Salieron del hospital después de dos horas, Tae caminaba a un lado de Jimin tomando su mano, acostumbraba a hacer eso cuando recién murió, aunque sabía que Jimin no lo sentía, era una forma de brindarle apoyo, Nam caminaba del otro lado leyendo la receta médica de Jimin aunque no había pasado a mayores el golpe aún así le recetaron algunos suplementos alimenticios para que recuperará sus fuerzas
-Jimin, por favor deja de hacerte esto -dijo Nam mirándolo
-No lo hago a conciencia Nam -contestó Jimin haciendo una mueca -En verdad no esperaba el golpe
- ¿Y lo de la comida?
-Lo siento
-Deja de disculparte, por favor si no lo haces por mi, hazlo por Tae, no creo que a él le guste que estés así
-En efecto hermano, no me gusta -respondió Tae mientras se subían de vuelta al coche para ir a casa
-¿Porqué metes a Tae en esto? -murmuró Jimin haciéndose bolita en el asiento del copiloto
-Porque es a su recuerdo a quién culpas de lo que haces
-¿Qué quieres decir con eso? Jungkook es el culpable
-¿Jungkook? Disculpa que te lo diga, pero el no tiene nada que ver en esto
-Es él quién no deja de mirar su asiento, me fastidia, es como si el pudiera verlo, como si lo estuviera esperando
-Si lo que estás diciendo tuviera sentido, ¿no crees que entonces si estás molesto por el recuerdo de Tae y no por Jungkook? Tu única molestia con el nuevo es que te recuerda a mi hermano, y él no tiene la culpa de eso. Tuve que ser grosero con él hoy, a pesar de que genuinamente él estaba preocupado por ti.
Aunque parecía molesto en realidad no lo estaba, Nam asimilaba y vivía su duelo de manera diferente a Jimin, y sabía que si había alguien que tenía que ponerle los pies sobre la tierra era él. Jimin se culpó mucho tiempo de la muerte del castaño, y trató en dos ocasiones irse con él, era tan vulnerable como lo fue su hermano y no podía permitirse descuidar a Jimin cómo descuidó a Tae.
Jimin por su parte si se molestaba con los regaños de Nam, no era contra Nam, sino contra el mismo, porque sabía que era cierto lo que le decía.Tae los miraba con tristeza, el sabía que no podía hacer nada más que escucharlos. Al llegar a casa los tres subieron a la habitación de Nam y Jimin se acostó mientras Nam bajaba a la cocina a preparar algo para comer, Tae se acostó al lado de Jimin y puso su cabeza en su pecho, el sabía que Jimin no sentía su accionar, pero lo hacía más para si mismo que para Jimin.
- ¿Será que me puedes escuchar? -preguntó Jimin mirando la foto de Tae en la mesita- Te extraño tanto Taehyung, si tan solo pudieras perdonarme -dijo con un hilo de voz -Si tan solo no hubieras hecho eso... Perdoname por haberte lastimado de esa manera, no estaba preparado para una persona tan especial como tú, tenía tanto miedo de que la gente nos señalara- suspiró dejando caer más lágrimas -Si tan solo no hubiera sido tan cobarde para aceptarme tu estarías aquí en este momento...
El corazón de Tae se rompía con cada palabra que salía de la boca de Jimin, era difícil para él estar a su lado y no poder comunicarse de ninguna manera con él.. convencerlo de que nada de lo que pasó fue su culpa.
Por otro lado Jungkook se quedó en un parque cerca de su casa, esperaba que Tae pasará por ahí y poder hablar con él, las personas normales habrían enviado un mensaje pero él no tenía manera de comunicarse con el castaño pues nunca se quedaba lo suficiente para siquiera pedir su número. Jungkook no podía negar lo molesto que era intentar ser amigo de Tae. Estuvo sentado en la misma banca por horas hasta que comenzó a anochecer, el sabía que sería una pérdida de tiempo porque no sabía en qué parte de la ciudad vivía el castaño, pero si iban en la misma preparatoria era seguro que vivía cerca, así que se levantó, suspiró y pensó en tratar en el siguiente parque más temprano al día siguiente, y así hasta encontrarlo. Se dispuso a caminar hacia su casa cuando un coche conocido paso a un lado de él, en el pudo divisar a Nam manejando y a su lado ¡Oh sorpresa! Tae de copiloto.
El coche se detuvo a unos pasos de él, Nam lo había visto y decidió redimirse por lo que pasó temprano en la escuela, así que se detuvo para que Jungkook se subiera al coche y llevarlo a su casa, Tae al notar las ideas de su hermano no solo lo maldijo, si no que decidió cambiarse al asiento trasero y agradeció que por lo menos su hermano llevara arriba el vidrio que separaba la parte delantera del coche de la trasera.
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Almas Entrelazadas
Fanfiction-Ah, perdona, no sabía que eras inmortal- contestó de nuevo el muchacho. Tae, qué no estaba acostumbrado a que le hablarán de esa manera se acercó a él lentamente. Observó los cabellos empapados y pegados a la cara del chico que a simple vista estab...