Pov lys:El chico que me había dicho antes que se llamaba Percy nos llevó a buscar a una chica rubia y luego a otro chico que tenía cuernos.
Me quedé mirando junto al de lentes cómo los otros dos intentaban sacar al niño con cuernos.
—Me llamo Elysia, ¿y tú? —le pregunté al chico.
—Harry... Solo Harry —me respondió él, pareciendo pensativo, para al final darme una pequeña sonrisa.
Adorable.
—¡No! ¡Acabo de pasar a otro nivel! ¡No! —se quejaba el chico que tenía piernas de cabra.
Un señor se acercó a nosotros.
—Bueno, bueno, ¿están listos para las tarjetas de platino?
—Sí, dámela... —dije acercándome para tomar la tarjeta, pero el brazo de Percy me detuvo.
—Nos vamos —respondió él, mirándome como si me desafiara a tomar la tarjeta platinada.
Qué aburrido; quería ver si podría volver a hablar con Lester o Bianca.
—Qué lástima —repuso el hombre—. Acabamos de abrir una nueva sala entera, para los que poseen la tarjeta de platino.
—Lo dice como si fuera difícil de conseguir, cuando recién nos la acaba de regalar —señala Harry.
El señor lo ignoró y nos tendió la tarjeta. Parecía tentador, pero sabía que no debía hacerlo, al recordar que supuestamente todo era una trampa.
El chico con cuernos intentó tomar una de las tarjetas, pero la rubia le dio un tirón y lo rechazó.
—No, gracias.
Caminamos hacia la puerta. Me lamenté de no haber podido despedirme de Lester; su brazalete era muy bonito, y apenas le pude decir gracias. Harry, a mi lado, parecía compartir pensamientos similares con la carta que tenía en sus manos.
Apenas salimos, pude notar mi mochila sobre mi hombro; extrañamente recordé que la había dejado sobre la cama después de meter ropa en ella.
Fuimos a una tienda por decisión de Percy. Mientras él revisaba un periódico, los únicos dos magos del grupo nos habíamos ido a comprar dulces.
—... Potter —digo en voz alta, recordando finalmente todo.
—¿Nott?... —responde el de lentes, confundido al principio, pero luego parece llegar a la misma conclusión que yo.
—Sí que son lentos —comenta Annie, que estaba detrás de nosotros.
Ahora nos subimos a otro auto. Si al final de la misión llego a tenerle asco a los autos, culparé a todos por tal cosa.
—A Los Ángeles, por favor —pidió Annie.
Ella le dejó la tarjeta del casino y el conductor obedeció sin decir nada más.
Intenté no quejarme de lo apretado que era compartir asientos; Annabeth fue rápida en decir que quería ir adelante.
Tampoco podía comer mis dulces tranquila; Percy, apenas vio la bolsita en mis manos, se sentó a mi lado para comer todos los caramelos azules que tenía.
—¿Vas cómodo, Potter? —bromeó Percy.
Primero estaba Grover en la ventana; en el medio estábamos Jackson y yo, y al final, Harry contra la ventana junto a Percy.
Si el auto explotaba, me iba a hacer la sorprendida.
—No, pero gracias por preguntar —respondió Harry con notorio sarcasmo.
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Magia y mitología: Un legado por descubrir ▓┃ Percy Jackson × Harry Potter
Viễn tưởngElysia Nott vivio sus doce años de vida con toda la normalidad que puede tener una sangre pura que terminó en Gryffindor. A final de año, antes de volver con su padre. Tiene un sueño sobre su madre, quien le dice que debe ir a un lugar exacto a prot...