Acéptalo, Eres mía.

39

—Así que encontré el escondite del cobarde.

—¿Qué haces aquí?

—No es obvio Justy. —contesto Jasmine. —voy a tener a tu hijo y el gran Justin Bieber sale arrancando como un cobarde. Tus hermanos me visitaron, me amenazaron y te juro que voy a ir a la prensa si siguen acosándome. Infiernos Justy estoy embarazada por tu culpa, no me merezco que me humillen, no le hace bien a nuestro hijo, además esto es por tu culpa.

—No recuerdo haberte obligado Jasmine.

—No tú solo te tumbaste sobre mí, ahora es cuando asumes tus responsabilidades Justy, no merezco que me insulten y no creo que debieras aceptar que traten asi a la madre de tu hijo.

—¿La madre de mi hijo? ¿Qué te pasa? ¿Me lo creo asi como así? ¿Solo por que tú lo dices?

—¿De que estas hablando? Si estoy esperando un hijo...

—¿Estas segura Jasmine? Y... ¿Será mío? Bien vamos a averiguarlo.

La agarro del brazo y la jalo fuera del departamento, no le importo ir con pantuflas ni en esas pintas, la arrastro hasta la farmacia de la esquina, ni siquiera pensó en los paparazzi que a veces lo seguían, simplemente la empujo delante del mostrador y le pidió al dependiente una prueba de embarazo. El sujeto lo miro con ceño fruncido pero igual le entrego el tes, el pago y la arrastro de vuelta al departamento.

—Bien pruébamelo.

—Nunca en la vida me habían humillado tanto, viste la cara del sujeto en la farmacia. Eres un bastardo.

—Si no te haces la prueba lárgate y no vuelvas nunca más.

—¿Aquí delante de ti? Eres un... ¿Por qué me haces esto? Soy la madre de tu hijo por dios santo. —grito alzando las manos al aire.

—Eso aún esta por verse, y como dicen ver para creer.

Espero fuera del baño solo un minuto y le golpeo la puerta diciéndole que esperara el resultado fuera del baño, ella salió y puso el tés en medio de la mesita de la sala, el miraba el dispositivo plástico casi dolorosamente, ella sin embargo se miraba las uñas. Una vez que pasaron los cinco minutos y le confirmo el estupido tés que ella si decía la verdad quiso destrozar la sala, pero no movió ni un musculo, solo se quedo sentado mirando el maldito tés.

—Ves, si estoy embarazada Justy, bien ahora estaba pensando...

—¿Cuándo te puedes hacer el examen de paternidad? Por que puedes estar embarazada cariño pero el punto es... ¿Quién es el padre?

Escucho la voz de su hermano que venia de la entrada, pero no miro. Él seguía con los ojos clavados en el tés ¿Por qué había esperado un milagro? Con su suerte era el padre de ese bebé y podría perderlo, diablos un hijo, un hijo con esta mercenaria.

—Di algo Justy, no puedes permitir que tu primo trate asi a la madre de tu hijo.

—Oh cariño no uses las palabras con tanta libertad, yo estoy seguro que no voy a ser tío. —contesto Chaz entrando al departamento.

—Aunque te duela Chaz, yo estoy embarazada de Justy y él tiene que responderme.

—¿Por un revolcón? Y oh si que me dolería que mi sobrino tuviera una mercenaria como madre, pero como no es el caso...

—Cállate idiota cállate, Justy di algo, no dejes que este me insulte.

—Chaz, Jasmine tiene razón, no la insultes... creo que lo mejor seria...

—Que esta se largue de mi departamento. —hablo él señalando la puerta y jalando a Jasmine fuera este

—¡Suficiente! —grite —No te voy a permitir que la insultes más, ella tiene razón y merece algo de respeto.

—Justin no hagas esto, no le creas tan fácilmente...

—Sabes lo que significaría para mi que fuera cierto y yo te permita insultarla a tu gusto primo.

Vio a Chaz apretar los dientes furioso cuando escupió la palabra primo, ambos se miraron a los ojos, el desafío, jamás había tenido este trato con ninguno de su familia, si pelearon varias veces pero jamás así, sabia que no estaba bien, que Chaz solo se preocupaba por él pero, si ese bebé era suyo, jamás lo decepcionaría, jamás.

—¿Así es como vas a enfrentar este problema?

Escucho que algo reclamaba Jasmine pero solo era sonido.

—¿Problema? Jamás escuche a mamá llamar problema a ninguno de nosotros Chaz.

—Mi tía, la que me cuido por años, es una santa no como la golfa.

—Deja de insultarla.

—Tu eres un hijo de puta estoy embarazada imbecil, si tengo algún problema va a ser tu culpa...

—Si no te gusta lárgate como ya te dije. —contesto Chaz sin dejar de mirarlo.

—Esta bien, vámonos Jasmine anda tenemos que hacer aqui...

—Justin...

—Si la echas a ella me echas a mi.

Chaz giro la cara pero no dijo nada, dejando claro que los quería fuera de su departamento, estaba bien, él merecía el castigo, merecía que nadie le hablara, que lo creyeran un... diablos ¿Qué iba a hacer?

Tras él venia la madre de su futuro hijo y deseaba gritar y escapar, no quería esto... dios ¿Cuándo iba a terminar?

—Soy abogado, voy a pedir una prueba de paternidad. —sentenció Chaz.

—¿Es que no puedes dejar de humillarme maldita sea? —grito Jasmine —Voy a tener un hijo de tu primo y esto no me hace bien. Justin dile algo...

—Chaz por favor solo déjalo. —hable dirigiendome a la puerta y jalando a Jasmine. —no necesito la maldita prueba ok.

—Pues yo si, soy el maldito abogado de la familia y si quieres ponerle el apellido Bieber a ese bebé tendrá que demostrar serlo ¿me oíste?, no permitiré que una caza fortuna nos embauque.

—Me casaré con ella.