"Querida, querida señorita
Estoy sintiendo emociones
El amor esta en donde menos lo esperas.
Escucha su tu corazón"
Cheri Cheri Lady—Modern Talking
Narrado por:
Aizawa Nyxia.✩*⢄⢁✧ --------- ✧⡈⡠*✩
Nos alcoholizamos hasta que Toga vómito en los zapatos de Tomura y Twice le robara la pistola a un matón del bar.
Luego de tanto al final volvimos a la guarida, ya todos hablábamos sin parar incluso Dabi se reía aveces, ahora que lo pienso bien.
Estamos en la Sala y estoy sentada al lado de Dabi, siento su mano en mi cintura y yo estoy arrecostada de el por completo, sonrió sintiendo su calidez a pesar de que Hawks no me quita los ojos de encima.
— Intente despertar a Erick pero dijo que no tenía ganas de estar con borrachos— nos informa Compress, llegando de las habitaciones.
— Esta bien entonces vamos con la piñata ¿no les parece? Al fin son las cinco de la mañana— Toga balbuseaba sin parar acostada en el suelo con los ojos cerrados.
— La cara tuya es la que te voy a partir estúpida zorra.
—¡REPITELO TOMURA! — ella se levanta rápido molesta pero acaba vomitando en el suelo.
Esto es un caos, pero me distraigo cuando la mano que Dabi tiene en mi cintura baja un poco y acaricia mi pierna con un extraño cuidado.
— Primero debería ir Nyxia— habla Twice colgando la piñata de Hello Kitty del techo— ¿Estas de acuerdo Dabi?.
Toga deja de vomitar, de repente parece recordar algo así que se levanta y a pasos temblorosos llega al lado de Twice tomando una cinta Rosa para ponerme en los ojos.
— Si va Nyxia primero destrozara la piñata de un golpe— Dabi habla y su voz es perfecta, estamos tan cerca que puedo escucharlo hablar, eso me hace sentir extraña.
— Quiero ir primero— dije girando un poco el rostro.
Ahora estamos demasiado cerca el uno del otro, sus ojos son tan hermosos y brillantes ¿como será la piel que esta de tono violeta?, quiero tocarla, mi mano se mueve sola y sin más simplemente tocó su mandíbula con cuidado.
El lugar parece estar en total silencio, Dabi simplemente me mira mientras deslizó mis dedos, esa piel no es tan rústica como crei que sería, de hecho no está tan terrible, la textura es levemente rugosa claro que reseca pero...
— Busquense un maldito cuarto— Cuando Tomura habla doy un salto en mi sitio.
Suelto a Dabi como si quemara, metafóricamente, y voy casi corriendo con Toga, siento a Hawks mirarme y se que luego me va a regañar pero no me importa.
— Vale Moonie vas primero, te vendo los ojos te doy vueltas y buscas darle a la piñata—me explica.
— Toga se como es esto sólo hazlo.
Cualquier cosa solo quiero salir del incómodo momento que yo misma e creado justo ahora.
Siento como coloca la venda en mis ojos, enseguida siento ganas de vomitar empeoran cuando me dan vueltas, vale tal vez esto sea una de las peores ideas del mundo.
Cuando al fin me dejan de girar respiro agitado, al menos no tengo ganas de vomitar lo cual me alivia , de inmediato tiento como me ponen algo en el cabello y no se que decir aún estoy ocupada tratando de salir de mi mareo.
— Feliz cumpleaños Dabi— Dice Tomura con una especie de sarcasmo acido.
— ¿Es enserio? — Escucho la voz de Hawks.
Luego siento a alguien estar cerca de mi, se detiene justo al frente, no me hace falta ver para saber quién es, su mano se posa en mi cabello, enreda sus dedos, su cuerpo desprende calor, huele a cenizas cigarros y perfume de coco.
— Me costó hacer el lazo agradeceme— no entiendo a lo que Toga se refiere.
— A sido el mejor regalo— la voz de Dabi es profunda de repente siento su nariz acariciando mi oreja, su aliento caliente golpea contra mi piel—¿ sabías esto? — me pregunta bajo , confidencial.
— No— contesto con la voz temblorosa por alguna razón.
— Justo ahora no eres la Nyxia que adoro, abría pareces una niña de quince años, creeme sería asqueroso de mi parte disfrutar de algo asi— sigue hablándome en susurros.
Nadie habla a nuestro alrededor así que puedo oírlo perfectamente, tal vez todos lo escuchan, porque el silencio es demoledor.
— Sigo siendo yo.
— Si, — se aleja de mi cuello, ahora siento su mano acariciarme la mejilla— Creo que así eres realmente Kitty.
No conteste su dedo me acarició el labio inferior, me tenso de inmediato, una parte de mi quiere romperle la nariz de un golpe, decirle que es un pedazo de basura e irme a dormir con Erick, esa sería una reacción que todos esperan de mi y tal vez por eso Hawks no se a molestado en intervenir.
Pero no quiero estar lejos, la verdad nunca e querido, pero soy demasiado orgullosa para admitirlo.
— Mirate eres un desastre, estas tan sonrojada Kitty, debería tomar una foto de esto, no lo admitiras luego.
— Vamos Dabi es tu regalo— Toga insiste aplaudiendo con emoción.
Es entonces cuando siento que Dabi se acerca, siento una de sus botas ponerse entre las mías, su mano baja a mi nuca, aquel calor me hace sentir inquieta, mis manos se mueven y ya estoy sujetando su gabardina sin saber que hacer, solo la aprieto entre mis dedos.
— Dabi no te aproveches Nyxia esta ebria— Hawks tiene razón de hecho.
Pero no cabe la racionalidad en mi cuerpo, Toga me sujeta por la espalda para que no escape, todos esperan que me reuse a cualquier contacto con Dabi.
— De haber sabido que este sería mi regalo habría adelantado mi jodido cumpleaños.
Abro la boca para hablar, pero sus labios están sobre los míos demasiado rápido.
La sensación me turba por completo aprieto mis manos en su ropa, incluso retrocedo un paso, sus labios son calidos, su labio inferior tiene la textura levemente rasposa, pero no importa de hecho me hace saber que es el solamente el.
El paso que retrocedo enseguida lo avanzó y sin importar quien me este viendo ahora llevo mis manos al cuello de Dabi para profundizar el beso.
Respiro agitado por la falta de aire, pero a el ni siquiera le afecta, la única manera de alejarme es distraerlo así que le doy un leve mordisco , el se separa de inmediato, yo llevo una mano a mi veda y la levanto, viendo en primer plano al labio de Dabi sangrar como si lo hubiera cortado una navaja, no sabía que su piel era tan sensible.
— Lo pagarás caro Moonie.
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𝑃𝑙𝑎𝑦 𝑊𝑖𝑡ℎ 𝑭𝒊𝒓𝒆 ٭ᴰᵃᵇᶦ ˣ ᵒᶜ٭
Fanfiction𝘋𝘢𝘣𝘪 𝘯𝘶𝘯𝘤𝘢 𝘢 𝘥𝘶𝘥𝘢𝘥𝘰 𝘥𝘦 𝘯𝘢𝘥𝘢 𝘥𝘦 𝘩𝘦𝘤𝘩𝘰 𝘯𝘶𝘯𝘤𝘢 𝘢 𝘱𝘳𝘦𝘴𝘵𝘢𝘥𝘰 𝘢𝘵𝘦𝘯𝘤𝘪𝘰́𝘯 𝘢 𝘯𝘢𝘥𝘢 𝘲𝘶𝘦 𝘯𝘰 𝘴𝘦𝘢 𝘴𝘶 𝘴𝘦𝘥 𝘥𝘦 𝘷𝘦𝘯𝘨𝘢𝘯𝘻𝘢 𝘢 𝘴𝘶 familia. Pero entonces llegó un día esa hermosa mujer de oj...