Un Dulce Amor de Familia Pasajera (SeverusxGiyuu)

Capítulo 17: Culpa y Desesperación

A medida que el tiempo pasaba, Severus continuaba su búsqueda incansable para encontrar una solución a la cruel regla familiar que amenazaba a su futuro hijo. Sin embargo, cada intento y cada estudio de los antiguos textos resultaban infructuosos. La magia ancestral de la familia Prince parecía inquebrantable, y ninguna de sus habilidades como mago parecía ser suficiente para deshacer la maldición que acechaba a los squibs.

Severus se culpaba a sí mismo por haber vinculado a Giyuu a su familia y sus implacables leyes. Se sentía abrumado por la culpa y el temor de que su decisión pudiera traer consecuencias devastadoras para el bebé que esperaban. Durante el día, mantenía una fachada de calma y fortaleza para Giyuu y Harry, pero en la soledad de la noche, se derrumbaba.

En el silencio de su laboratorio, Severus se dejaba llevar por la desesperación. Lágrimas silenciosas rodaban por sus mejillas mientras se apoyaba sobre su escritorio, rodeado de libros y pergaminos. La impotencia lo consumía, y sus pensamientos se volvían cada vez más oscuros.

Severus: (pensando) He fallado a Giyuu y a nuestro bebé. No puedo protegerlos de esta magia ancestral. ¿Cómo pude haber permitido que esto sucediera?

Severus lloraba en silencio, escondido en las sombras de la mansión, lejos de la mirada preocupada de Giyuu. No quería que su pareja viera su desesperación y perdiera la esperanza.

Severus: (susurrando) Lo siento tanto, Giyuu. Lo siento por haberte arrastrado a este mundo de dolor y peligro.

Cada noche se convertía en una lucha interna, un constante recordatorio de sus miedos y dudas. A pesar de su desesperación, Severus sabía que no podía rendirse. Debía encontrar una manera de proteger a su familia, incluso si eso significaba desafiar las leyes de la magia misma.

Severus: (determinándose a sí mismo) No dejaré que esta maldición nos destruya. Encontraré una solución, cueste lo que cueste.

Con renovada determinación, Severus se secó las lágrimas y regresó a sus estudios, buscando incansablemente cualquier pista o indicio que pudiera ofrecer una salida. Sabía que el tiempo se agotaba, pero también sabía que su amor por Giyuu y su familia era más fuerte que cualquier magia ancestral.