En la sala de conferencias, todos estaban extrañados por el comportamiento de Daisy. Matt había entrado a la habitación unos pocos segundos después de que esta se hubiera ido.
- Estate quieto- le dijo el pelirrojo posando su mano en el hombro de Mello intentando así que no saliera tras ella. Este le dedicó una mirada de preocupación.
No hizo falta más palabras. El rubio entendía lo que su mejor amigo le quería transmitir."No te derrumbes por una simple chica, estará bien", se repetía a sí mismo.
- En el jardín en el que estuve ya no hay nadie. Si requieres de un lugar en el que pasar el tiempo puedes ir allí. Yo ahora mismo estoy algo ocupado-. Ambos entendían el significado de lo que en realidad le decía. Sólo era cuestión de leer entre líneas.
En un rinconcito, apartado de donde se encontraban los demás niños y jóvenes, había un pequeño jardín donde nadie iba, exceptuando Mello y Matt. Si mirabas hacia arriba te podías dar cuenta que las vistas daban a las ventanas de los apartamentos de Jana y Daisy. De ahí sus largas horas cavilando en ese lugar.
- Me voy a los jardines- le comentó a Matt a la vez que caminaba hacia la puerta.
- Jana ¿Vienes a jugar videojuegos a mi cuarto?- comentó el pelirrojo.
- Claro, pero yo no suelo jugar mucho eso...
- Yo te enseño- comentó lo último con una notoria sonrisa.
Mientras Jana se levantaba de su asiento en el frío suelo, se despedía con un simple adiós de su compañero Near con el que siempre estaba, a parte de Daisy.
Era extraño, Matt y ella apenas se dedicaban un hola como saludo cuando sus caminos se cruzaban. Por muy astuta que fuera, la única explicación lógica que le daba era que Daisy no le apetecía pasar el rato con él.
En verdad había días en los que a su amiga sólo le apetecía encerrarse en su cuarto, y cuando Jana buscaba estar con ella, Daisy parecía no receptiva y la contestaba con simples palabras.
Aunque, volviendo al tema de Matt, él conocía a la perfección a Daisy como para saber sobradamente que con un té ya la tenía ganada.
Decidió pasar por alto el asunto, al fin y al cabo, nunca había sido una chica que se comía la cabeza pensando esos asuntos. Además, podrían llegar a ser amigos, y a ella nunca le desagradaba la idea de hacer nuevas compañías.
Antes de irse por la puerta, Jana miró por última vez a Near, quien parecía molesto, ya que no paraba de enroscarse con el dedo un mechón de su blanquecino pelo. Ella pasaba tanto tiempo con él, que sabía que eso era un signo de desagrado respecto a algo y no hacía falta ser un genio para saber el qué le inquietaba.
Near no paraba de pensar en porqué Matt requería de la compañía de su amiga Jana. Aunque, era de esperar que tarde o temprano quisiera dar el primer paso en conocerla mejor. Sólamente era cuestión de observación darse cuenta que lo que mantenía pensativo últimamente al pelirrojo era Jana.
- Pondré un juego de estrategia. No suelo jugar mucho a estos, pero será divertido y a mi parecer es más fácil que los otros- dijo Matt a su compañera ya en su cuarto mientras introducía el disco en la máquina.
- Vale...- le contestó tímidamente.
Ambos cogieron sus respectivos mandos y se sentaron suelo de madera. Matt ya sabía que Jana nunca había jugado a videojuegos y en eso se basaba su plan para, de momento, conseguir su amistad e ir avanzando escalones en ese sentido hasta alcanzar su objetivo.
- Jugaré yo primero y después tú para que así puedas asimilar mejor cómo se juega- la comentó después de explicarla detalladamente las reglas.
Cuando fue el turno de ella, peor no lo podría haber hecho. También había que tener en cuenta que lo más cerca que estuvo ella de un videojuego era cuando esperaba en el marco de la puerta de la habitación de Matt a que Daisy terminará la partida con el pelirrojo y así irse de allí.
Pero, no todo fue tan malo. Los dos compañeros de juegos no paraban de reírse por tal espantosa jugada. Resultaba gracioso y hasta Matt hacía comentarios con un tono irónico que causaban aún más risa de la que ya había en el ambiente.
- Tengo un método para que asimiles mejor el cómo se juega-. Dijo Matt a Jana ya terminado el turno de esta.
Él desconectó el mando de ella, dejando sólo disponible el de él. Abrió las piernas y con un gesto dio a entender a Jana que se sentara entre el hueco de sus extremidades inferiores. Ella, obviamente, hizo lo que le pidió, pero más nerviosa no podía estar e incluso un leve sonrojo se hacía visible en sus mejillas.
- Vamos, no seas tímida. No te haré nada malo, sólo voy a enseñarte. Acomódate- se dirigió a Jana.
Puso el play al juego y con el único mando disponible, lo puso en las manos de ella y él rodeaba con sus brazos la cintura de ella hasta llegar también a el mismo y tocar sus manos. Al principio, Jana le parecía de lo más incómoda esa posición y no entendía cómo era posible que el corazón le latiera tan deprisa y lo más curioso, que notase eso.
Al final ambos se acostumbraron y ella llegó a comprender el porqué de que su amiga Daisy se llevase tan bien con él. Sin duda, no era mala persona aunque a primera vista lo pareciese con el cigarrillo. Era bastante majo y carismático, pensó Jana.
------------------------------------------------
En el jardín
Ya era prácticamente de noche. Estaba atardeciendo y el sol ya casi no era visible.
Ya llevaba en ese lugar más de una hora, pensando en sus sentimientos.
¿Por qué su preocupación se centraba en Daisy? Odiaba verla mal. Era extraño, ya debería haberse acostumbrado a los bajones emocionales que le venían en algunos días, sin embargo, algo dentro de él hacía que su corazón latiera más rápido cuando se encontraba con ella y como olvidarse cuando eran pequeños y la veía llorar. Ella le decía quién había sido el sinvergüenza que había hecho derramar lágrimas y sin que su amiga lo supiera, se dirigía a esa persona y le daba una paliza. Tiempo después, esa persona le pedía disculpas a Daisy y ella pensaba que era el "arrepentimiento".
Ahora ya no hacía falta aquello, se había vuelto una chica fuerte capaz de defenderse por sí sola.
- ¿Por qué sólo puedo pensar en ti?- comentó en un susurro mientras su mirada se dirigía a la ventana del apartamento de Daisy y daba una mirada a la tableta de chocolate.
Su rostro pasó a expresar desconcierto cuando por un momento creyó ver a una persona entrando por la ventana de Daisy.
¿Qué fue eso? Rápidamente se levantó del banco de piedra en el que se encontraba y su primer impulso fue ir a visitarla para comprobar que se encontraba bien. Tras unos segundos, descartó la idea: Wammy's House era un lugar muy seguro como para que eso ocurriese.
****************************
¡Holiwis fans de death note!
Creo que ya se está poniendo interesante ¿no?
Iba a subir el capítulo antes, pero hubo un problema y no sé cómo se me borró...me tocó reescribir algunas partes que no las tenía en otra plataforma...
Tengo la manía de dedicar cada capítulo que escribo. Esta vez va dedicado a @jana_jane_jane que ya la nominé anteriormente, sólo que esta vez es otra cuenta diferente con una novela digna de leer sobre Death Note. Creo que sobra decir que el personaje de Jana en la novela está basada en ella.
Gracias por molestaros en leer mi novela^^
ESTÁS LEYENDO
Coraza (Death Note Story)
Fanfiction¿Daisy? Sí, así la llamaban, aunque en ese lugar todos escondían secretos, empezando por su verdadero nombre. Todos superdotados en una mansión que les uniría y les retaría a ser los siguientes sucesores del famoso detective L. Pero...¿Quién dice q...