A los principes se les busaca pretendientes a esposas. WB:1

211 7 6
                                    

🚨:Listo ya está el capítulo completado. Disfrútenlo
🚨:Está es la primera parte de una serie de capítulos sobre el cumpleaños de Wilhelm, serán marcados como WB.

Simon se colocó frente al sofá y dejó que sus rodillas fallaran hundiéndose en el. Giró sus rostro sintiendo como su mirada se dilatará, como si enfocándose en él nombre de "Wille" escrito en su pantalla, la masiva cantidad de ropa que fue específicamente elegida para que adorara desapareciera.

Un suspiro tembloroso se escapó de sus labios y contestó. — Alo —

El aire contenido sus pulmones se escapó al oír su voz, que viajo desde su teléfono llenando la habitación antes de recorrer su cuerpo y re acelerar sus corazón. Wilhelm se encontraba sentado contra la cabecera de su cama, con las rodillas golpeando su pecho, y las uñas de su mano derecha están siendo mordisqueadas.  No podía más de las ansias tan profundas que sentía. Hace dos horas Malin había venido a entregarle lo que usaría en su cumpleaños y desde ese momento había deseado llamarle, pero se había estado conteniendo con tal de no arruinarle la "sorpresa"

Ahora esta aquí con su teléfono apoyado en la cama y puesto en altavoz, porque sus manos tiemblan tanto que no es capaz de sostenerlo. No es la primera vez que da un regalo. Casi siempre siente cierta emoción o miedo de si lo que escogió es correcto, aunque no podría sentirse menos interesado cuando se trata de regalarle cosas a sus parientes y siendo sinceros tampoco se siente culpable por ello, después de todos Wilhelm siempre recibe algo de la "lista de obsequios tradicionales para príncipes o princesas". En donde se puede encontrar: Coronas o alguna joya, suele ser heredada, relojes, bolígrafos, animales, pinturas o implemento para el deporte "apropiado" de su preferencia.

Sin embargo Simon es un tema totalmente diferente.

Tampoco era la primera que le daba un obsequio a Simon, pero con la bomba fue diferente, aunque estaba preocupado porque el modelo fuera el adecuado, sabía que Simon la necesitaba y que estaría más que agradecido. Pero esto no se trata de una necesidad sino de gustos, de estilo, Wilhelm la eligió pensando en una mezcla de lo que le gusta y lo que será "apropiado". Lo acertado que halla sido Wilhelm en la elección puede interpretarse como el interés que muestra en su relación. Y eso le aterra. Siente pánico de pensar que Simon cree que no le importa o que su relación no es lo más valioso o importante que ha a tendido. Quiere que el moreno se sienta cómodo, amado y apreciado, tal como él siempre lo hace sentir

— Halaaaa... — dijo con la voz cargada de emoción, extendiendo la "a".

Simon golpe su frente con su mano mientas que negaba repetidamente poniendo los ojos en blanca. << Este Idiota >>. — Hola — repitió manteniendo su tono de abrumado.

— Y... ¿cómo estás? — pregunto con el mismo tono rompiendo su sonrisa atrapando su labio inferior

Simon bufo exasperado. — Wille...¿Que es esto? —

Por la línea se pudo escuchar su riza nerviosa. El príncipe se encogió de hombros hundiéndose más en la cama y respondió nervioso. — Tu... tus cosas —

— ¡¿Que?! —  grito Simon sin reparo alguno

— ¿No las has revisado? — pregunto confundido sintiendo como un nudo se formaba en su estómago — Es que... escribí notas — admitió avergonzado — ¿No... las leíste? —

Esas notas eran lo que tenia a Wilhelm más nervioso. No solo porque eran una prueba contundente de que Wilhelm era quien había enviado los obsequios y si cayeran en las manos equivocadas podría provocar un daño irreparable ni siquiera para la Corona, sino para su familia. No quiere ni pensar en lo que le haría su papá si se enterara de que está escribiéndolo cartas y enviándole obsequios a otro hombre.

That Way: Young Royals (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora