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—Al parecer a mi. —dijo separándose solo un poco.

—Si... a ti...

Fue como inyectarle combustible.

Llas manos de Justin parecían enfebrecidas sobre su piel, la quemaban, y le daba tan poco tiempo para respirar, no es que le importara respirar, o no más que besarlo al menos, besarlo y tocarlo, sus hombros, su espalda, sus brazos ya que no la dejaba separarse ni un centímetro.

El cuarto le dio vueltas o más bien ella estaba cayendo pero no le interesaba ya que él venia con ella, sobre ella, aterrizaron en un cómodo colchón, las manos de Justin esta vez estaban en sus muñecas y las llevaba sobre su cabeza, era un poco, intimidante estar atrapada, tan expuesta bajo él, pero a la vez era excitante, muy excitante, con una rodilla él separo sus piernas y se sentía vulnerable, en peligro, pero él seguía besándola y no podía pensar, no podía razonar, y quería agarrarlo del cabello, le encanto enredar sus dedos ahí.

—Quiero mis manos. —balbucee

Él le soltó las manos inmediatamente y ella las llevo a ese cabello rubio, pero ahora besaba su cuello, y con cada toque le quemaba la piel, le electrizaba, sentía arder y quería hacer mil cosas, gritar, besarlo, arañarlo, apretarlo contra su cuerpo diablos estaba enloquecida.

Él tocaba su cintura y su cadera pero la mano siguió bajando hasta su pierna, su muslo, y la jalo sobre su cadera, eso... el estaba... estaba muy cerca... sentía... sentía la punzada de su dura... oh dios el chico estaba bien equipado y estaba muy cerca de ella, esta duro y caliente justo donde encajaban pero aun estaban con ropa, él se movía sobre ella y apenas podía pensar, la mano de Justin volvió por su muslo, su cadera y su cintura, sus costillas, siguió subiendo hasta acunar su pecho en su mano.

—¡NO!

Como un balde de agua fría, no había venido a esto.
Grito el no y quiso escapar, quiso saltar de su cama pero no pudo, él no la dejo, la tenia prisionera entre sus brazos que estaban como el acero.

Se revolvió en el lugar y lo empujo pero no se movió, él no se movía, no se movía, que diablos... estaba quieto, levanto la mirada y él la miraba.

—Déjame salir Justin. —dije tratando de recuperar el aliento.

—No, lo siento yo... iremos a tu tiempo.

—Esto...

—¿No debió pasar? ¿Esto no esta pasando? ¿Olvídalo? Me vas a volver loco... no, ya estoy loco...

—Déjame salir Justin por favor. —dije retorciendome debajo de él —yo solo venia a decirte... disculparme por lo de hoy, esta bien no debí gritarte pero es que tu no entendías.

—¿Qué no entendía? Por que no entiendo nada, me gritas y ahora...

—No esta bien Justin, yo no se por que... tu solo estas aprovechando...

—Basta, se que tu concepto de mi no es el mejor del mundo... creo que es el peor, pero Anne míranos. —dijo señalando con su cabeza.

—¿Qué veo? Que nos peleamos cada vez que nos vemos...

El alzo una ceja y torció una sonrisa, se le vino a la cabeza la frase "pierdes mucho tiempo metiéndote con él de la forma equivocada" maldita Katherine, era culpa de ella que estuviera hecha un lio, aunque su amiga era bastante asertiva por lo general, esta vez no, él le mostro los dientes antes de hablar.

—No estamos peleando ahora. Estamos medio desnudos en la cama. —dijo sonriendo.

—En tu cama querrás decir y antes se congela el infierno.

De un empujón lo saco de encima y se levanto, furiosa, dios ella metida en la cama de Justin Bieber, que estaba pasando, en que demonios estaba pensando... No estabas pensando maldita voz de la conciencia, estiro metafóricamente su inexistente ropa para él y se dispuso a salir pero Justin era rápido, de un solo tirón la arrojo sobre la misma cama que recién había escapado y se sentó a horcajadas sobre ella y le agarro las muñecas sobre la cabeza cuando quiso golpearlo, pero por alguna extraña razón no tuvo miedo.

—No vas a volver a salir arrancando Deep. —dijo el mirando directamente a los ojos.

—Habla Bieber y que sea rápido. —escupi —porque quiero salir de aquí lo más rápido que pueda.

—¿De mi cama?

—Joder.

—Basta. Como yo lo veo, tenemos que llegar a un acuerdo...

—No veo el motivo, ahora hazte a un lado. —hable retorciendome nuevamente para quitarme de su agarre.

—"El motivo" estas en cueros en mi cama Anne... ¿quieres mas motivos? Yo no necesito más...

—Una chica en tu cama ¡pero que extraño! —bufe histérica.

—Nos gusta besarnos... ardo de solo pensar... que va, basta que digan Anne para que me queme por dentro... para que...

—Yo creo que no. —lo interrumpí —yo creo que solo quieres... ¿Qué vas a decir? "Tumbe hasta a Anne Deep" ¿o tal vez es una apuesta? Maldición Justin si es una apuesta te juro que...

El se movió muy rápido, se tumbo sobre ella y le separo las piernas con ambas rodillas.

—Esto no es una apuesta. —dijo sin quitarle la mirada de encima.

Se quedo muda, que podía decir si él estaba duro, su vara estaba contra ella, podía sentirlo palpitar y el mismo se veía como drogado.

—Duele... arde... y solo deseo estar dentro de ti... besarte cada centímetro de tu cuerpo... Anne me estas volviendo loco y me dices que es una apuesta. ¿Qué vamos a hacer con esto que sentimos? Tu dime ya que pareces saberlo todo, yo no se.

—El tú y yo no existe. —conteste.

—Yo creo que si.

Acéptalo, Eres mía.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora