Capítulo III Dentro del Bosque Variti

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-Efectivamente joven Sastian, soy un mago -contestó educadamente el mago Mezdero-. Aunque hechicero, hombre mágico o guerrero que usa magia, me gustaría más -dijo entre risas con aire de grandeza.

-¿Cómo sabes mi nombre? -cuestionó Sastian bastante confundido y sorprendido por tal ser mágico ante sus ojos.

-Es una larga historia muchacho, quizás en otra ocasión la sabrás -argumentó con ojos de alegría.

El ambiente se sentía extraño hablando con el viejo, como si esa aura que emana de él le recordara algo bastante familiar a Sastian.

Un recuerdo de su padre, cuando era niño fue lo que le vino a la mente.

-Mi padre -suspiró mirando el suelo y con la cabeza abajo.

La humana antes dragona, veía la tristeza en los ojos de Sastian, pero sin tomarle importancia habló.

-Entonces Mezdero tenemos que...

-Dragona -había interrumpido Sastian-. ¿Puedo viajar en ti a mi aldea?

-En primer lugar me llamo Ishna -le corrigió algo molesta-. Y en segundo lugar no puedo convertirme en dragón a voluntad, necesito una poción específica.

-Pero entonces si te ayudo a conseguir esa poción puedo viajar en ti -le propuso.

El viejo sólo se quedó observando a Sastian. Comprendía la situación de porque tenía tantas ganas de ir a su aldea, una gran pérdida estaba en los hombros de Sastian como para olvidarlo en sólo un par de horas.

-Escucha, hmm... Sastian -recordó su nombre haciendo un movimiento de cabeza-. ¿Porque que quieres volver a ese lugar?, ese sitio parecía una basura aun sin haber venido a quemarlo todo. -observó al pequeño dragón que estaba en sus manos-. ¡Ustedes ladrones!, robar huevos de dragón es un crimen -gritó enfurecida-. ¡Mi pobre hermanito, como te has atrevido!

-¡Ishna! -gritó el viejo hechicero.

Tanto Sastian como Ishna temblaron al escucharlo. Solo alzó la mirada hacia Ishna y le hablo calmadamente.

-¿De verdad crees que personas como Sastian robaron a tu pobre hermanito?, tonterías, tu viste el sitio en donde estaba Sastian, un lugar infestado de ladrones. Me sería más fácil deducir que fue un ladrón antes que Sastian.

Ishna bajo la mirada, estaba totalmente avergonzada; pero la pérdida de su hermano enserio le atormento.

-Créeme que sé que es que alguien te arrebate algún integrante de tu familia –le habló Sastian con ojos de comprensión-. Ishna enserio necesito ir a mi aldea, quiero saber donde están mi mamá y mi hermano.

Ambos se miraron fijamente.

-Me gustaría Sastian, pero no tengo poción para transformarme -el joven Sastian la interrumpió rápidamente.

-No te preocupes yo te ayudare a conseguir más.

-Eso es muy considerado de tu parte Sastian -exclamó Ishna con una gran sonrisa en su cara rojiza.

Mezdero rió mientras cerraba los ojos.

-Bueno está decidido -dijo-, vamos a conseguir más poción juntos.

-Aguarden, ¿en dónde conseguiremos poción? -preguntó despistado Sastian.

-Fácil -habló Ishna con gran confianza cruzando los brazos-. En el Bosque Variti.

Extraño nombre había nombrado Ishna, un bosque más que encantado, curioso y misterioso podrían categorizarle. Un lugar oculto por miles de árboles y lleno de criaturas mágicas.

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