Me Perteneces

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏𝟐 - 𝐃𝐞𝐬𝐜𝐨𝐧𝐜𝐞𝐫𝐭𝐚𝐝𝐚

Las ramas chocaban contra la ventana de la habitación, todo lucía absolutamente oscuro y sombrío, mientras se escuchaba pasos que se acercaban dónde ella. Se encontraba produndamente dormida y la agitada respiración de él era lo que resonaba por todo el cuarto, su aliento pesado rozó su suave piel lo que la hizo despertar inmediatamente.

-¿Qué...? -Abrí mis ojos, pero no podía ver nada, por lo que decidí prender la lámpara que tenía al lado mío, pero a pesar de que me encontraba sola allí, tenía una sensación sumamente extraña.

Tomé mi celular y vi la hora, era demasiado tarde, deberían estar durmiendo todos, pero tenía demasiada hambre como para no salir de mi cuarto en ese momento.

Cuando llegué a la cocina, tomé unas rebanadas de pan junto con el frasco de mermelada, aproveché también de tomar un jugo de naranja, por lo que una vez terminado de servir, caminé hacia el jardín. Comía mientras podría apreciar la bella vista, la luna era lo que iluminaba todo el campo junto con las estrellas que la acompañaban.

Mi padre me había enseñado sobre ellas, cada una llevaba un nombre en específico, pero la más brillante era la más hermosa, se llama "Kiara". Es uno de los motivos por el cuál me apodaron así.

Al acabarme la comida, me levanté del pasto para ir hacia la puerta, lavé el vaso para luego irme al pasillo, pero me golpee levemente el rostro cuando choqué con alguien.

-Lo siento, no te ví -Me sobaba la frente mientras él se disculpaba.

-No es nada -Me iba a dirigir hacia la escalera, cuando escuché que tosió en señal de que quería hablarme, a lo que voltee a verlo.

-Kiara, últimamente te he visto un poco apagada, ¿está todo en orden? -Esta vez su mirada no reflejaba seriedad, sino ¿empatía?

-Está todo bien -Sacudí mi cabeza hacia un lado -No es nada -Voltee hacia al frente para subir, pero otra vez carraspeó su garganta y volví a verlo.

-Si algún día necesitas algo, avísame y te ayudaré -Nos miramos por un leve momento, en esos ojos sentía que solo quería ayudarme, pero por otro lado aún siento que no puedo confiar en él.

-Gracias -Subí las escaleras hasta perderlo de vista.

Intenté dormir como pude, tenía que hacerlo debido a que nuevamente mañana tendré que ir a la preparatoria de nuevo.

Sonó mi alarma y la apagué, no quería levantarme, era como si no hubiése dormido nada, a pesar de que tuve solo 5 horas para dormir. Me duché y me alisté, ya para cuando quería salir, me topé con Nicholas, quién me esperaba en su auto como siempre, subí y no hablamos en todo el camino, a pesar de no emitir sonido alguno, no sentía incomodidad de todas maneras.

-Hola hermosa -Me abrazó mientras seguimos caminando por el pasillo.

-Hola Dylan -No me encontraba de ánimo.

-Uyy... parece que alguien se levantó con el pie izquierdo -Lo fulminé con la mirada, pero dejé de hacerlo cuando nos sentamos en nuestro asientos en el salón.

-De hecho tengo sueño, es todo -Sacaba el cuaderno mientras él apoyaba su cabeza con su mano en el banco mientras no dejaba de mirarme enamoradamente.

-Ya sé que podría despertarte -Me hizo una mirada pícara, ¿en serio quiere hacerlo de nuevo?, no tengo ánimo para eso.

-¿Qué tal otro día, amor? -Esta vez le sonreí, intentaré no estar tan apagada por él.

-Bien -Se acercó y me dió un pequeño beso en los labios -Quería que fueramos a mi casa este fin de semana.

-¿Quieres ver alguna pelicula?