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TN estaba en un centro comercial, su cita de hoy había sido ir al cine, comer y quizás comprar algunas cosas.
Al fin después de 2 meses Gambito no había aparecido por su vida ni hacía acto de presencia, tanto directa u indirectamente. Así que eso la mantenía un poco aliviada y tranquila.
Estaba al lado de Evan, un tipo que la dejo flechada a primera vista. Por azar del destino fue correspondido este interés.
No habían pasado más de tres semanas desde que comenzaron a hacerse amigos y después a salir para llegar a una relación más seria.
Mirá, este vestido se te ve hermoso. -Evan llevaba en sus manos un vestido rosa metálico el cual era corto y pegado-
¡Wow! ¡Esto es hermoso! Dios, me encanta. -TN sostuvo el vestido y después se miró al espejo para ponerlo delante de ella y ver cómo se vería-
Eres tan preciosa, siempre lo eres pero este vestido resalta mucho contigo. -Evan sonrió y se mordió un poco el labio- pruébatelo si quieres, deseo comprartelo.
¿Qué? No hace falta, puedo pagarlo yo. -TN se sonrojo y después aceptó ir al probador-
Un rato más tarde salió con el vestido puesto, claramente le quedaba muy bien y lo hacía lucir.
Evan se asombró al verla, no pudo evitar sentir como su corazón comenzó a latir tan rápido.
Bien, ese vestido necesita unas zapatillas también. -tomó a TN del brazo y delicadamente la sentó en un asiento acolchonado mientras le indicaba a la empleada de la tienda que tipo de zapatillas buscaba-
TN estaba muy feliz, le daba pena que Evan le cumpliera sus caprichos pero sin duda alguna le demostraba mucho el amor que le tenía.
Mientras aún esperaba a que Evan fuera a traer las zapatillas se quedó sola en la tienda. Decidió encender su celular y en eso había un mensaje SMS que le llegó de un número desconocido.
« Ya sé quién es él, no puedes huir de mí. »
Esto dejo a TN con los ojos muy abiertos pero tenía que actuar normal, no quería que Evan se preocupará.
Así que apagó su celular y por intuición decidió mirar a su alrededor, no había nada fuera de lo normal, hasta que una voz la hizo dar un susto.
Hola TN ¿Cómo has estado?
Eh um hola... -dijo nerviosa-
Pasaba por aquí y de la nada te ví, sabes por aquí hay un buen casino pero mira a dónde me trajo. -Remy se acercó más-