Estres

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Todos andan demasiado estresados por esto de los exámenes y eso me estresa... Es algo que se contagia. No digo que soy un cerebrito pero si mantengo un buen promedio.
Estaré en un círculo de estudio con Isabela, Grace y Sebastián, en verdad que amo estar con ellos.
El examen es el Miércoles y nos reuniremos hoy, hoy Lunes a las tres.
***

No entiendo porque siempre se me hace tarde, para todo se me hace tarde. Son las 2:50 y yo sigo en mi casa; escucho el claxon del carro de mi Papá quien me llevará donde Isabela y salgo corriendo para no perder más tiempo.

Es la primera vez que entro a su casa y debo aceptar que es algo acogedora, ella pasa literalmente sola. En la entrada es su jardín, después su sala y al lado el parqueo, luego el comedor, baño, cocina y al final lo que creo que es el porche. Grace y Sebastián estan en la sala preparándose mentalmente para las torturas de matemática.
Después de dos horas, terminamos unos cuarenta ejercicios y no quiero saber nada mas de números. Grace se fue hace unos quince minutos y ahora sólo somos tres.

-China,¿ en verdad puedes volar? -Preguntó Sebastián.

Eso de mis poderes de volar fue algo que inventamos con Isabela un día en la escuela, yo tenía mis manos en una silla y ella levantó mis pies, de alguna manera me elevé tanto que puede tocar el techo del salón.

-Ella quizas no puede volar pero yo si te puedo pegar un puñetazo para que te calles y dejes de ser tan crédulo- contestó Isabela.

-¡CHINA!-Gritó Sebastián como si fuera un niño de cuatro años.

-No Sebastián, obvio no puedo volar, pero si puedo comer un elefante con el hambre que tengo.

- Astrid, aveces pienso que tus padres no te alimentan.

Fuimos a una venta que queda a unas cuantas cuadras de la casa de Isabela y cuando estamos de vuelta, mezclamos todos los snaks en un recipiente haciendo la ensalada menos saludable del mundo.

Yo estoy acostada en el sillón más grande con mi cabeza recostada en las piernas de Sebastián, e Isabela en un sillón que es para una persona. Tenemos un canal de música en la televisión aunque nadie lo esta escuchando porque estamos muy concertados en los celulares, es muy típico.
Mientras sonó Happy me levanté en seguida y empece a bailar de la manera más ridícula existente en el planeta, luego levante a Sebastián y los dos estábamos bailando de la manera más ridícula existente en el planeta; entre giros y movimientos de Macarena montamos una coreografía que agradecía que nadie mas la estuviera viendo, sólo éramos tres amigos divirtiendonos y creando recuerdos para toda la vida.
Me dio aún mas risa ver que Isabela lo había grabado todo, en verdad que era muy risible.
*****

Estamos en este mundo, haciendo cosas que seguramente al morir nadie recordará pero no por eso hay que quitarle valor a la vida; en verdad que nadie sabe cuanto tiempo estarás aquí, por eso... Riete a carcajadas, llora cuando lo amerite y baila ridículo.

Confesiones de un corazón rotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora