Angel Guardian

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Encojo mis piernas para abrazarlas y recargo la barbilla en una de mis rodillas admirando el paisaje tan lindo que tiene este parque. No se si es por la hora pero parece ser muy poco concurrido, eso es bueno si tengo en cuenta la razón por la que estoy aquí. Hace tiempo que no sabía nada de Amy pero ante ayer estaba por subir al avión para regresar a Buenos Aires cuando recibí un mensaje de ella diciendo que quería hablar conmigo y que si nos podíamos reunir, ya que en estos días el trabajo ha disminuido le dije que si sin ningún problema. 

Me extrañó que me citara en un parque en lugar del café en donde solemos reunirnos pero supongo que hablará algo mas privado. 

-Hola- escucho su voz, se sienta a mi lado con una sonrisa relajada. 

-Hola ¿Que tal?- resopla y niega, su gesto me hace reír ya que no es normal verla así.

-Creo que este mes estoy atrayendo bastante caos a mi vida- me asombra que suelte algún dato de su vida, no se si era por que siempre hablábamos de mi pero parecía demasiado hermética con sus cosas.

-¿Por que?- me atrevo a preguntar.

-Bah...me estaban atosigando para que aceptara a hacer un par de notas pero eran cien por ciento amarillistas y ese no es mi estilo de trabajo, me amenazaron de echarme si no las hacía...mi rentero me pidió el apartamento y mi carro se descompuso- abro los ojos impresionada.

-Hazte una limpia urgente- suelta una carcajada.

-Si, eso es lo que me han dicho todos- se encoje de hombros- por lo menos mi carro ya esta arreglado y conseguí un nuevo apartamento.

-¿Y tu trabajo?

-No es por nada pero es de lo que menos me preocupaba, no les conviene echarme, se demasiadas cosas de allí que no les gustaría que la gente se enterara.

-Es demasiado turbio ese ambiente ¿verdad?- me mira seria y suspira.

-Demasiado...tienes que hacer un gran esfuerzo para no terminar relacionada con cosas desagradables.

-¿Siempre quisiste dedicarte al periodismo?

-Si, conforme fui creciendo me di cuenta de que cada vez había menos seriedad en este tipo de profesión...cada vez mas mentiras, historias contadas a conveniencia e injusticias que hacían que se me retorciera el estomago...así que me prometí que aunque me costara demasiado, sería una de las pocas que en realidad informa y comunica...es triste que algunos decidan contar mentiras pudiendo gritar la verdad.

Wow...no esperaba esa respuesta.

-Que bueno que hayas tomado esa decisión- digo sincera.

-Gracias- sonríe de lado. 

Ambas guardamos silencio observando el lago que hay a unos metros y viendo a la poca gente pasear a sus mascotas. 

-Supe lo que paso en la grabación en Miami- comenta interrumpiendo mis pensamientos, la miro- ¿Como estás?

Hago una mueca, a este punto no me asombra que se haya enterado pero me doy cuenta que cada vez me siento mas en confianza con ella, ya no me incomoda que sepa.

-¿Alguna vez has sentido que no entiendes bien lo que te pasa?- inclina su cabeza analizando mis palabras.

-Si, hace años cuando falleció mi papá en un accidente- responde dejándome helada- fue muy duro y creo que pasé los siguientes días creando un tipo de coraza a mi al rededor para no caer en la situación...tenía 14 años solamente, pero sentía que debía de ser lo suficientemente fuerte por mi mama que estaba destrozada y preocupada por como seguiría adelante con un bebe de 9 meses.

Mas Allá De MiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora