una mentira sobre sus hombres.

- "Lo que me faltaba, Mamá Clara, te recuerdo que tenemos la misma edad, así que deja de regañarme, no tengo nada con él, por lo que he oído, ese tal señor Osman es un ser más frio y distante de la tierra, mucha gente de la prensa lo apoda Iceman, o Stonehear. ¿Crees que yo, con esta alma fogosa que tengo, estaría con un ser así? ¡Vamos!, ni que no me conocieras."- me dijo ofendida, y en ningún momento el parpado tembló.

- "Bien iremos a esa entrevista, cuando nos la soliciten, y si la pasamos, veremos que sucede, lo mismo no hace falta que pensemos tanto, porque somos rechazadas."- dije con seguridad, una seguridad, que el día de las entrevistas con el gran magnate de Osman Global, iba desaparecer.