Se encontraban en la habitación de Kiara, ella solo estaba sentada en el borde de su cama, mirando el suelo sin realmente verlo. Los hombros de él se encontraban tensos y su silencio decían más que cualquier palabra.
Nicholas se encontraba arrodillado frente de ella mientras la observaba cuidadosamente, él intentaba encontrar las palabras correctas, ya que no quería presionarla, pero tampoco podía soportar verla de ese modo.
-Kiara... -Su voz era suave, casi en un susurro -No puedo verte así.
Ella no respondió de inmediato, apretó sus labios y desvió su mirada, intentando mantenerse como siempre.
-Estoy bien... -Respondió finalmente, con tono seco y quebrantado.
-No, no lo estás -Dejó escapar un leve suspiro -Y no tienes que estarlo, lo que te hizo ese idiota..., nunca mereció tu amor -Mencionó después de que ella le contó sobre sus marcas en sus muñecas con anterioridad cuando la vió.
A pesar de que Kiara haya omitido la parte en que destrozó las piernas de Dylan, aún le dolía que su primer amor la engañara con otra persona y cuantas más quizás fueron exactamente. La infidelidad no es un error, es una elección, y Dylan nunca la mereció, a pesar de que ambos se encontraban enamorados, a él no le importó romper su corazón. Una infidelidad no solo es encontrar alguna prenda de ropa de otra persona en la habitación de tu novio o encontrarlos en pleno acto, sino que también fueron mentiras, engaños, salidas, conversaciones, manipulación.
Eso no se perdona nunca en la vida.
Pero lo que le dolió más a Kiara, es que hayan jugado con ella, con sus sentimientos...
Aquella palabras de Nicholas, hizo que Kiara levantara su mirada en dirección hacia a él, pero había algo en su mirada que era una mezcla entre ira y vulnerabilidad, como si estuviera al borde de romperse, pero se negaba a hacerlo delante de él.
-No hables de él -Dijo en un pequeño susurro, estaba harta con esta situación desgastante.
-De acuerdo -Asintió lentamente, respetando su decisión -Pero quiero que sepas que estoy de tu lado, Kiara -La miraba con un destello en sus ojos -Siempre estaré aquí.
Ella parpadeó, y la lágrima que había estado reteniendo finalmente rodó por su mejilla. Sin pensarlo, Nicholas levantó su mano, limpiándola con delicadeza.
Aquel contacto, pareció desarmarla por completo, porque en ese preciso momento ambos se observaron detenidamente, era un sentimiento que no se podía describir con simples palabras.
-¿Por qué...? -Su voz temblaba -¿Por qué me duele demasiado si de todas maneras sabía que esto no duraría mucho?
-Porque diste todo de ti, Kiara -Tomó sus manos entre las suyas, cálidas y firmes -Porque creíste en alguien que no te complementaba para nada, pero eso no significa que sea tu culpa -La seguía observando detalladamente -Duele, porque diste algo real y eso no tiene nada de malo.
El silencio se alargó entre ambos, cargado de emociones que ninguno sabía como manejar en realidad. Kiara lo observó a sus ojos sin despegar su mirada ningún segundo, buscando algo que no se podía expresar con solo decirlo, así que guiada por un impulso, se inclinó hacia él.
El beso fue suave y tímido al principio, pero se profundizó rápidamente cuando Nicholas respondió a éste, llevando una mano a la nuca de Kiara para atraerla más cerca y junto con la otra mano se movió instintivamente hacia su cintura.
Su aliento mezclado con la intensidad del momento, hacía que todo a su alrededor desapareciera.
Sin embargo, Kiara se separó bruscamente, llevándose los dedos a sus labios como si acabara de darse cuenta de lo que había hecho.
-No..., esto está mal -Se levantó y él hizo el mismo movimiento -Fue un error, Nicholas.
-¿Un error? -Se quedó observándola con una mezcla de sorpresa y algo más profundo, algo que había estado enterrando durante mucho tiempo -Esto no fue un error... -Dijo en un susurro mientras aún sentía el calor del beso.
-No sé por qué lo hice -Se abrazaba a sí misma y se dirigió hacia la ventana sin mirarlo a él -No debería haber sucedido, estoy confundida.
-Kiara, no digas que fue un error si no lo sentiste así -No intentó acercarse, sabía que cualquier paso en falso podría hacerle cerrar todas las puertas que talvez acababan de abrirse para él.
-Nicholas, por favor... -Dijo con voz suplicante -Fue un malentendido -Giró su cabeza hacia él, con los ojos brillantes y su voz era apenas un susurro.
-Si eso es lo que necesitas pensar, está bien -Asintió con tristeza -Pero estoy aquí para ti, Kiara Gray.
El silencio volvió a llenar la habitación mientras él se dirigió hacia la puerta de la habitación, pero antes de salir, se giró una última vez y ambos se miraron.
-Y por si necesitas oírlo -Ella lo escuchaba atentamente -No me arrepiento de ese beso.
Y dicho eso, se cerró la puerta, dejándola completamente sola. Kiara se mantuvo inmóvil mientras a los segundos llevó su mano a sus labios y aunque no lo admitiera, una parte de ella tampoco quería arrepentirse.
En el fondo, sabía que ese "error" había significado mucho más de lo que estaba dispuesta a aceptar.
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Me Perteneces
Fiksi Remaja𝐔𝐧 𝐡𝐨𝐦𝐛𝐫𝐞 𝐚𝐭𝐨𝐫𝐦𝐞𝐧𝐭𝐚𝐝𝐨 𝐩𝐨𝐫 𝐬𝐮 𝐝𝐞𝐬𝐞𝐨 𝐩𝐫𝐨𝐡𝐢𝐛𝐢𝐝𝐨 𝐬𝐞 𝐨𝐛𝐬𝐞𝐬𝐢𝐨𝐧𝐚 𝐜𝐨𝐧 𝐞𝐥𝐥𝐚. 𝐋𝐚 𝐣𝐨𝐯𝐞𝐧 𝐝𝐞𝐬𝐜𝐨𝐧𝐨𝐜𝐞 𝐝𝐞 𝐬𝐮 𝐞𝐱𝐢𝐬𝐭𝐞𝐧𝐜𝐢𝐚 𝐡𝐚𝐬𝐭𝐚 𝐞𝐥 𝐦𝐨𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨, 𝐩𝐨𝐫 𝐥𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐜𝐚𝐞 �...