Las luces de Seúl brillaban con una intensidad que parecía opacar las preocupaciones de quienes la habitaban. Pero para Jihun, el brillo de la ciudad solo servía para acentuar el peso que cargaba en su mente. La propuesta de Seungmin no dejaba de rondarle, y el tiempo corría en su contra.
Jihun y la propuesta de Seungmin
Después de la llamada de Seungmin, Jihun había pasado horas debatiendo consigo mismo. Sabía que aceptar esa oferta no era lo correcto, pero ¿tenía otra opción? El proyecto estaba en riesgo, y con él, su carrera. Pero más allá de las consecuencias profesionales, lo que más le preocupaba era cómo esto afectaría su relación con Sujin. Ella siempre había sido su brújula moral, su centro, y no quería defraudarla.
A la mañana siguiente, Jihun decidió encontrarse con Seungmin en persona. Sabía que no podía tomar una decisión sin antes escuchar todos los detalles. Seungmin lo citó en un café elegante en Gangnam, y cuando llegó, lo saludó con una sonrisa que escondía muchas intenciones.
—Jihun, me alegra que hayas venido. Sabía que lo pensarías —dijo Seungmin mientras se sentaban en una mesa junto a la ventana.
—Necesito más detalles antes de tomar una decisión —respondió Jihun, directo.
Seungmin asintió, como si estuviera acostumbrado a ese tipo de resistencia.
—Lo entiendo. El contacto que tengo puede agilizar los permisos y los trámites que necesitas para el proyecto. Pero, claro, necesitará una compensación... algo extraoficial.
Jihun sabía exactamente lo que eso significaba. Era soborno, y aunque las reglas del mundo corporativo a menudo eran grises, cruzar esa línea sería algo irreversible.
—Y si acepto, ¿cómo quedo yo en todo esto? —preguntó Jihun, su tono cargado de incertidumbre.
—No tendrás que preocuparte por nada. Yo manejaré todo, tú solo asegúrate de que los resultados lleguen a tiempo. Nadie sabrá cómo se resolvió el problema —respondió Seungmin con una confianza que inquietaba a Jihun.
El dilema seguía latiendo en su mente. Por un lado, aceptar la oferta podría salvar su carrera y su proyecto, pero a qué costo. Por otro lado, rechazarlo podría significar el fin de su reputación en la empresa.
—Lo pensaré —dijo finalmente, levantándose de la mesa.
Mientras salía del café, se dio cuenta de que su elección, cualquiera que fuera, iba a tener un impacto profundo en su vida. Y lo más complicado era que aún no sabía qué camino tomar.
Minseo da un paso adelante
Por su parte, Minseo también estaba enfrentando un dilema, aunque de una naturaleza completamente diferente. Después de su salida con Hyunwoo y Sujin, se sentía más confundida que nunca. A pesar de que Hyunwoo había sido amable, no había mostrado signos claros de interés romántico, lo que la hacía dudar de sus propias percepciones.
Finalmente, decidió que era hora de ser valiente. Después de mucho pensarlo, le envió un mensaje a Hyunwoo invitándolo a cenar, solo ellos dos.
El mensaje era sencillo, pero directo: "Hyunwoo, me preguntaba si te gustaría salir a cenar esta semana. Solo nosotros dos. Me gustaría conocerte mejor fuera del trabajo."
El corazón de Minseo latía con fuerza mientras esperaba su respuesta. Pasaron unos minutos que parecían horas hasta que el teléfono vibró.
"Me encantaría, ¿qué tal el viernes?"
Minseo soltó un suspiro de alivio. Aunque todavía tenía dudas sobre sus sentimientos, al menos había dado el primer paso. El viernes sería una noche decisiva, una oportunidad para ver si realmente había algo entre ellos o si todo había sido una ilusión suya.
La presión aumenta para Sujin
Mientras tanto, Sujin estaba terminando una reunión con su jefe en Seúl. Habían discutido los términos finales de su traslado a Busan, y ahora todo estaba en manos de ella. Sabía que el próximo lunes tenía que dar una respuesta definitiva, pero cuanto más lo pensaba, más le costaba tomar una decisión.
Esa noche, después de la reunión, Sujin decidió hablar con Jihun sobre sus dudas. Sabía que su decisión no solo afectaba su carrera, sino también su relación. Estaba en un punto donde tenía que ser completamente sincera con él.
Cuando llegó a su apartamento, llamó a Jihun.
—¿Podemos vernos esta noche? Necesito hablar contigo —le dijo con una voz que reflejaba la gravedad de la situación.
Jihun, que aún estaba lidiando con su propio conflicto interno, aceptó de inmediato. Sabía que la conversación sería importante, aunque no estaba seguro de estar preparado para ella.
Esa noche, se encontraron en el apartamento de Sujin. Mientras ella servía té, ambos se miraban en silencio, sabiendo que estaban a punto de tener una conversación crucial.
—He estado pensando mucho sobre Busan —comenzó Sujin—, y aunque sé que es una gran oportunidad, no estoy segura de si estoy lista para dejar todo atrás.
Jihun la miró, sorprendido por su confesión. Había asumido que Sujin ya tenía la decisión tomada, pero ahora se daba cuenta de que ella también estaba luchando con sus propios miedos.
—Sujin, entiendo que es difícil... pero también sé lo importante que es para ti. No quiero ser la razón por la que te quedes si realmente quieres irte —dijo Jihun, con sinceridad.
Sujin suspiró, sabiendo que esa era una de las razones por las que amaba a Jihun. Él siempre había sido comprensivo y apoyador, incluso cuando sus propios problemas lo agobiaban.
—No se trata solo de ti, Jihun. También me preocupa lo que podría significar para nosotros. La distancia, el tiempo... siento que ya estamos luchando por mantenernos conectados, y eso me asusta.
Las palabras de Sujin golpearon a Jihun con fuerza. Sabía que la relación estaba sufriendo bajo el peso de sus carreras y las decisiones que ambos debían tomar. Pero también sabía que no podían seguir evitando el tema.
—Entonces, tal vez sea el momento de ser completamente honestos sobre lo que queremos, Sujin. No solo con nuestras carreras, sino con nuestra relación. ¿Qué es lo que realmente estamos dispuestos a sacrificar? —preguntó Jihun, su voz cargada de una mezcla de vulnerabilidad y resolución.
El silencio se instaló en la habitación, mientras ambos se daban cuenta de que estaban en un cruce de caminos, tanto en sus vidas profesionales como personales.
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entre café y destino
RomansaJi-hoon, un joven empresario y dueño de una cadena de cafés en Seúl, siempre ha vivido para el trabajo. Aparentemente frío y distante, esconde un corazón que aún no ha conocido el verdadero amor. Soo-jin, una aspirante a escritora, pasa sus días ent...