**Capítulo 5: Decisiones Cruciales**
El ambiente en el Nacional Residen Hospital era dinámico y lleno de energía. Después de un día ajetreado, donde Kara había aprendido valiosas lecciones sobre el diagnóstico y el tratamiento, se reunió con sus compañeros en la sala de conferencias para la sesión de cierre del día. Lena, con su habitual porte autoritario, estaba lista para dar instrucciones y reflexionar sobre el progreso del grupo.
Cuando todos se acomodaron en sus asientos, Lena hizo una pausa para observar a su equipo. Su mirada se detuvo en Kara por un momento, y luego se dirigió a todos.
—Bien, equipo, es importante que reflexionemos sobre las decisiones que cada uno de ustedes tomará en los próximos años. La medicina no es solo una carrera; es una vida que elegimos. Algunos de ustedes quizás no estén tan seguros de este camino —dijo, con un tono serio.
Kara se sintió intrigada. Sabía que la medicina era una carrera difícil, pero no podía imaginarse haciendo nada diferente.
—Hoy quiero que cada uno de ustedes considere sus opciones. Dos de ustedes cambiarán de carrera; puede que decidan que este no es el camino que quieren seguir —continuó Lena, observando las reacciones de los residentes.
Una murmuración recorrió la sala, y Kara vio a algunos de sus compañeros intercambiar miradas nerviosas. Mientras tanto, Alex, que estaba en la esquina de la sala observando la dinámica, soltó una risa contenida.
—¡Vamos, no se asusten! —dijo, mirando a Samantha y a sus compañeros—. La medicina es difícil, pero es increíblemente gratificante.
Samantha sonrió, apoyando a Alex.
—Exacto. Pero también es normal dudar. No todos están hechos para este mundo.
Lena continuó, sin dejarse influir por las risas.
—Además de los dos que cambiarán de carrera, habrá otros dos que considerarán dejar la facultad de medicina. Solo uno de ustedes se quedará. Esta es una oportunidad para que reflexionen sobre sus verdaderas pasiones y lo que realmente quieren hacer en la vida.
Kara sintió un nudo en el estómago. La idea de que algunos de sus compañeros pudieran dejar la medicina la inquietaba. Había visto lo apasionados que eran por la medicina, pero también entendía que cada uno tenía su propio camino.
—Quiero que piensen en lo que realmente significa ser médico. ¿Están dispuestos a enfrentar los desafíos? ¿Están listos para las largas horas y la dedicación que requiere esta profesión? —preguntó Lena, su voz resonando con autoridad.
El silencio se apoderó de la sala mientras todos reflexionaban. Kara miró a su alrededor y notó que algunos compañeros parecían perdidos en sus pensamientos. Ella misma se preguntaba qué haría si estuviera en sus zapatos.
Alex, viendo la tensión en la sala, decidió intervenir con un poco de humor.
—Bueno, si alguno de ustedes decide dejar la medicina, siempre pueden unirse a mí en el mundo de los negocios. No hay nada como un buen traje y una presentación para alegrar el día —dijo, con una sonrisa burlona.
El grupo estalló en risas, y la atmósfera se aligeró. Kara sonrió, sintiendo que las palabras de Alex habían traído un respiro de alivio.
—En serio, aunque la medicina puede ser dura, también es increíblemente gratificante —dijo Samantha, mirando a sus compañeros—. No hay nada como ayudar a alguien en su momento más vulnerable.
Lena asintió, permitiendo que el grupo respirara un poco más.
—Exactamente. Esta es una elección que debe hacerse con cuidado. Pero recuerden, ser médico no solo significa curar cuerpos; también implica ser un pilar de apoyo para sus pacientes. Y eso es lo que hace que esta profesión sea tan valiosa.