Capitulo 2

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Estaba terminando mi tazón con cereal cuando Mackenzie apareció en mi cocina demasiado feliz como para ser recién las siete de la mañana. Claro, no es que hubiera aparecido de la nada, la escuché llegar y a papá abriendo la puerta para ella pero el punto no era ese, el tema es que si de por si yo no era una persona mañanera, Mackenzie era mucho peor, el punto de que si un fin de semana la molestas antes del medio día lo más probable es que te lance su almohada y siga durmiendo así que era bastante extraño verla tan animada a esta hora, más cuando se trataba de su primer día de clases y por lo tanto también el primer día desde que salimos de vacaciones en que debía despertar tan temprano.

- ¿Por qué tan feliz?

- Sigo con el horario cambiado, son como las dos de la tarde para mí

- Que suerte tienes. Te pierdes toda una semana de clases y en vez de despertarte a las seis, para tu cerebro es como si hubieras dormido hasta tarde

- ¿Qué puedo decir? Tengo suerte y planea disfrutarlo mientras dure.

- Rápido niñas, vamos a llegar tarde - Dijo asomándose por la puerta de la cocina al mismo tiempo que terminaba de arreglarse la corbata.

Dejé el tazón en el lavaplatos y tome mi mochila siguiendo a papá y Mackenzie al auto. El camino a la escuela fue bastante ruidoso y animado, a pesar de haber pasado todo la tarde juntas ayer - el día en que volvió - parecía que Kenzie y yo aun no lográbamos ponernos al día porque hablamos durante todo el camino y parecía que aún así no lográbamos decir todo lo que queríamos, lo que al parecer terminó con la paciencia de mi padre ya que a mitad de camino le subió el volumen al programa de radio que escuchaba todas las semanas ahogando el sonido de nuestras voces, al menos en toda la parte delantera del auto.

Si bien la semana pasada todo había ido mejorando día a día, se sentía mil veces mejor estar en compañía de Mackenzie ya que si bien había logrado tener un pequeño grupo de conocidos en cada clase aún me sentía un poco sola porque los únicos amigos que había logrado hacer eran mayores que yo así que por lógica, no estaban en clase conmigo.

Llegamos casi diez minutos antes de que empezaran las clases y pude ver desde lejos a Adam y Aiden hablando al lado de la entrada, lo cual era algo extraño porque estaban solos y al contrario de lo que podría pensar la gente no andaban juntos de un lado y solían estar con sus amigos, además ambos parecían un tanto molestos. Una vez que me vieron, ambos se acercaron a mi y uno de ellos me abrazo bastante fuerte sin previo aviso, no había podido fijarme bien en ellos pero habría jurado que era Aiden hasta que habló, porque si bien incluso su voz era similar sonaba mas bien como Adam.

- ¡Jamie! ¿Cómo está mi mejor amiga en el universo? - enserio me estaba abrazando fuerte y estaba un poco confundida así que no respondí.

Lo alejaron de mi y fue entonces cuando pude confirmar que se trataba de Aiden y que era Adam quien lo había alejado.

- ¿Ves? Eso es a lo que me refiero. Yo no soy así, estás sobre actuando o te estas burlando de mí y más te vale que sea la primera opción.

- Bien, lo siento es solo que perdí la practica. Hola Jay

- Hola... ¿Por qué están actuando tan raro?

- Creí que yo era la única que podía llamarte Jay sin que te molestara

-Me acostumbre - le dije encogiéndome de hombros - Por cierto, ella es Mackenzie

- Soy Adam

- Aiden - dijeron presentándose a cada uno solo que al revés

- No, él es Adam y él es Aiden - le indiqué a cada uno mientras los nombraba aunque al parecer solo logre confundirla - Enserio, ¿Por qué actúan tan raro?

Just for us (JFH #0.5)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora