🚨🔞: Capítulo suave sin drama y con un pequeño momento hot. Disfrútenlo
Sus corazón latía con fuerza en sus pecho, podía sentir sus manso sudar mientras que intentaba sostener la bandeja y evitar que se cayera la mochila que guindaba de su hombro.
Bajo sus mirada para asegurase por última vez que la decoración no se hubiese arruinado en el silencioso he incomodo trayecto que hizo con su madre. El pastel era de tamaño mediano, de poca estatura, estaba cubierto por una capa de betún azul celeste, con pequeños puntos en su borde inferior y superior. La parte de arriba estaba cubierta por completo por cerezas picadas a la mitad, acompañadas por cuatro velas de colores encendidas.
Tomo una larga respiración y entro. Sus ojos viajaron por gimnasio, pero antes de que pudiese preocuparse por el supuesto espacio baldío la voz fastidiada de Wilhelm llenó el lugar haciendo que una amplia sonrisa se forma en sus labios.
— Esta ocupado —. Se volteó para observara la espalda encorvaba del príncipe, quien estaba se estaba extendiendo por la banqueta apunto de tomar su teléfono. Wilhelm estaba preocupado por aún no haber recibir noticias de Simón.
Río bajo, logrando erizando sus bellos y reanimando su corazón.— Tranquilo que yo no viene a hacer ejercicio — respondió con un poco de gracia.
Wilhelm giró su rostro lentamente hacia Simón sintiendo como la ansías y la opresión que lo habían acompañado durante todo el día, se esfumaban en el aire.
Al verlo no pudo controlarse. Apretó sus finos labios sintiendo como sus ojos se cristalizaban, su boca se abría por la incredulidad, sus labios temblaron mientras que su mente intentan procesar y definir si esto era o no real.
— Feliz cumpleaños — dijo un poco avergonzado achicando su sonrisa y girando un par de grados su rostro mientras que se encogía suavemente de hombros.
— Pero... ¿que? — dijo en un suspiro, que solo el mismo fue capaz de escuchar — Que... ¿que es esto? —.
Wilhelm cerró los ojos y negó contrayendo su rostro para contener las lágrimas. << Maldita sea no otra vez por favor >> << Esto es otro sueño >> << Tiene que serlo >> << Él no está aquí >> << Esto no es real, yo lo sé >>
Sus piernas expuestas comenzaron a temblar. Esto no podía estarle pasando otra vez, su mente no podía jugar de una forma tan cruel con su corazón
La sonrisa de Simon flaqueó al ver el comportamiento de Wilhelm y rápidamente las inseguridades bombardearon su mente. << ¿No le gustó? ¿será que quedó muy feo? ¿O es algo demasiado patetico? >> << Sabia que debía hacer otra capa de betún >> << Dios Anthony tiene razón esto es patético >> << Ya no somos niños >> Miró el pastel sintiendo como su pecho se oprimía. Sentía deseos de llorar. << Solo quería hacer algo lindo >>
Sus labios temblaron y un hipido roto resonó por el gimnasio. Cubrió sus rostro con sus manos y la angustia penetro el pecho de Simón
— ¿Wilhelm estás bien? —.
Aceleró su paso mirándolo alrededor de lugar, buscando un sitió higiénico en donde dejar el pastel para poder correr a consolad a su amigo. Pero antes de encontrar alguno. Su cuerpo frenó en seco impactado y extrañado por la acción del príncipe, que con sus manos temblado apretó su termo disparando un chorro de agua helada contra su rostro, y luego estrujó su toalla contra el, mezclando el agua con el sudor y las lágrimas.
Su exhalación quedo ahogada contra la tela desesperado por volver a la realidad. << Esto es otro sueño, otro maldito sueño >> << Tiene que ser un sueño su... su cabello es diferente. Se ve hermoso >> << Pero... trae la ropa que yo le obsequie...
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That Way: Young Royals (+18)
Lãng mạnDespués de que el príncipe se vea en vuelto en una serie de incidentes, el mejor acuerdo que La Corte y sus abogados logran conseguirle, es que regrese a Suecia y continúe sus estudios en el internado Chilton, ahí conoce a Simón. Después de tres año...