Una Historia Por Delante. - Rubelangel Stories- (FINALIZADA)

CAPITULO 11: UN NUEVO INTEGRANTE.

Narra Rubius:

Es la 01:00 am, Mangel aun no regresa, me preocupa que se haya quedado con Cheeto a dormir o a hacer otras cosas...
Enserio, sigo sin creerme como Mangel pudo aceptar, ¿Acaso es tonto?
Tal vez seria una buena idea ir a dormir. -Me levanto del sofá-

Cuando iba camino a mi habitación escucho que abren la puerta, volteo y era Mangel, tiene un gatito muy mono entre sus brazos. -me acerco a el-

Rubius: ¿Y este gatito? -Digo mientras lo acaricio-

Mangel: Pues cuando iba saliendo de casa de Cheeto lo escuche y no pude dejarlo ahí solo, así que lo traje a casa.

Rubius: Nos lo podemos quedar, ¿cierto? -Digo mientras observo los hermosos ojos verdes del gatito totalmente blanco-

Mangel: Claro que podemos Rubius, es nuestro.

Rubius: ¿Como le podemos llamar?

Mangel: No lo se. -Dice mientras pone cara de pensativo-

Rubius: Tal vez podría llamarse Ares.

Mangel: Ese nombre suena perfecto.

Rubius: Pero bueno, ahora deberíamos bañarlo ¿no? -Tomo a el gato me dirijo a el baño y abro el agua caliente y fría para que quede en plan tibia-

Ya esta listo, tomo a el gato y lo meto en el agua, no me cuesta trabajo, no es como otros gatos o como Raspy y Wilson que le tienen miedo a el agua, que raro.

Mangel esta detrás mío creo que sería buena idea preguntarle sobre Cheeto.

Rubius: Y bueno Mangel, ¿Que tal todo con Cheeto? -Volteo a verlo mientras baño a el gatito-

Mangel: Este, pues, bien, solo estuvimos hablando. -Dice un tanto nervioso-

Lo a dicho todo como si buscara una excusa creíble, siempre eh confiado en el y siempre lo haré, pero, no confío en Cheeto, así que eso es lo que me preocupa.

Rubius: Mangel, puedes tomar esa toalla de ahí y dármela por favor. -Clavo la mirada hacía donde esta la toalla-

Mangel me da la toalla y yo comienzo a secar a el gatito, este gato es muy tranquilo, más de lo normal, incluso pienso que tal vez esta enfermo, pero no lo creo, se ve muy bien de salud.

Termino de secarlo, lo meto en la casita de los gatos junto con una sabana pequeña para que no le de frío, sigo pensando que es un gato muy lindo.

Rubius: Bueno Mangel, creo que deberíamos empezar a empacar, ¿no? Para que luego no se nos junte todo.

Mangel: Vale, vale.

Los dos nos dirigimos hacía la habitación y comenzamos a empacar, siento que Mangel esta raro, no habla mucho, ¿estará bien?

Rubius: ¿Mangel, estas bien?

Mangel: Si, solo estoy un poco cansado.

Rubius: Mangel, te quiero. -Digo mientras lo abrazo-

Mangel: Yo también te quiero y mucho Rubius. -Dice mientras corresponde a el abrazo-