Te encontré (Carreraaa x tú)

①⑥

  ~2024~

Benjamín y yo estábamos sentados, él estaba esperando a que yo hablara pero no sabía exactamente lo que diría.

—Hay algo que me ha estado "molestando" durante estos últimos días.— conté y me miró atento.— Quiero que sepas que lo que te voy a decir no es nada de lo que tengas que preocuparte.— aclaré.

Empecé a contarle lo que pasó con Rodrigo, pero intenté ser lo más resumida posible para no hacerla tan larga.

—Déjame ver si entiendo, ¿vos me estás diciendo que aún te gusta ese chabón?— cuestionó algo molesto.

—En ningún momento te dije eso.— recordé.— Solo es una sensación extraña, es como volver a ver a mi primer amor.— traté de explicar.— De todas formas, eso no significa que me gusta.

—Eso no es lo que me das a entender.— murmuró y yo me sorprendí.— Vos estás teniendo dudas de nuestra relación.

—No Benja, yo estoy 100% segura de que te amo a vos, Rodrigo pertenece al pasado y ahí se quedará.— respondí y dejé un beso en sus labios.

—Te amo y no soportaría la idea de que te gusta otra persona.— confesó y negué.

—Jamás me gustara otra persona.— exclamé, sin saber que el tiempo me demostraría lo equivocada que estaba.

Sentí que Benjamín no me creyó mucho, pero no le quise tomar mucha importancia. Cada uno tenía cosas que hacer así que era el momento de que Benja se vaya.

Las horas pasaron y yo estaba más estresada de lo normal, tenía que buscar opciones para comenzar a laburar y no me podía concentrar gracias a que el número que me llamó ese día seguía insistiendo.

Decidí decirle todas las malas palabras que podía pero una voz interrumpió.

—Ven a la cena.— murmuró alguien pero no pude reconocer aquella voz.

Iba a responder pero colgó rápidamente la llamada, ¿a qué cena se refería? ¿A la cena de la señora Eli? Eso sería imposible, ninguno de ellos tiene mi número, debe ser alguien que quiso hacer una broma.

Seguí investigando y ninguna opción me convencía, o simplemente sentía que no iba a hacer un buen trabajo, esto de ser adulto no es nada bueno.

Dejé eso por un momento y me eché en el sofá a descansar un poco, pero otra vez mi celular no lo permitió, esta vez, mi papá me estaba llamando.

—Hija, hoy en la noche iremos de nuevo a Bahía Blanca.— avisó.— Te lo decimos por si cambias de decisión.

—Está bien.— me limité a decir.

—¿Estresada?— preguntó e hice un sonido de afirmación.— Sos la número uno ____, sabés que vos vas a poder lograr todo, descansa.— habló.

—Gracias papá, te quiero.

—Eso no dirás cuando te pida algo.— comentó.— Vos sí o sí tenés que viajar con nosotros y no hay peros ni excusas pasamos por ti en algunas horas.— confesó para luego cortar la llamada.

¿Qué les pasaba? No soy menor de edad para que decidan por mí, no iría a esa cena por nada del mundo, menos si está Rodrigo presente.

Tu amigo no estará con nosotros
por eso no te preocupes.

Probablemente solo esté su mamá.

Mi viejo me envió esos mensajes, y lo pensé un poco, si Rodrigo no iba a estar, ya no tendría tanto problema en ir, ¿qué tan malo sería?