––¿Sabes que pienso? Qué la misma persona que llamó a la policía cuando estabas en mi casa fue la que llamó por la muerte de Laila.
––Entonces eso nos dejaría un sospechoso que está en contra de Michael, pero también de nosotros ––comentó Jake––. ¿No es extraño?
––Si, es demasiado extraño ––Ruby cruzó sus brazos, apoyando su mejilla en su palma, pensando.
––¿Y si la persona que llamó fue alguien que conocía a Laila? ––objetó el pelinegro.
––¡Samantha! ––Ruby dio un chasquido, apuntándole––. Ella no solo conocía a Laila, estaba enamorada de ella, tal vez por eso llamó a la policía, ella lo vio todo.
––Pero entonces, ¿por qué llamó a la policía ese día que yo estaba contigo?
––Buen punto...
De pronto, una idea vino a la cabeza de Ruby como si un foco invisible se hubiera encendido sobre su cabeza.
––¡Hay que ir a casa de Samantha!
––Keyler tenía razón, si te estás volviendo loca ––Jake sonrió––. ¿Cómo piensas hacerlo?
––Hmm... Conozco a la persona correcta que sabe dónde vive ella.
°§ 🥀§°
––No.
––¡Por favor, Steven!
––¡Estás loca! ¿Cómo vas a querer meterte en la casa de alguien? Eso es allanamiento de morada ––reprochó el rubio cruzado de brazos––. Mi respuesta es no, me niego ayudarte en eso.
––Jake, dile algo ––dijo Ruby, y Jake la miró.
––¿Y qué quieres que le diga? Steven ya tomó su decisión.
––Bien, entonces iré sola.
––Ni siquiera sabes dónde vive ––contestó Steven.
––Entonces iré casa por casa.
Steven rodó los ojos, suspirando.
––Bien, vamos a la casa de Samantha. Pero si la policía nos encuentra ahí, te voy a culpar a tí.
––No te preocupes, Alice nos va a sacar del embrollo, ella siempre lo hace.
El rubio negó, llevándolos a la casa de Samantha por la noche.
Cuando llegaron a la casa de Samantha. La calle estaba tranquila, con la mayoría de las luces de las casas apagadas. Steven, Ruby y Jake se escondieron detrás de unos arbustos al otro lado de la calle, observando el lugar.
––¿Y ahora? ––susurró Steven, manteniendo la mirada fija en la casa––. No parece haber nadie en casa.
––Perfecto, entonces no habrá nadie que nos interrumpa ––murmuró Ruby, mientras se giraba hacia Jake––. Tienes la ganzúa, ¿verdad?
––La tengo, pero, ¿realmente vamos a entrar? Esto es más que allanamiento, Ruby ––dijo Jake con cautela.
––No vamos a hacer nada malo, solo averiguar si Samantha tiene algo que la relacione con Michael o con el asesinato de Laila. Ella es nuestra única pista.
Steven suspiró profundamente. ––No puedo creer que esté haciendo esto... ––murmuró, pero antes de que Ruby pudiera decir algo, la puerta de la casa de Samantha se abrió lentamente, y una figura se asomó al frente.
ESTÁS LEYENDO
Rosas de Sangre ©
Roman pour AdolescentsDespués de la muerte de su hermana, Ruby decide ponerle fin al asesino. Con su cámara y la ayuda de sus amigos, se embarcar en una misión que le pedirá, no solo la ayuda de un criminal buscado, sino también su propia vida. "«En la frontera del mied...