Acéptalo, Eres mía.

36

Anne.

Salió a la azotea, como todos los domingos estaba vacía, y eso estaba perfecto para ella, iba acercándose al balcón pero prefirió no ir, necesitaba un apoyo, por lo que se acerco a la pared y se sentó con ella de respaldo, y ahí dejo sus lagrimas correr, lloro hasta deshidratarse antes de dejar los pensamientos fluir, dejo salir toda la rabia y la pena salir de su cuerpo, pero una vez que ya no tenia mas lagrimas volvió a repasar la escena del hall, la escena del pasillo, las caras, las palabras, las reacciones, el dolor, los ojos de Justin observándola solo a ella.

¿Por qué ahora? ¿Por qué cuando es mío? ¿Por qué?

No podía negarse a la verdad, él tenia todo un pasado, él había dejado a una chica embarazada y era un milagro que no tuviera mas hijos por el mundo y quizás los tenia, esa chica estaba embarazada y... era su culpa y de nadie más.

Era su culpa por ir de cama en cama, era su culpa por mujeriego, ella sabia que él era así, ella sabia que Justin Bieber había estado con más de la mitad de las chicas de la academia, era casi lógico que alguna se embarazara de él, pero demonios él no la engaño, ella sabia como sabían todas lo que él era, es su pasado, su pasado y no podía hacer nada, cerro los ojos y pensó en su fin de semana... el no la engaño.

El no te engaño... él... un bebé maldita sea un bebé.

Él tenia que responder por ese bebé, tenia que responder. ¿Qué pasaba con ella? ¿Qué pasaba ahora con ella? ¿Debía olvidarse de su fin de semana?

Maldita sea él no la engaño y tuvieron el mas mágico de los fines de semana y ahora todo quedaba en nada, no podía ponerse entre un hijo y su padre, el debía responder por ese bebé aunque a ella se le partiera el alma, un bebé, no quería pensar que un bebé arruinaba su vida, su felicidad, su amor. Dios ella no podría hacer su vida junto a él, él debía estar junto a su hijo, su pena, sus ojos, se había jurado jugársela por él, había aceptado amarlo hace solo un par de horas y ahora estaba sentada sola en la azotea dejándolo solo.

Tenia que convencerlo de estar con su hijo, tenia que decirle que aunque lo amara, él debía ir con su hijo, tenia que decirle que no podía ser, que primero estaba... oh dios... las lagrimas seguían cayendo y cayendo, necesitaba tenerlo entre sus brazos, necesitaba su consuelo.

Se levanto y bajo, iba caminando lentamente, quería controlarse antes de ir frente a él, estaba caminando por el pasillo preguntándose donde estaría el cuando salió Chaz y Jason de la sala de música, ambos la miraron, recordaba la fuerza de Jason, si él no la hubiese sostenido frente a los demás se habría derrumbado frente de todos, debía darle las gracias. Camino hacia ellos y Chaz cubrió su cara con las manos, eso la hizo detenerse.

—Deduzco que este fin de semana, estuviste con mi hermano.

—Eso ya no importa realmente.

—Si que importa Anne, si que importa. —hablo Chaz.

—Anne se que esto es difícil para ti y mucho mas para Justin, es...

—Son... las consecuencias de los actos. —conteste mirando a Jason. —todo acto tiene una consecuencia, tu hermano lo dijo.

—Si eso es cierto pero tú... quisiera decirte que no es culpa de Justin pero, Anne no... él no esta bien, él te quiere niña y esta sufriendo te necesita...

—Su... el bebé que espera Jasmine también...

—Oh niña no estamos tan seguros que exista el bebé. —contesto Jason —y si existe. que sea de mi hermano...

—Esas palabras no son de unos caballeros...

-Bien no es noble, es una bajeza pero no somos ningunos crédulos, ódianos si quieres Anne pero un Bieber es una buena presa para una... Justin Bieber es mejor que otro, y la tipa esa siempre escogerá lo mejor.

—Y Justin es mejor...

—Es un Bieber Anne. —interrumpió Jason —es el idiota más solicitado de esta academia y tiene la fortuna mas grande que se puedan aspirar, oh si Anne hay tipas que harían cualquier cosa y Chaz y yo vamos a asegurarnos que mi hermano es el responsable tanto él quiera como si no.

—¿Dónde esta? —pregunte, mirándolos.

—En la sala... solo te permitiré entrar si me juras que no...

—Jamás. —lo interrumpi —no lo patearía si esta en el suelo. Solo quiero verlo.

—Contiéndelo Anne, dale tu hombro. —contesto Chaz.

Ellos se fueron algo inseguros pero ella los entendía, eran sus hermanos.

Abrió la puerta y lo encontró sentado en el piso junto a la pared en un rincón, él cerro los ojos cuando abrió la puerta, su cara estaba bañada de lagrimas y no soportaba verlo asi, se sentó junto a él y lo jalo hasta que él estuvo apoyado en su regazo y lo dejo llorar, lo dejo desahogarse.

—¿Justin... que vas a hacer?

—No lo se... solo puedo pensar en las tontas decisiones que he tomado, en que si esa noche solo me hubiera, no debí entrar en ese cuarto.

—Ya es tarde para pensar en los no y si... ya es tarde Justin.

—Soy un tonto, ¿lo sabias? soy el más idiota de los hombres. —contesto él —te ame desde que te conocí, te añore, te deseaba... maldición Anne me iba a la cama todas las noches pensando en ti, te codiciaba más de lo prudente, cada vez que cortejaba, que me iba con alguna chica al cuarto pensaba en ti. Soy un bastardo, me frustrabas, cada rechazo, dios Anne apagaba la luz y soñaba contigo, pero nunca fuiste tú y el vacio... yo me busque esto, por mi culpa, nunca te he merecido.

—Si eres un bobo... un bastardo... un imbecil, maldito seas Justin Bieber, maldito seas.., quería entrar a tu cuarto, quería estar en tu cama, quería que me tocaras y me besaras y lo odiaba, odiaba que te fueras con una y con otra y todo esto es tu culpa, ¿Es que no podías mantener el zipper cerrado? Dios te odio.

—Ódiame yo ya lo hago. —contesto frustrado.

—Nunca te he odiado... no puedo hacerlo... ¿Qué vamos a hacer? Justin yo no... un bebé maldita sea...

—Lo odio Anne y no debo hacerlo, pero lo odio... cada vez que lo vea voy a pensar...

—No... no Justin... ven aquí.

Lo abrazo y lloraron juntos un buen rato, él no abandonaría a su hijo y ella no podría estar con él si lo hacia, todo era tan injusto, todo era... él le tomo la cara y la beso, la beso duramente, los labios le dolían y la mordía, él estaba hecho un loco...