capitulo 7

60 11 2
                                    

Subí al elevador con el recargado en mi, aun seguía diciendo cosas sin sentido, por suerte la tipa de la recepción se había ido, lo lleve asta a su habitación, toque la puerta esperando a que Bryan estuviera despierto, no abrió, trate de abrir la puerta, pero tenía seguro, de nuevo toque, la luz se prendió, y el castaño con cara de sueño y ojos hinchados, al fin abrió.
-encontré a tu amigo- dije indiferente
-maldita sea- susurro
-¿desde que horas está fuera?-
-acabo de verlo-
Entonces recordé mis jeans
-salí a comprar unas pastillas para el dolor de cabeza- invente
El me ayudo a llevarlo a su cama.
-oye- me dijo
-no le digas a nadie- bostezo, y se tallo los ojos, lo observe unos segundos
-claro- le dije seria
-vale- me dijo, me di la vuelta y salí de ahí, me diriji a mi habitación y me dispuse a dormir, aunque sólo podía pensar en el beso de Freddy, y lo que sentí en ese momento, nada estaba llendo como quería, ni un día en México y todo era tan desastroso, no hay nada que lo pueda hacer peor, pensé, di varias vueltas por mi cama, pero no conseguí el sueño.
5.00 am de la mañana, no podía cerrar los ojos.
Veía el sol por mi ventana y cielo comenzando a aclarar, sin darme cuenta cerré los ojos, caí en el mas pesado de mis sueños.

Freddy:
Desperté con un terrible dolor de cabeza, eran como las 9:00 am, mire mi ropa y recordé haber salido del hotel anoche, el problema era que Bryan no estaba en la habitación. Me levante pero al ponerme de pie sentí el mareo, había tomado demasiado me lamente,
Puta madre, dije sentándome de nuevo, volví a ponerme de pie y me dispuse a ducharme, trataba de hacer memoria de lo ocurrido en el bar aunque por mas que lo intentaba no lo lograba, me senté de nuevo, llame a Bryan no contestaba. Deje mi celular en la cama bruscamente, pues habían llamado ala puerta, abrí, era Jesús...
-a desayunar Freddy ala una nos vamos- me aleje de el
Tratando de disimular que tenía sueño
-ya bajo- le conteste, cerré la puerta, me recoste mi cama, acuerda te maldita sea, me repetí A mi mismo.
Baje ala zona de restaurante, pase mi vista por el lugar, tratando de buscarla, el desayunos fue sencillo.
Le envíe un mensaje a Bryan el cual no contesto, estaba encabronado conmigo, al leer el mensaje, se levanto de la mesa y estoy seguro de que fue a nuestra habitación.
Volví a buscarla con la mirada h la ví, justo en la mesa de atrás estaba platicando con aborito.
Se veían serios.
Eran las diez y algo de la mañana, trate de ignorar las ganas que tenía de escuchar esa conversación y subí, para hablar con Bryan, toque la puerta.
-adelante- dijo, con una voz normal, aunque sabia que vendrían insultos de su parte al verme, suspire, abrí la puerta, no me dirijio la mirada
-oye bro gracias por traerme- trate de sonar lo mas arrepentido qué podía.
El me miro, preocupado.
-no recuerdas- me dijo aun mas sorprendido
-tomaste demaciado- me dijo, dibujando una sonrisa burlona,
Sonreí
-dejate de mamadas-
-¿no recuerdas?- se paro cerca, en frente de mi
-no- le conteste-
Cambio, ahora parecía tener cara de mi padre
-deja de hacer pendejadas-
Me regaño
Lo ignore, me recoste en el colchon, y pensé, si no fue Bryan quien fue? Eso me rondo por la cabeza, tenía la duda , aunque no estaba seguro, y sí Bryan lo negó para asustarme, paso por mi cabeza. Salimos del aquel lugar, y nos encaminamos al patio, para llegar con los castores

~Al final de arcoiris no hay nada~(freddy leDonde viven las historias. Descúbrelo ahora