Capítulo 20: Distancia y Tensión

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Con el paso de los años, la relación entre Giyuu y Severus se deterioró. A pesar de los esfuerzos de Severus por reconciliarse, Giyuu evitaba a su alfa, refugiándose en el cuidado de sus cachorros y apartándose de la cofradía para mantenerse cerca de ellos. Ocho años de frialdad y distancia marcaron la vida en la mansión Prince.

Giyuu: (pensando) No puedo olvidar lo que pasó. No puedo dejar de culparlo por lo que sucedió con Rose.

Severus, aunque respetaba el deseo de Giyuu de mantenerse alejado, nunca dejó de intentar acercarse y reparar el vínculo roto. Sin embargo, todos sus intentos fueron en vano, y la distancia entre ellos parecía insalvable.

Severus: (con tristeza) Giyuu, por favor, solo quiero hablar. Quiero que sepas que te amo y que haré lo que sea necesario para que estemos bien.

Pero Giyuu se mantenía firme en su decisión, centrándose en sus hijos y evitando cualquier confrontación con Severus. La situación llegó a un punto crítico cuando Severus recibió la carta de aceptación para Beauxbatons para Harry. Sabiendo que Giyuu se opondría, decidió actuar sin su consentimiento.

Una noche, aprovechando que Giyuu estaba profundamente dormido, Severus tomó a Harry y lo llevó en silencio fuera de la mansión. Con lágrimas en los ojos, sabía que esta acción podría destruir cualquier posibilidad de reconciliación, pero creía firmemente que era lo mejor para Harry.

Severus: (susurrando a Harry) Lo siento, hijo. Sé que esto es difícil, pero es por tu futuro. Debes empezar a estudiar y aprender a controlar tu magia.

Cuando Giyuu despertó y descubrió que Harry no estaba, su enojo fue desmedido. Buscó a Severus por toda la mansión, encontrándolo finalmente en el estudio.

Giyuu: (furioso) ¡¿Dónde está Harry?! ¡¿Qué has hecho con él?!

Severus: (con voz calmada pero triste) Giyuu, Harry ha sido aceptado en Beauxbatons. Necesita comenzar sus estudios. Lo hice por su bien.

Giyuu: (gritando) ¡¿Secuestrándolo de mí?! ¡No tenías derecho a hacer eso sin consultarme!

Severus: (intentando razonar) Sabía que te opondrías. Pero, Giyuu, debemos pensar en su futuro. Necesita aprender y crecer.

Giyuu: (con lágrimas de rabia) ¡No puedo creer que me hayas traicionado así! ¡No volveré a confiar en ti, Severus!

El enojo de Giyuu se intensificó y la relación entre ambos se quebró aún más. Giyuu se sintió traicionado y herido, incapaz de entender las intenciones de Severus. La mansión Prince, una vez llena de amor y esperanza, ahora estaba envuelta en una atmósfera de tensión y tristeza.

Un Dulce Amor de Familia Pasajera (SeverusxGiyuu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora