La habitación se había mantenido en silencio desde que habían llegado a la conclusión anterior. Ruby mordió su labio inferior aún pensando, ¿quién podría haber estado en su cumpleaños número cinco? Habían pasado años. Ni siquiera recordaba lo que había hecho hace dos días. Jake se apoyó sobre el escritorio, agarrando nuevamente un mechón del cabello de Ruby.
––¿De verdad crees que esto podría relacionarse con el libro? ––inquirió Ruby, girando su cabeza para verlo––. ¿Jake?
–¿Eh? ––él la miró––. Si, por supuesto.
––Pero eso fue hace muchos años, Jake. No creo que pueda ser posible.
––Es cierto.
––¿Siquiera me estás escuchando?
Jake soltó el mechón de cabello, cruzándose de brazos. Su mirada se quedó en la puerta de la habitación, mientras pensaba.
––¿Dónde celebraron tu cumpleaños ese día? ––interrogó Jake, girando su cabeza para mirarla.
––En una cabaña en el bosque ––contestó Ruby––. En realidad la cabaña era de mi abuelo, pero se la regaló a mis padres y festejamos ahí. ¿Por qué preguntas?
––¿Está muy lejos?
––No tanto. Podemos ir en mi auto ––propuso Ruby levantándose de la silla––. Será más rápido.
–Bien ––aceptó––. Tal vez haya algo que nos pueda ayudar ahí.
–Buena idea. Hay que ir mientras todavía es temprano.
Ambos salieron de la habitación, bajando por las escaleras. Jake se quedó junto a la puerta esperando a que Ruby regresara con las llaves de la casa y del auto.
––¿Y si lo que está relacionado con el libro, no fue lo que pasó hace años? ––inquirió Jake, mientras su mente maquinaba miles de ideas y pensamientos.
––¿Por qué lo dices? ––preguntó Ruby, poniéndose una chaqueta negra, observándolo con confusión.
––Tal vez alguien sabía que ocurría el asesinato, alguien conocido para tí quizás ––sugirió el pelinegro––. Un familiar, un amigo, o el chico ese que vino hoy, ¿cuál era su nombre?
––¿Steven? Lo dudo mucho. Steven no sería capaz de matar ni una mosca. Y Alice es policía, así que eso también lo dudo.
––Entonces lo descubriremos cuando lleguemos a la cabaña.
La puerta se abrió de un portazo, o más bien una patada, lo que sorprendió a ambos. Ruby retrocedió, viendo como oficiales de la policía entraban a su casa y esposaban a Jake.
––¡Policía del FBI! Queda arrestado por el asesinato de Emily Anderson. Tiene derecho a guardar silencio, todo lo que diga puede ser usado en un tribunal. Tiene derecho a un abogado, si no puede pagar uno se le asignará uno de oficio.
––¡¿Qué está pasando?! ––gritó Ruby, aún sorprendida por la aparición de la policía en su casa.
––Detective Clover, recibimos una llamada diciendo que el asesino se encontraba aquí ––respondió, un hombre alto, de cabellera castaña oscura, tez morena y barba candado.
––Él no es el asesino de mi hermana. Y yo no llamé a nadie ––dijo Ruby, viendo como se llevaban a Jake esposado sin que él dijera o reprochara nada.
––Bueno, recibimos la llamada hace un par de horas. Y sea o no el asesino nos lo llevamos igual. Puede que no haya estado involucrado en el asesinato de Emily Anderson pero eso no significa que no haya asesinado a otras personas.
ESTÁS LEYENDO
Rosas de Sangre ©
Teen FictionDespués de la muerte de su hermana, Ruby decide ponerle fin al asesino. Con su cámara y la ayuda de sus amigos, se embarcar en una misión que le pedirá, no solo la ayuda de un criminal buscado, sino también su propia vida. "«En la frontera del mied...