Mientras salíamos de esa casa vacía y abandonada, una sensación inquietante me envolvía. Las palabras de mi madre resonaban en mi cabeza, burlonas y llenas de control. A pesar de la rabia que sentía, algo en su tono me pareció familiar, como si hubiera querido decir más de lo que sus palabras revelaron.
Ryan conducía en silencio, respetando mi necesidad de procesar lo sucedido. La carretera vacía parecía reflejar mi mente: un laberinto oscuro y sin salida. Entonces, un recuerdo enterrado comenzó a asomarse, suave pero insistente, como un susurro en la parte trasera de mi mente.
-¿Qué pasa? -preguntó Ryan, notando mi expresión distante.
-Hay algo... algo que mi abuela solía contarme cuando era niña -respondí, mirando por la ventana-Era un cuento que siempre me leía antes de dormir.
-¿Qué cuento? -insistió.
Cerré los ojos, tratando de recordar los detalles. La voz de mi abuela volvió a mí, cálida y paciente, narrando aquella historia que tantas noches me hacía sentir segura.
-Era sobre una casa en el bosque. Una casa al este, escondida entre árboles altos y un río cercano que siempre cantaba con el viento. Me decía que la casa estaba protegida por el bosque, y que solo aquellos que realmente la buscaban podían encontrarla.
Ryan arqueó una ceja.
-¿Crees que eso tiene algo que ver con todo esto?
Asentí lentamente.
-Cuando me dio su dirección, algo en su tono me hizo recordar cómo me narraba ese cuento. Pero ahora que lo pienso... quizás nunca quiso decir que estaba al norte. Era yo quien siempre confundía las direcciones. Mi abuela siempre corregía: 'No es al norte, Kaia, es al este.' Me lo decía con una sonrisa, como si fuera algo importante.
Ryan me miró con atención, procesando lo que decía.
-¿Y si usó la dirección que nos dio para despistarnos? Quizás la pista no es el lugar al que fuimos, sino algo que quiso que recordaras.
Sus palabras me encendieron algo en el pecho. Mi abuela siempre había sido sutil, dejando pequeños detalles ocultos en cosas simples, como ese cuento. Si estaba tratando de ayudarme, lo haría de esa manera, sin ser obvia.
-¡El bosque! -exclamé, mis pensamientos conectándose al fin-. Hay un bosque al este de aquí, cerca de un río. Fuimos allí una vez cuando era niña. No estoy segura de si vive allí, pero algo me dice que tiene que estar cerca.
Ryan asintió, girando el auto en la próxima salida.
-¿Estás segura? Podría ser un callejón sin salida.
-No estoy segura de nada en este momento -admití-, pero si mi abuela quiso que recordara el cuento, entonces debe haber algo allí.
El viaje hacia el bosque fue silencioso, pero mi mente estaba en constante movimiento. Los árboles empezaron a alzarse a nuestro alrededor, y el río apareció a lo lejos, murmurando como en el cuento. Reconocí el camino, aunque había cambiado con los años. Finalmente, llegamos a una pequeña cabaña que se escondía entre los árboles.
-Es aquí -susurré, con el corazón latiendo con fuerza.
Ryan apagó el motor y ambos nos bajamos del auto, avanzando con cautela hacia la cabaña. La puerta estaba entreabierta, pero no había señales de movimiento en el interior. Entramos despacio, y el aire estaba lleno del olor a madera y hierbas secas.
Sobre una mesa en el centro de la sala había una nota. Mis manos temblaron al reconocer la caligrafía de mi abuela.
"Kaia, sabía que encontrarías el camino. Siempre has sido más inteligente de lo que piensas. Si estás aquí, significa que las cosas se han complicado. Hay mucho que debes saber, pero el tiempo no está de nuestro lado. Sigue buscando. Empieza con las historias que te conté. Todas tenían un propósito. Recuerda: no todo es lo que parece.
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Alma Oscura [Sombras Del Pasado I]
Mystery / ThrillerEn mi vida, he sido mi refugio y mi mayor reto. Los sueños de mi infancia, brillantes y llenos de esperanza, se han desvanecido en cenizas. Mis padres, siempre ausentes, priorizaron los viajes y los secretos sobre su hija, dejando vacíos en cumpleañ...