Capítulo 15: "Caminos entrelazados"

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Minseo y el encuentro inesperado

El fin de semana llegó más rápido de lo que Minseo esperaba, pero en lugar de sentirse aliviada, la ansiedad se había instalado en su pecho. Decidió aprovechar la mañana para salir a caminar por el barrio, intentando despejarse. Las calles estaban llenas de gente que disfrutaba del día soleado, pero Minseo se sentía desconectada, como si estuviera en un mundo aparte.

Caminó sin rumbo fijo, hasta que un impulso la llevó hacia un pequeño parque en las afueras del centro. No era el lugar donde normalmente iba, pero algo la atraía hacia allí. Mientras recorría el sendero rodeado de árboles, escuchó una voz familiar.

-Minseo... ¿Eres tú?

Se detuvo en seco y giró la cabeza. Allí estaba Hyunwoo, con una expresión de sorpresa en el rostro. Minseo sintió su corazón acelerarse. No había esperado encontrárselo fuera del trabajo, y mucho menos en un lugar tan apartado.

-Hyunwoo... -respondió ella, intentando sonar tranquila aunque su mente estuviera en caos.

Él se acercó lentamente, con una sonrisa tensa. -Qué sorpresa verte aquí. ¿Vienes a menudo a este parque?

-No, en realidad... solo estaba dando un paseo -admitió Minseo, sintiéndose repentinamente incómoda. Había intentado evitarlo desde su confesión, y ahora el destino parecía jugarle una mala pasada.

Hyunwoo asintió, notando la tensión entre ambos. -Yo... siento mucho cómo han sido las cosas últimamente. Sé que no ha sido fácil para ti. Ni para mí.

Minseo lo miró, sorprendida por su franqueza. -No tienes que disculparte. Fui yo quien complicó las cosas.

-No, no lo complicaste -respondió Hyunwoo con sinceridad-. Fuiste honesta, y lo respeto. Solo... creo que ambos necesitamos un poco de tiempo para procesarlo.

Ella asintió, aunque en el fondo seguía sintiendo un nudo en el estómago. Estar frente a Hyunwoo, hablando sobre lo que había sucedido, la hacía sentirse vulnerable de nuevo. Pero al mismo tiempo, había algo reconfortante en su manera de hablar, en su esfuerzo por mantener las cosas claras.

-Gracias, Hyunwoo -dijo finalmente-. Quizás el tiempo es lo que ambos necesitamos.

Él sonrió levemente y, tras un momento incómodo de silencio, se despidió. Minseo lo observó alejarse, sintiéndose más ligera de lo que esperaba. Tal vez este encuentro no había sido una coincidencia, sino una pequeña oportunidad para cerrar una herida abierta.

Sujin y las decisiones que no puede posponer

En otro rincón de la ciudad, Sujin se encontraba en una reunión de trabajo. Sin embargo, su mente no estaba del todo allí. Desde su conversación con Hyejin, no podía dejar de pensar en sus decisiones, tanto profesionales como personales. Se había aferrado a Seúl, pero ahora, más que nunca, sentía que sus opciones se estaban reduciendo.

El director de su equipo hablaba sobre las metas para el siguiente trimestre, pero Sujin apenas escuchaba. Su mirada estaba fija en su teléfono, donde un mensaje sin abrir de Busan seguía brillando. Era la última oportunidad para reconsiderar la oferta de traslado, y aunque había tomado la decisión de quedarse, la duda persistía.

Al terminar la reunión, decidió salir a tomar aire. Mientras caminaba hacia una cafetería cercana, se encontró nuevamente reflexionando sobre Jihun. Sabía que quedarse en Seúl lo mantenía cerca de él, pero ¿era suficiente razón para sacrificar una oportunidad de crecimiento profesional?

Justo cuando estaba a punto de entrar en la cafetería, su teléfono sonó. Era su madre.

-Sujin, cariño, ¿cómo estás? -preguntó su madre con una calidez que siempre la tranquilizaba.

-Hola, mamá. Estoy bien... creo -respondió Sujin, sin saber si quería hablar de sus preocupaciones o evitarlas por completo.

-¿Estás segura? Te noto algo distante -insistió su madre.

Después de una breve pausa, Sujin suspiró. -Es solo... estoy lidiando con algunas decisiones importantes. No estoy segura de si estoy tomando las decisiones correctas.

Su madre guardó silencio por un momento antes de hablar. -Sujin, siempre has sido muy sensata. Pero no dejes que el miedo al cambio te paralice. A veces, las mejores oportunidades vienen cuando salimos de nuestra zona de confort.

Las palabras de su madre resonaron profundamente en Sujin. No podía seguir postergando la decisión de su vida profesional, pero tampoco podía ignorar lo que sentía por Jihun. Sabía que tenía que enfrentar ambos temas, sin dejar que uno influenciara demasiado en el otro.

Jihun y la revelación de Seungmin

Mientras Sujin luchaba con sus decisiones, Jihun estaba trabajando arduamente en los preparativos del proyecto de Busan. El compromiso que había asumido le mantenía ocupado, pero no podía evitar pensar en Sujin y en cómo su decisión afectaría a su relación.

Una tarde, mientras revisaba informes con Seungmin, este último lo observó detenidamente.

-Jihun, he notado que estás un poco distraído últimamente. ¿Todo bien?

Jihun miró a su amigo y colega, sabiendo que no podía ocultarle nada. -Es Sujin... Estoy preocupado por cómo nuestras decisiones están afectando nuestra relación. Sé que ella decidió quedarse en Seúl, pero... no estoy seguro de cuánto tiempo más podremos seguir así, sin abordar lo que realmente está sucediendo entre nosotros.

Seungmin asintió con comprensión. -Las relaciones y el trabajo a menudo se entrelazan de maneras que no esperamos. Pero lo que es importante aquí es que ambos estén en la misma página. ¿Has hablado con ella sobre lo que realmente sienten?

Jihun se quedó en silencio por un momento. -No tan abiertamente como debería. Creo que ambos hemos estado evitando la conversación.

-Pues tal vez sea el momento de tenerla -dijo Seungmin-. Si no hablan, nunca sabrás si están caminando en la misma dirección o si están siguiendo caminos diferentes.

Las palabras de Seungmin resonaron en la mente de Jihun mientras continuaban con su trabajo. Sabía que tenía razón. Era hora de ser honesto con Sujin, y consigo mismo, antes de que fuera demasiado tarde.

El reencuentro esperado

Al final del día, Jihun decidió que no podía esperar más. Llamó a Sujin, sugiriéndole que se vieran para hablar. Sujin, sintiendo el peso de sus propias dudas, aceptó de inmediato.

Se encontraron en un parque tranquilo, uno de sus lugares favoritos para caminar y hablar. El ambiente estaba cargado de una mezcla de ansiedad y anticipación. Ninguno de los dos sabía exactamente cómo empezar la conversación, pero ambos sabían que era necesaria.

-Jihun... -empezó Sujin, rompiendo el silencio-. Creo que hemos estado evitando muchas cosas últimamente.

Él asintió, mirándola a los ojos. -Lo sé. Y no quiero seguir evitando lo que siento. Me importas, Sujin. Mucho. Pero también siento que estamos en puntos diferentes de nuestras vidas, y no sé si eso está afectando nuestra relación.

Sujin lo escuchó en silencio, sintiendo una mezcla de alivio y miedo. -Yo también me he sentido así. Siento que mis decisiones profesionales están chocando con mis sentimientos por ti... y no sé cómo equilibrar ambas cosas.

La conversación continuó, profunda y sincera. Ambos expusieron sus miedos, sus expectativas y sus deseos. Y aunque no llegaron a una solución inmediata, por primera vez en mucho tiempo, sintieron que estaban caminando hacia una resolución, juntos.

entre café y destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora