Water Under The Bridge | KV

Capítulo 12.

El eco de las últimas palabras de Taehyung aún resonaba en la habitación del pequeño hotel cuando finalmente decidieron descansar. Aunque la tormenta había amainado en el exterior, dentro de ellos dos aún se sentía un vendaval emocional. Jungkook se quedó despierto por largo rato, repasando cada confesión, cada pausa tensa que Taehyung había hecho. Era difícil procesar todo lo que había escuchado: las inseguridades, el miedo que había llevado a Taehyung a romper su relación, el peso de lo que alguna vez compartieron, y cómo el presente parecía estar construido sobre cimientos inestables.

Al amanecer, la tormenta exterior había cedido por completo, dejando el cielo despejado pero el aire aún cargado de humedad. Ambos se prepararon en silencio para regresar a su hotel. Ninguno de los dos parecía dispuesto a retomar la conversación que habían dejado a medias. El trayecto en el auto se hizo en un incómodo silencio, solo interrumpido por el sonido del motor y el esporádico crujido de la carretera bajo los neumáticos.

Taehyung, con la vista fija en la ventana, no dejaba de repasar lo que había dicho la noche anterior. ¿Por qué había sentido la necesidad de confesarlo todo? ¿Qué pensaba Jungkook ahora? Cada vez que consideraba girarse y decir algo, una especie de barrera lo detenía. No estaba seguro de lo que sentía, y menos aún de lo que quería decir. La culpa y la confusión se entrelazaban, haciéndolo reconsiderar cada palabra, cada gesto.

Jungkook, por su parte, seguía enfocado en el camino. Sus pensamientos estaban atrapados en la maraña de emociones que la confesión de Taehyung había provocado. Una parte de él quería comprender y ayudar, pero otra temía remover sentimientos que aún no había terminado de procesar.

Al llegar al hotel, ambos salieron del auto con cierta torpeza. Estaban a punto de separarse para regresar a sus respectivas habitaciones cuando Taehyung levantó la mirada hacia la entrada del hotel y se quedó congelado.

Ahí, en el vestíbulo, estaban sus padres... junto a Jihye. El rostro de Taehyung palideció al instante. No había esperado ese recibimiento, mucho menos después de todo lo que había pasado en las últimas horas. Sus padres parecían estar hablando animadamente con Jihye, pero al verlo, los ojos de su madre se entrecerraron y una sonrisa controlada apareció en su rostro.

—Amor, que bueno que te encuentras aquí.—La voz de su prometido resonó en sus pensamientos, sorprendiéndolo.

Sintió unos brazos envolverlo con fuerza, levantándolo apenas del suelo antes de que se percatara de que Jihye le estaba sonriendo y se mostraba demasiado animado. Su emoción lo desconcertó, inclusive se sintió incómodo, pero trató de sonreír al sentir la mirada de sus padres. 

—Te busqué en nuestra habitación pero no estabas, ¿De dónde vienes? Tu ropa está en mal estado.—Cuestionó con un tono preocupado, observando a detalle las condiciones en las que se encontraba. 

—Yo salí un rato, pero hubo una tormenta y no pude regresar, tuve que esperar hasta que pasara.—Confesó, separándose lo suficiente para acercarse a sus padres.—Mamá, papá, ¿No se suponía que llegarían hasta el día de la boda? Aún faltan días para eso. 

—Por supuesto que no nos perderíamos los preparativos de tu boda, cariño. Solo te mentimos, pero nuestro vuelo ya estaba programado para el día de hoy.—Comentó la mujer con una sonrisa, acercándose ahora para abrazarlo.—Me alegra verte, ¿Te encuentras emocionado por el gran día? 

Al tiempo que iba a contestar, Jungkook, quien ya había empezado a caminar hacia la entrada lateral, sintió de inmediato el cambio en el ambiente. Giró la cabeza hacia la familia de Taehyung y, al encontrarse con la mirada inquisitiva de la madre, un escalofrío recorrió su espalda. Conocía esa mirada, la había visto antes, mucho tiempo atrás. Intentó pasar desapercibido, pero el ambiente ya era demasiado denso.